La UCIR de la Jiménez Díaz atiende en dos meses el doble de pacientes que en un año

El covid-19 ha disparado el uso de los hospitales de los españoles y ha puesto a prueba todo el sistema sanitario. Y para muestra, los datos. Sólo en la Unidad de Cuidados Intermedios Respiratorios (UCIR) de la Fundación Jiménez Díaz han atendido en los dos meses 'pico' de pandemia el doble de pacientes que en un año normal. Es decir, en este centro de la Comunidad de Madrid, uno de los más importantes y que más pacientes recibe a lo largo del año, se ha visto incrementado en un 120% en tan sólo dos meses.

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Enrique Zamorano

Este departamento del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz se encarga de prestar asistencia a pacientes que presentan insuficiencia respiratoria aguda y que, pese a no necesitar ingresar en la UCI, sí deben recibir una serie de cuidados específicos. Si habitualmente su UCIR atiende al año a una media de 250 pacientes de alta complejidad, en los dos meses de pico máximo de casos graves ingresados por covid-19 ha llegado a prestar asistencia a más de 550 personas.

Unidad pionera

Nacida en 2009 y con varios premios por su gestión y eficiencia, esta unidad ha desempeñado un papel clave durante la crisis sanitaria. "La UCIR actúa en dos frentes casi a la vez y evita el colapso de la UCI", asegura la doctora Sarah Heili, jefa asociada del Servicio de Neumología y Responsable de la UCIR de la Fundación Jiménez Díaz.

Pero además, en la fase conocida como hiperaguda "contiene el número de ingresos en UCI evitando intubaciones que requerirían ingreso en esa unidad, ya que son enfermos muy graves pero muchos no necesitan finalmente el recurso a la intubación", gracias a diversos medios de soporte no invasivo. En cuanto a la denominada fase de defervescencia, que en esta ocasión se ha solapado en parte con la fase aguda, "evacúa de las UCI a los pacientes que necesitan mucho tiempo de ingreso para ser liberados del respirador y del tubo, con lo que se logra replegar las camas de UCI para covid permitiendo que puedan atenderse ésta y las otras patologías urgentes con el fin de volver lo antes posible a la normalidad".

"Hemos aprendido que pudimos esta vez con este virus, y que lo volveremos a hacer", reconoce la doctora Sarah Heili de la Fundación Jiménez Díaz

Con este departamento, se logra un menor número de derivaciones a las UCI. Según un artículo publicado 'Archivos de Bronconeumología', la revista de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), las UCIR permiten así ahorrar hasta 500.000 euros por hospital al año. Para llegar a esta conclusión, la investigación analizó precisamente los costes y la seguridad de la Unidad de la Fundación Jiménez Díaz, que cuenta con cinco camas ampliables a ocho en caso necesario.

La involucración de la Fundación Jiménez Díaz para paliar los efectos de la covid-19 en la Comunidad de Madrid ha sido muy notable. Para la doctora Heili, "este hospital lo formamos personas que queremos cuidar de nuestros pacientes, que son el centro absoluto de nuestro trabajo. El centro se transformó en cuestión de días en una estructura capacitada para responder al impacto de esta emergencia. Gracias a esta flexibilidad, a la capacidad de transformación y adaptación a los cambios muy rápidos y violentos de los distintos escenarios pudo absorber el impacto sin colapsar". Y es que son muchas las enseñanzas de esta pandemia. "Hemos aprendido que pudimos esta vez con este virus, y que lo volveremos a hacer", reconoce la doctora.