La Fiscalía se querella contra el jefe de la oficina de Puigdemont por malversación

El historiador Josep Lluís Alay Rodríguez, reconvertido en 2018 en director de "la oficina del expresidente Carles Puigdemont", se enfrenta a un nuevo pulso con la Fiscalía. El 4 de febrero, el Ministerio Público presentó un escrito ante el Juzgado de Instrucción 28 de Barcelona que pone el foco en las recientes visitas de Alay a la cárcel de Lledoners y en cómo viajó en 2018 a Nueva Caledonia como "observador del referéndum de autodeterminación convocado por el Estado francés", desplazamientos que presuntamente se pagaron con dinero público y por los que se le acusa ahora de malversación y prevaricación.

El historiador fue una de las cuatro personas que acompañaban a Puigdemont en el coche cuando fue detenido el 28 de marzo de 2018 en Alemania, hechos por los que se le imputó un delito de encubrimiento al considerar que había ayudado al expresidente a sustraerse de la justicia en un país extranjero. Pese a ello, el magistrado de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón, actual instructor de esta causa, descartó la pasada semana seguir el procedimiento contra Alay porque “no consta que facilitase el vehículo o que lo condujese en algún momento”.

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Tras dar carpetazo a esta primera investigación, la Fiscalía vuelve a la carga con un nuevo escrito que se centra en diversos gastos que ha ido pasando a la Generalitat como director de la oficina de Puigdemont: "En fecha aún no concretada, pero en todo caso comprendida entre el 13 de junio y el 30 de octubre de 2018, presentó propuesta de desplazamiento y viaje individual a su nombre y desde la unidad administrativa de la que es responsable ante el departamento de Presidencia de la Generalitat. En dicha propuesta, señaló como motivo del viaje 'invitat como observador, en la seva funció de Responsable de l'Oficina de l'expresident Puigdemont, del referéndum de Nova Caledonia', indicando que el viaje se realizaría en avión 'ida y vuelta' y entre los días 30 de octubre a 6 de noviembre de 2018", explica la Fiscalía.

Junto a Alay, la Fiscalía se querella también por los mismos delitos contra Meritxell Massó i Carbó, la secretaria general del departamento de Presidencia de la Generalitat de Cataluña que "autorizó el desplazamiento y aprobó el gasto correspondiente, con pleno conocimiento de que aquella actividad no se hallaba entre las atribuidas al querellado ni se correspondía con ninguna de las necesidades personales, políticas o sociales".

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Según los indicios recabados hasta el momento, los billetes de avión para ir a Nueva Caledonia costaron 4.394 euros, cifra a la que el Ministerio Público suma "los gastos en concepto de peajes y reserva del asiento del vuelo de regreso y en concepto de un total de ocho comidas/cenas/almuerzos por importes de 181,58 euros y 159,19 euros, respectivamente". A la vista de que "todos los gastos fueron asumidos y atendidos por el departamento de Presidencia" y que Alay aprovechó su estancia en Nueva Caledonia para "realizar comentarios particulares" a través de Twitter, la Fiscalía considera que el historiador incurrió en un delito de malversación y en otro de prevaricación.

Bajo el epígrafe de "hechos delictivos", el escrito recoge además otros dos gastos por las visitas de Alay a la cárcel de Lledoners, donde se encuentran los condenados del juicio del 'procés': "Los peajes de autopista de los trayectos 'domicili-CPLledoners.Reunió presos' y 'CPLledoners-Oficina.Reunió presos', abonados por él en fecha 3 de septiembre de 2018 [...]. Estos gastos fueron asumidos y atendidos por el departamento de Presidencia".