Regina Otaola, símbolo de la resistencia a ETA, deja el escaño del PP en Madrid

Hubo una época en la que Regina Otaola (Éibar, 1952) abría periódicos y telediarios. Fue tras las elecciones municipales del 27 de mayo de 2007, cuando decidió hacerse cargo de la alcaldía de Lizarza. El pueblo se había quedado sin candidatos electos después de que la ilegalización de ANV -sucesora de Batasuna- y la renuncia del PNV -que reclamó el voto en blanco como protesta- dejaran al PP como única fuerza legítima. Este último partido había conformado sus listas con militantes de fuera del País Vasco, dado que no había nadie dentro que se atreviera a presentarse, y ninguno de ellos estaba dispuesto a aportar más allá de su nombre y apellidos.

Otaola renunció a su acta de concejal por Eibar y viajó hasta Lizarza para agarrar el bastón de mando en territorio hostil. Ningún vecino la saludaba por la calle. Tampoco a los seis ediles que la acompañaban, que ni habían ido en las listas ni residían en la localidad. En febrero de 2008, 402 habitantes censados -de los 610 del pueblo- firmaron una carta de queja que exigía la dimisión de la presidenta de la corporación municipal. Regina ni consideró la misiva. Alegó que la recogida de rúbricas se obtuvo mediante coacción a los vecinos. Si no firmabas, eras del PP y por lo tanto tu gesto te señalaba en el pueblo, argumentó para restarle importancia a la iniciativa.

La aventura de Lizarza duró hasta 2011, cuando EA-Alternatiba ganó las elecciones y sustituyó al PP en el gobierno municipal. Otaola, que ya había anunciado que saldría del PP vasco por discrepancias con su líder, Antonio Basagoiti, aceptó entonces el brazo tendido que le ofreció la entonces presidenta madrileña Esperanza Aguirre, quien meses antes también había 'rescatado' a Santiago Abascal, otro díscolo del PP. Aguirre nombró a este último director de la Agencia de Protección de Datos de la Comunidad de Madrid, cargo que ostentó hasta 2013.

Otaola viajó a la capital de España para encabezar la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor, plaza que ocupó hasta que el pasado agosto la nueva presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, ordenó su relevo. En las elecciones autonómicas del pasado 26 de mayo, dos meses antes, Regina había sido designada diputada autonómica en la Asamblea de Madrid, encargo al que pretendía dedicar todas sus fuerzas. Sin embargo, el lunes la representante del PP decidió renunciar a su acta. Apenas nueve meses después de su elección, decidió retirarse.

En declaraciones a El Confidencial, Otaola asegura que se va porque le "da la gana". Niega que haya habido conflicto alguno con algún miembro de la cúpula popular y anuncia que seguirá viviendo en Madrid y que previsiblemente su próximo paso será el de la jubilación. La exalcaldesa de Lizarza, como pasará a la historia política de España, no quiere hacer declaraciones más allá de estas palabras. Sus amigos, en privado, le recuerdan aquellas "épocas chungas". Daniel Portero, presidente de la asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia y hasta ayer compañero de filas en la Asamblea de Madrid, le envió un mensaje nada más conocer que abandonaba su acta.

"Recuerdo la primera vez que estuve en Lizarza... era 2008 (...). Llegando por aquella carretera al sureste de Tolosa e Ibarra Lizarza pensé: 'Gracias, Señor, porque aquí tenemos una alcaldesa con un par de huevos... No lo hemos perdido todo'. Hacía pocas semanas Txeroki y Ata habían asesinado a Isaías Carrasco, a un empresario en Azkoitia y a los guardias civiles Trapero y Centeno en Capbreton. Aquel 13 de abril del 2008 no pude verte, Regina, en tu pueblo, porque estábamos muy 'mordidos', pero te aseguro que unos cuantos policías y guardias civiles brindamos por ti y por tú coraje. Nunca te olvidaré! Y gracias por la esperanza de LIBERTAD que me diste desde aquel día", le dijo Portero nada más conocer su retirada a finales de la pasada semana.

Durante aquella etapa de 'esplendor', Otaola fue odiada dentro de su pueblo, pero alabada fuera. El 11 de septiembre de 2007, poco después de ocupar el cargo, recibió el XV premio de la Fundación Gregorio Ordóñez "por su ejemplo de coraje y dignidad" así como por su "firme decisión" de defender "el orden constitucional y la libertad de expresión". Apenas unos meses después, en febrero de 2008, la alcaldesa fue galardonada con el Españoles Ejemplares concedido por la fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes), presidida por Abascal y que serviría de germen de lo que posteriormente fue Vox.

Otaola, de hecho, siempre ha estado muy unida al líder de este último partido. Compartió filas en el PP vasco, disidencia luego dentro de la formación y camino hacia la capital de España de la mano de Aguirre. Regina apoyó a Abascal cuando este abandonó el PP y ambos han mantenido una buena relación. Sin embargo, la sempiterna 'alcaldesa de Lizarza' zanja cualquier tipo de rumor. "Seguiré en el PP", sentencia para evitar incluso la pregunta sobre un posible salto a Vox. Lo que está claro es que Ayuso pierde otra referencia en el colectivo de luchadores contra el terrorismo tras la salida de Otaola.