Podemos sondea a perfiles en el mundo universitario para el ministerio de Trabajo

Unidas Podemos busca perfiles técnicos en el mundo de la universidad. Necesita ocupar altos cargos en los ministerios que gestionará en caso de salir adelante el Gobierno de coalición progresista. En los últimos días se han sondeado a catedráticos de Economía de diversas universidades y con vinculaciones sindicales, alguno de ellos incluso podría situarse al frente de una de las secretarías de Estado que dependería de Trabajo.

Para dirigir esta cartera apunta la líder de la confluencia gallega de Unidas Podemos Yolanda Díaz, y las competencias de Seguridad Social se desgajarían para quedar en manos del PSOE. De mantenerse la actual estructura, el ministerio contaría con dos secretarías de Estado (Empleo y Migraciones), puesto que la tercera corresponde a Seguridad Social.

Durante la pasada legislatura, Díaz ya trabajó con diferentes catedráticos para desarrollar proposiciones de ley, como fue el caso de la Ley de tiempo de trabajo corresponsable, en la que colaboraron Amparo Ballester, catedrática de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Valencia, o Jaime Cabeza, catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Vigo.

Compartimentos estancos

Se da también la circunstancia de que el secretario económico de Podemos, Nacho Álvarez, trabaja como profesor de Economía en la Universidad Autónoma de Madrid y es investigador asociado en el Instituto Complutense de Estudios Internacionales. Además, Podemos sigue manteniendo fuertes vínculos con el mundo universitario, ya que la mayoría de fundadores del partido proceden de la Universidad Complutense y algunos han vuelto a las aulas.

El cogobierno tendría compartimientos estancos, por lo que toda la jerarquía dependiente de cada ministerio estará bajo la batuta del mismo partido al que corresponda. Para estos altos cargos de confianza política los morados quieren contar asimismo con perfiles provenientes de la Administración para complementar el organigrama, aunque para las subsecretarías o direcciones generales ya es preciso que sus titulares sean funcionarios de carrera del Estado.

El acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos comprende que no haya vetos cruzados y que cada formación tenga total libertad para elegir a sus ministros y altos cargos. Esto es, un modelo que difiere del desarrollado en otros gobiernos de coalición del ámbito autonómico, donde el reparto es mixto. Se trata principalmente de una preferencia de los socialistas, que se inclinaron por evitar el denominado 'sottogoverno', mezclando cargos de ambos partidos en distintos niveles de responsabilidad de la Administración.

Las confluencias

Desde la formación liderada por Pablo Iglesias avanzan que su pretensión pasa por que los perfiles de su elección serán con experiencia de gestión y se integren donde puedan aportar más según sus conocimientos para desarrollar determinadas políticas. También se ha buscado que todas las confluencias cuenten con representación en el Consejo de Ministros. De esta manera, además de la gallega Yolanda Díaz, la cartera de Ciencia y Universidades estará liderada por un miembro de los comuns y se ha atado otro ministerio que dirigiría el líder de Izquierda Unida Alberto Garzón. La vicepresidencia social estaría en manos de Pablo Iglesias y el ministerio de Igualdad en las de Irene Montero.

La formación liderada por Ada Colau contaría así con un representante en el Ejecutivo de coalición y los nombres que está barajando la dirección del partido para dirigir este ministerio son solamente dos: Rosa Lluch y Ernest Urtasun. Las competencias de Ciencia, Innovación y Universidades se mantendrían en la misma cartera, como hasta ahora.

La intención tanto de PSOE como de Unidas Podemos es celebrar la investidura "cuanto antes", aunque la resolución del TJUE sobre la inmunidad de Oriol Junqueras ha enturbiado las negociaciones entre socialistas y republicanos. Conscientes de los riesgos que se añaden a estas negociaciones a medida que avanzan los días, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ya han hecho sus deberes cerrando el acuerdo programático con la intención de presentarlo al resto de partidos antes de que se produzca la investidura. Las visitas de Iglesias a Moncloa para rematar el acuerdo han sido constantes. Unos avances enfocados a ajustar mejor el calendario para facilitar una investidura lo antes posible.