Sánchez no descarta "ningún escenario", pero no activará por ahora la LSN o un nuevo 155

El Gobierno sigue subiendo la presión contra el independentismo, creando un clima de actuación inminente. El presidente en funciones, Pedro Sánchez, no descarta ya "ningún escenario" en Cataluña tras la escalada de violencia vivida en la jornada de ayer en respuesta a la sentencia del 'procés'. Aunque no precisa cuál será el siguiente paso.

El jefe del Ejecutivo se reunió este miércoles con el lider del PP, Pablo Casado, y después pasarán por la Moncloa Pablo Iglesias (a las 17 horas) y a Albert Rivera (a las 19). Tras despachar con el primero, el Gobierno lanzó un comunicado por el agradeció la "disponibilidad" para el encuentro de Casado, quien le transmitió "su apoyo". Sin embargo, el jefe de los populares se mostró muy duro contra el líder socialista durante la posterior comparecencia.

"Sánchez le ha trasladado un mensaje claro: no descarta ningún escenario, todo esta previsto y actuará , si es preciso, desde la firmeza, la proporcionalidad y la unidad", indicaron fuentes de la Moncloa. De nuevo, el presidente transmitió "un mensaje de reconocimiento a las Fuerzas de Seguridad y de condena firme del uso de la violencia para amedrentar a los ciudadanos y quebrar la convivencia en Cataluña".

El PSOE reclama a la oposición que se comporte de modo leal y apoye al Gobierno. El Ejecutivo "no va a hacer espectáculo, ni nada espectacular"

El Gobierno no descarta pues, "ningún escenario", pero tampoco avanza medidas concretas. Mientras Casado comparecía en la Moncloa, salió en rueda de prensa, pero desde Ferraz, el secretario de Organización y ministro de Fomento, José Luis Ábalos. Él fue quien precisó que aunque el Gobierno "no renuncia" a ningún instrumento, "en estos momentos no se dan los supuestos" ni para aplicar la Ley de Seguridad Nacional ni para activar el artículo 155.

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Ángel Collado

"Eficaz, no apresurado"

En el primer caso, no hay razón porque la cooperación de los Mossos con las Fuerzas de Seguridad del Estado está siendo impecable y es bien "visible". Y en el segundo caso porque "desde luego no se alcanzaría el nivel de espectacularidad que pretende la derecha, porque es un procedimiento tasado, y tiene que seguir sus pasos". Por ahora, recordó Ábalos, lo que hay son imágenes de fuertes disturbios y protestas violentas. "Hay que ser eficaz, no ser apresurado", resaltó. Casado, desde la Moncloa, explicó que había reclamado a Sánchez que envíe un "requerimiento" al 'president', Quim Torra, para que cumpla con sus obligaciones constitucionales, como paso previo al despliegue del 155.

Ábalos pide que no se confunda "moderación con ausencia de firmeza". "Nada va a quedar impune, todo en su momento y "de la manera más eficaz"

El ministro incidió en que el Gobierno no va a buscar, pues, el "espectáculo", sino la "firmeza" desde la "ponderación". "No nos vamos a mover de la ley, y hay recursos para actuar. El Estado sabe responder y el Gobierno estará a la altura de la situación". Ábalos demandó a la oposición que "no confunda moderación con ausencia de firmeza". Que no vaya a hacer "espectáculo, ni nada espectacular" no quiere decir que no vaya a estar "atento" por si hay que adoptar medidas extraordinarias. "Aquellos que creen que la impunidad existe, que se vayan haciendo la idea de que nada va a quedar impune", garantizó, se obrará "todo en su momento y de la forma más eficaz".

Ábalos insistió en que el Gobierno tiene "suficientes recursos para ir abordando la situación" se vayan desarrollando los acontecimientos, sin caer en la "arbitrariedad". Y apuntó que lo importante es no cuestionar la "fortaleza del Estado de derecho", y trasladar "debilidades" que no existen.

"Corresponsabilidad"

El principal propósito de la comparecencia de Ábalos en Ferraz era llamar a la unidad de las fuerzas constitucionalistas, y también avisar al independentismo. "Yo estoy apelando a la unidad, pero hay que practicarla [...]. Que arrimen el hombro y no pongan problemas. Eso se llama lealtad", exigió el secretario de Organización, quien recordó que en 2017 salió al mismo atril de la sede a "defender al Gobierno" de Mariano Rajoy, pese a las diferencias que mantenían ambos partidos, porque lo prioritario era "defender España y el Estado de derecho" y afianzar la imagen de "confianza" en las instituciones. El ministro pidió a PP y Cs que no se dejen llevar por la "presión" de la ultraderecha de Vox ni por su voluntad de lanzar mensajes "electoralistas" o de "tranquilizar a sus propias filas". "Un poco más de corresponsabilidad", demandó, especialmente dirigiéndose al PP y a Ciudadanos, consciente de que Unidas Podemos no secundará el camino de la adopción de medidas extraordinarias.

Ábalos pide a Torra que condene los actos vandálicos "en lugar de estimularlos mediante el subterfugio de aplaudir las movilizaciones"

A través de Ábalos, el PSOE subrayó su "condena taxativa, firme y rotunda" de los episodios de violencia vividos ayer en toda Cataluña y su apoyo "sin fisuras" a la actuación de los Mossos y de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Pidió a los independentistas y especialmente al Govern que se posicionen "contra los desórdenes" y quienes los "instigan, amparan o justifican". El número tres exigió a Torra que "condene" unos actos vandálicos que "perjudican" la imagen de Cataluña y de España "en lugar de caer en la tentación de estimularlos mediante el subterfugio de aplaudir las movilizaciones ciudadanas" contra la sentencia del 'procés'. "No hay idea ni proyecto que pueda ser construido desde la violencia", advirtió.

El ministro también hizo referencia a la petición de Vox de que se declare ya el estado de excepción. Una "ocurrencia", dijo, de quien "no conoce el Derecho parlamentario ni el constitucional", porque es un resorte que es "declarado por el Gobierno mediante decreto acordado en Consejo de Ministros, previa autorización del Congreso de los Diputados". Es una iniciativa "inviable", una expresión más del "populismo que también hay que combatir". "Esas compañías tampoco son buenas", dijo, afeándoles a PP y Cs que pacten con el partido de ultraderecha.