La última jornada de paros parciales en Renfe transcurre con tranquilidad

La cuarta y última jornada de paros parciales convocados por CGT en Renfe está transcurriendo con "tranquilidad" y se están cumpliendo los servicios mínimos declarados por el Ministerio de Fomento, ha señalado a Efe este domingo el sindicato.

Esta última jornada de paros, que se desarrollan entre las 12.00 y las 16.00 horas y las 20.00 y las 24.00 horas y que se suma a las del pasado 31 de julio y el 14 y el 30 de agosto, ha obligado a la operadora ferroviaria pública a suprimir la circulación de 210 trenes, 150 de ellos de alta velocidad y larga distancia, de acuerdo con CGT.

Se trata de las circulaciones que no están incluidas en los servicios mínimos decretados por el Ministerio de Fomento para garantizar la movilidad de los viajeros ante la convocatoria de paro. Estos servicios esenciales aseguran el 78% de los AVE y Larga Distancia que Renfe programa diariamente, el 65% de los regionales y entre el 50% y el 75% de los de Cercanías.

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T.F. Datos: A. H

Renfe procurará recolocar a los viajeros que tengan billete de los trenes cancelados en otras circulaciones, siempre que sea posible. También ofrece la posibilidad de cambiar la fecha de viaje o devolver el billete.

La organización sindical ha cifrado hoy en un 70% el seguimiento de los paros, convocados para reclamar, entre otras medidas, un aumento de las tasas de reposición en la plantilla de Renfe y el freno a la externalización de servicios.

Segunda jornada de paros este fin de semana

Se trata de la última jornada de paros de las cuatro que CGT convocó en Renfe para este verano, que sucede a las que ya se llevaron a cabo los pasados 30 de julio y 1 de agosto, y este viernes 30 de agosto.

Ello ha supuestos que solo en este fin de semana de retorno de vacaciones Renfe haya tenido que cancelar un total 360 trenes, 118 de ellos de AVE y Larga Distancia.

Con esta convocatoria, CGT reclama un aumento de la plantilla de Renfe y, además, que la compañía aplique de forma acumulada la reducción de la jornada laboral semanal a 37,5 horas, de forma que se sumen días libres a la plantilla en vez disminuir en 17 minutos su tiempo de trabajo de cada día.