Calvo: un pacto programático con Podemos es la "única" opción, la coalición está cerrada

No hay vuelta de hoja. El PSOE no retornará a la vía de la coalición con Unidas Podemos. Ya la probó, la exploró de forma "seria" y fracasó porque la última oferta fue rechazada por los morados. Y ya no volverá. Lo que sí está sobre la mesa es un acuerdo de investidura o de legislatura, sobre el programa, con apoyos externos, igual que sucede en otros países europeos, como Portugal y Dinamarca. El Gobierno quiere lanzar un mensaje de firmeza, precisamente ahora que el debate en el grupo liderado por Pablo Iglesias sí está abierto y arrecia la presión sobre él para que acepte la 'vía portuguesa'. De lo que sigue sin haber noticia es cuándo se moverá Pedro Sánchez para procurar su investidura, porque el reloj hacia nuevas elecciones sigue corriendo. Quedan 55 días para que concluya el plazo constitucional de dos meses.

En una entrevista en Radio Nacional, la vicepresidenta, Carmen Calvo, explicitó de manera más clara que el pasado viernes que la alternativa que ahora pone el presidente sobre la mesa es la que se manejó en un principio: buscar un acuerdo programático con Podemos para que apoye un Ejecutivo socialista en solitario: "La fórmula de apoyar al Gobierno con objetivos concretos es una buena fórmula, con mucha historia en Europa", aseguró, cuando se le preguntó cuál será la estrategia negociadora de los socialistas. Más aún, es la "única" vía factible ahora mismo.

El planteamiento de Sánchez es que la oferta de la coalición con los morados era "una propuesta bastante viable y buena" para la gobernabilidad, para que hubiera sido "eficiente". Pero "esa posibilidad está cegada", se cierra "porque la cierra Unidas Podemos", de modo que es "evidente" que hay trabajar "en otras" opciones. "Hay fórmulas en otros países muy ensayadas, donde otro partido de izquierda apoya el programa o una parte del programa legislativo concreto".

Calvo elude entrar en las cuestiones internas de UP: Iglesias sufre la presión de los suyos para aceptar la investidura de Sánchez sin entrar en el Ejecutivo

A Calvo, la jefa del equipo negociador socialista, se le preguntó si remará a su favor la presión de Izquierda Unida o de los anticapitalistas, que piden a Iglesias que permita la investidura de Sánchez sin entrar en el Ejecutivo. "No lo sabemos, porque procuramos tener la costumbre de respetar el interior de los partidos, y no siempre se hace eso con nosotros, y no hace falta ir a tiempos demasiado lejanos", dijo, en referencia a las durísimas primarias socialistas de 2017, en las que se cruzaron interferencias de otras formaciones, incluida Podemos.

Sin depender de los secesionistas

"Serán asuntos internos que podemos ir conociendo por los medios —se sacudió, para calzar su mensaje—. Pero la fórmula de apoyar al Gobierno con objetivos concretos es una buena fórmula, una fórmula con mucha historia en Europa [...]. Queremos un Gobierno progresista a partir del programa con acuerdos y eso requiere un cambio de comportamiento de todos, también de nosotros". Advertencia que también iba para las derechas, a las que el PSOE insiste en reclamar su abstención. La 'vía portuguesa' es la que siempre convenció más a Sánchez: allí, el socialista António Costa gobierna en solitario desde 2015 con el apoyo externo de otras formaciones progresistas. Logró trenzar, de hecho, una alianza inédita con el Bloco de Esquerda y el Partido Comunista Portugués.

Negociar sobre un programa con Podemos es "una buena fórmula" ahora mismo una vez "cegada" la alternativa de la coalición, avisa la vicepresidenta

En realidad, esa opción del acuerdo de investidura o de legislatura es volver a la casilla de salida. Según recordó Calvo, el presidente, a principios de junio, cuando pasaron las elecciones autonómicas, municipales y europeas, ya planteó a UP que se sentaran para hablar de programa. Y "fue durante semanas fue imposible" porque Pablo Iglesias quería hablar primero de los "puestos" en el Gobierno. Una vez que el jefe de Podemos renunció a entrar en el Consejo de Ministros, pudo comenzar una negociación exprés y frustrada sobre una coalición, después de que Sánchez diera "un gran paso al frente" al aceptar esa alternativa. "Ahora tenemos que estar en la única posición correcta. Porque es que no hay otra: ahí no hay alternativa. Es un programa, un objetivo de trabajo conjunto".

Un pacto, añadió, para alcanzar un Ejecutivo progresista que "no dependa de los independentistas". Eso sí, avisó de que ese hipotético acuerdo con Podemos no garantizaría la mayoría ni la estabilidad, por lo que los socialistas tendrían que hablar con partidos que están "muy lejos" de la formación de Iglesias.

La número dos pide al PP que no sea "hipócrita" porque Maroto pactó con Bildu, mientras que el PSOE no ha negociado nada con ellos en Navarra

Respecto a los homenajes a etarras ocurridos este fin de semana en Hernani y Oñati, Calvo afirmó que el Gobierno decidió llevarlo a la Fiscalía porque considera esos hechos "absolutamente rechazables" e "improcedentes". Pero también pidió al PP que no sea "hipócrita", sobre todo ahora que fustiga a los socialistas por acceder probablemente el próximo viernes a la presidencia de Navarra con la abstención de la izquierda 'abertzale'. "El PP ha pactado con Bildu y animó a que lo hagan otros, como dijo [Javier] Maroto [cuando era alcalde de Vitoria]. Cada semana impulsaban propuestas conjuntas con Bildu en el Parlamento vasco". En ese sentido, la vicepresidenta insistió en que el PSOE "no ha negociado nunca con Bildu" para hacer a María Chivite nueva jefa del Ejecutivo foral.