Las 4 causas pendientes de Josu Ternera: las órdenes de entrega a España siguen activas

La detención del histórico dirigente de ETA Josu Ternera vuelve a poner sobre la mesa las causas que tiene pendientes en España. Tras su arresto este jueves en la zona de los Alpes franceses después de 17 años de fuga, fuentes jurídicas informan a El Confidencial de que todavía tiene cuatro procedimientos abiertos en la Audiencia Nacional, todas ellas con órdenes de detención y entrega que siguen activas: el asesinato del directivo de Michelin Luis María Herguera Guinea en 1980, el atentado en la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza en 1987, su imputación por lesa humanidad por los atentados cometidos desde el 1 de octubre de 2004 y su procesamiento en 2008 en la macrocausa conocida con el nombre de 'las herriko tabernas'.

Todas las órdenes de detención y entrega siguen activas, pero el Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, que se encarga de la causa sobre el asesinato del directivo de Michelin, ya ha pedido que se traduzca al francés para acelerar los tiempos, medida que implica además reabrir el sumario y alargar su fecha de prescripción. El resto de causas se reparten entre otros tres juzgados: el número 2 lleva el de la casa cuartel de Zaragoza, el número 3 el del delito de lesa humanidad y el número 5 el de integración en banda terrorista. Las fuentes consultadas apuntan a que, tras tener conocimiento de la detención a través de los medios de comunicación, la Audiencia Nacional pondrá en marcha su maquinaria para lograr la entrega a España del histórico dirigente de ETA.

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Ternera ha sido detenido a primera hora de la mañana de este jueves en una operación conjunta de la Dirección General de Seguridad Interior francesa (DGSI) y de la Guardia Civil española. Francia había dictado la orden de detención para que cumpla en el país galo una condena que tiene pendiente de ocho años de cárcel por su pertenencia al aparato político de ETA, pero al haber sido impuesta mientras se encontraba fugado, el etarra puede aceptarla e ingresar de forma directa en prisión o bien rechazarla y que se repita el juicio. De forma paralela, los juzgados de la Audiencia Nacional pedirán su entrega a España para que responda por las cuatro causas que tiene pendientes.

Ternera ya fue detenido junto a su mujer en Francia en enero de 1989, condenándole entonces a 10 años de prisión por asociación de malhechores, uso de documentación falsa y tenencia ilícita de armas. Tras pasar seis años entre rejas en dicho país, el etarra fue entregado a España en 1996, pero dos años después quedó en libertad. Aunque la Fiscalía intentó que volviera a prisión desde el mismo momento en que puso un pie en la calle, el Tribunal Supremo desestimó sus recursos al considerar que ya había sido juzgado y condenado en Francia por los delitos que le atribuía el Ministerio Público. De esta manera, Ternera pudo convertirse en diputado a los pocos meses de salir de la cárcel, situación que se mantuvo hasta 2002, cuando fue imputado por el atentado de Zaragoza, crimen que no había contemplado la Justicia francesa. A partir de ese año, Ternera emprendió su huida.

Las cuatro causas abiertas

Para hablar de José Antonio Urruticoechea Bengoechea, alias 'Josu Ternera', la fecha clave es el 11 de diciembre de 1987, cuando ETA puso una bomba en la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza que acabó con la vida de las 11 personas, cinco de ellas menores de entre 3 y 12 años. La Justicia le citó a declarar en 2002 por este atentado, argumentando para ello la Fiscalía que en esa época ETA estaba dirigida "de forma absoluta" por él, pero Ternera nunca apareció y se dio a la fuga. Para llevar a cabo su detención, las fuerzas de seguridad han bautizado la operación como 'Infancia Robada' en alusión a la muerte de niños en la casa cuartel.

En 2005, cuando ya estaba en busca y captura, el Juzgado Central de Instrucción número 1 le procesó además por el asesinato de Luis María Herguera Guinea, crimen que se cometió 1980. "El hecho delictivo se cometió a la altura del número 40 de la calle Dato, cuando tres jóvenes sin identificar abordaron al señor Hergueta, y uno de ellos le disparó en dos ocasiones en la cabeza, falleciendo en el trayecto hasta el puesto de socorro de Vitoria", explica el correspondiente auto de procesamiento, al que ha tenido acceso El Confidencial. Modesto García Marañon y su esposa Miren Edurne García, dos trabajadores de Michelin que fueron condenados por facilitar información sobre el directivo a ETA, reconocieron a las autoridades que antes del asesinato tuvieron una reunión con Ternera en la que le entregaron una fotografía de Hergueta "con el fin de secuestrarle".

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Ya en 2015, el juez de la Audiencia Nacional Juan Pablo González procesó por el delito de lesa humanidad a los dirigentes de ETA José Antonio Urruticoechea Bengoechea 'Josu Ternera', Garikoitz Aspiazu Rubina 'Txeroki', Mikel Carrera Sarobe 'Ata', Aitxol Iriondo Yarza y Aitor Elizarán Aguilar. El magistrado basó su decisión en que se trata de los máximos responsables de los asesinatos en masa cometidos por la banda terrorista desde octubre de 2004 y, en concreto, les consideró responsables, entre otros, de los asesinatos del exconcejal socialista Isaías Carrasco, del brigada del Ejército Luis Conde, del empresario Ignacio Uría, del inspector de Policía Eduardo Puelles, de los guardias civiles Juan Manuel Piñuel, Carlos Enrique Sáenz y Diego Salvá, así como de los ciudadanos Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estado, que fallecieron a consecuencia del atentado contra la T4 de Barajas.

La otra causa que tiene pendiente se encuentra en el Juzgado Central de Instrucción 5, donde el ex juez Baltasar Garzón le procesó en 2008 junto a 42 personas por el caso conocido como el de las 'herriko tabernas', el mayor golpe a la estructura de financiación de la banda terrorista. Ternera fue excluido del auto de apertura de juicio oral al encontrarse en rebeldía, por lo que todavía no ha sido juzgado por su participación en este entramado que acabó sentando en el banquillo a 36 personas en 2013. En total, 20 dirigentes de la ya entonces ilegalizada Batasuna fueron condenados por un delito de integración o colaboración con organización terrorista.