Habla el abuelo de los niños asesinados en Godella: "María manda cartas a mi hijo"

En marzo, la Guardia Civil halló los cadáveres de dos niños de tres años y de cinco meses en la localidad valenciana de Godella. Tras la autopsia y ser investigadas las causas de la muerte de los niños, María Gombau y Gabriel S. Carvajal, sus progenitores, fueron detenidos acusados de un supuesto delito de homicidio.

Las pesquisas señalan a María, la madre de los niños, como la autora material de los crímenes, incluso ella ha confesado. En cuanto al padre, Gabriel, permanece en prisión investigado por el doble asesinato, pero el magistrado quiere determinar si tuvo algún tipo de participación y espera las pruebas forenses antes de tomar una decisión.

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Nacho Abad

Salvador F. Carvajal es el padre de Gabriel. Un hombre afable y de verbo fácil y sincero. Vive en México y durante la vídeollamada de Skype que sostenemos a última hora de la noche en España, mediodía allí, enlaza un pitillo tras otro. Esta es la primera entrevista que concede a un medio de comunicación tras el asesinato de sus nietos en Godella.

PREGUNTA.- ¿Cómo te enteras de la muerte de tus nietos y de que acusan a tu hijo de haberlos matado?

RESPUESTA.- Me enteré por mis hijos que están en Canadá, y ellos por conocidos que tienen en Madrid. Después me metí a la red a ver las noticias.

P.- ¿Te planteaste en algún momento que pudiera ser cierto?

R.- Al principio mis hijos y yo creíamos que seguramente había pasado un accidente. Nunca imaginamos lo que sucedió, era impensable para nosotros porque sabíamos cómo amaban a los niños y cómo Gabriel y María se desvivían por ellos.

P.- ¿Cómo está tu hijo en prisión?

R.- Gabriel llamó a Emanuel desde la comandancia de la Guardia Civil. Le dijo brevemente que se despertó y que los niños no estaban y que no logró encontrarlos, además de recalcar que María no estaba bien, que era otra y que él pensaba que necesitaba ayuda. Emanuel grabó la conversación y yo la pude oír. Me di cuenta de que Gabriel estaba completamente coherente, hablando en dos idiomas perfectamente y con lógica en su discurso, lo que me tranquilizó mucho. Mis hijos son personas muy fuertes en su espíritu.

Emanuel va a verle todas las semanas y habla a diario con él. La primera vez Gabriel se desmoronó en un llanto profundo e intenso, lo mismo sucedió con su mamá que también le ha visitado. Gabriel es una persona muy sensible, pero no "llora por los rincones", solo cuando está con personas que sabe que lo aman. Cada vez que habla de sus hijos, lo mismo llora y lloramos juntos por la perdida terrible de nuestros bebés. Hay un dolor muy profundo en nosotros, pero no hay ni rencor, ni rabia, ni resentimiento hacia nadie.

Gabriel está bien, cada vez más tranquilo, su personalidad afable le ha permitido tener buen contacto con sus compañeros de prisión. Al principio estaba muy ensimismado, leía mucho, después entró en la fase de enojo por lo sucedido, fue muy breve (algunos días) pero ahora está mucho más tranquilo. Ayuda en labores de pintura y reparación de cosas de la cárcel, pero está con muchas ganas de que ya lo liberen, porque él no ha hecho nada.

P.- ¿Qué cuenta él de lo que ocurrió?

R.- La versión corta es que María lo despertó queriendo hacer el amor, él se extrañó, la sintió muy fría del cuerpo, sucia de barro, cabello mojado, y como "ida", vio que no estaban los niños, le preguntó por ellos, ella le contesto que estaban en su corazón. Él insistió y ella le dijo que estaban afuera. Gabriel le dijo: "Llévame con ellos". Ella lo "paseó" por varios sitios sin encontrarlos, y entonces Gabriel se desesperó, y empezó con más insistencia a preguntar por ellos, comenzaron a pelearse, ella huyó diciéndole que iba a sumergirse al fondo de una piscina o río para reencarnarse con ellos. Se trató de calmar, pero entró 'shock' casi catatónico, y ya después llegó la policía.

Hay un dolor muy profundo en nosotros, pero no hay ni rencor, ni rabia, ni resentimiento hacia nadie

Hemos decidido no preguntarle nada, que él hable lo que quiera, y así poco a poco nos da detalles.

P.- ¿Es verdad que María le está escribiendo cartas a Gabriel? ¿Qué le dice en esas cartas?

R.- En un principio sí le escribía, hace un tiempo que ya Gabriel cortó la comunicación con ella. Lo hacía porque pensaba que si no le contestaba María se suicidaría y no tenía el corazón para hacerlo. Cuando entró en su fase de enojo, se dio cuenta que María seguía manipulándolo y cortó la comunicación. En esas cartas le decía puras tonterías de que los niños estaban bien, que se reencarnarían, etc. y en algunas de ellas le pide perdón "por lo que ha hecho".

P.- ¿Ha perdonado Gabriel a María?

R.- Considera que está enferma, o que actuó bajo locura, pero no la ha perdonado porque aún no se hace a la idea de que le mataron a sus hijos. Gabriel aún no ha tenido oportunidad de comenzar su duelo, y esto es un gran agravio humano hacia él; ese puente lo deberemos cruzar en su momento.

P.- Acusan las amigas de María a tu hijo de ser frío y manipulador. ¿Qué opinas?

R.- Me da un poco de risa, de todos mis hijos Gabriel es el más sensible, es fuerte de espíritu sí, pero para nada frio. En cuanto a manipulador, considero que están proyectándose en mi hijo. Estamos acostumbrados a decirnos la verdad siempre por dura que sea, así es como se criaron mis hijos. Te doy un dato, que por cierto te van a sorprender las fechas: después del episodio del primer brote psicótico de María, cuando se sale con el bebé a "pasear" y visitar a "los ancestros", el hermano de María convence a Gabriel de que lleven a María a visitar al psiquiatra, Gabriel accede y convence a María de hacerlo, van a la visita el 19 de febrero de este mismo año, de 2019, y la doctora le dice a María que está bien, que ella está en muy buena salud mental. María sale y se lo comunica a la familia. Ellos estaban fuera del consultorio, Gabriel con los niños, la madre y el hermano. Noemí no cree lo que escucha e inmediatamente entra a hablar con la psiquiatra diciéndole que no es posible que María esté bien, que María sabe muy bien lo que decirles a los doctores para que oigan lo que ellos quieren, que así ha sido desde su juventud. La doctora le dice que ella sabe hacer bien su trabajo y que sabe cuándo alguien le miente o no. Ahí está de qué lado se presentan los rasgos de manipulación.

Me da un poco de risa cuando leo que acusan a mi hijo de manipulador. Gabriel es el más sensible de mis hijos, es fuerte de espíritu sí, pero para nada frío

P.- El juez no se cree que habiendo tres teléfonos en la casa, cuando desaparecen los niños, él no llame a la policía. ¿Cómo se explica eso?

R.- Los teléfonos estaban sin batería y no fue apagado intencionalmente, sino porque no tenían batería. Ellos no tienen luz en la casa y días antes la madre de María les había prohibido ir a su casa ni para lavar ropa, ni ir a cargar teléfonos.

P.- ¿Hablabais la madre de Gabriel o tú con frecuencia con María y con él? ¿Estaban normales?

R.- Con bastante frecuencia; yo diría dos o tres veces al mes, su madre también y en fechas especiales más. Por ejemplo, yo (y su madre también) vivimos los nacimientos de los niños en tiempo real por medio de mensajes, fotos, etc. Cumpleaños, fiestas de la escuela de Amiel, cortada de cabellos, etc. La reconstrucción de la casa, la puesta de paneles solares, del agua, de la rehabilitación de la piscina, todo eso, lo tenemos documentado en chats y fotos y videos, además su madre los ha visitado varias veces de igual manera que su hermano. Yo no he podido ir porque no puedo viajar muchas horas en avión debido a una condición cardíaca que tengo.