Rull fue excarcelado sin permiso del Supremo para ver a su hijo el 5 de enero

El 'exconseller' de Territorio, Josep Rull, salió de la prisión de Lledoners el pasado 5 de enero sin autorización judicial para visitar a uno de sus hijos, que se cayó y perdió el conocimiento tras darse un golpe en la cabeza durante un vis a vis familiar y tuvo que se trasladado en ambulancia al hospital comarcal San Juan de Dios de Manresa.

La salida de Rull, que se produjo a las 14:00 horas, fue autorizada por la directora de la cárcel, Paula Montero, pese al rechazo del juez de guardia de Manresa, Pedro V. Cerviño Saavedra, tal y como han confirmado fuentes jurídicas a El Confidencial. Según la normativa penitenciaria, los permisos a presos preventivos tienen que ser concedidos por el tribunal encargado del procedimiento penal, en este caso del Tribunal Supremo. Y esta es la justificación del auto del Juzgado de Instrucción número 4 de Manresa, que explica que la decisión de dar ese permiso "corresponde en todo caso a la autoridad judicial y no a este Juzgado de Instrucción". Por ello, deja claro que "no ha lugar a conceder (ni dejar de conceder) la salida de Rull" y como tal esto tiene que notificarse al solicitante y al Ministerio Fiscal.

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S.D.

Desde el Departament de Justicia de la Generalitat confirman el permiso penitenciario y explican que se hizo "de la manera habitual" igual que sucede con otros presos. "Se trata de excepciones motivadas por la urgencia del caso", explican en un comunicado, que equipara este caso al de aquellos presos que salen de la cárcel para ir a un tanatorio por la muerte de un familiar, el nacimiento de un hijo o cuando un allegado es hospitalizado.

La comunicación al Supremo -que la hizo la directora de Lledoners a las 14:20 horas, cuando Rull ya estaba fuera- no incluye parte médico alguno para apreciar la gravedad del hecho, indican fuentes consultas por este medio. Rull tiene dos hijos, de tres y ocho años, que fueron a visitarle a la prisión ese mismo día. El pequeño se dio un fuerte golpe en la cabeza que no solo le hizo perder el conocimiento sino también la memoria durante un lapso de tiempo que no le permitía ni siquiera reconocer a sus padres, motivo por el cual fue trasladado de manera urgente a un centro hospitalario.

El 'exconseller', para el que la Fiscalía pide 16 años de prisión por rebelión y malversación, salió de Lledoners la víspera del día de Reyes a las 14:00 horas custodiado por varios agentes de los Mossos d'Esquadra y regresó poco antes de la medianoche, como ha adelantado 'El Español'.

El juicio, el 29 de enero o el 5 de febrero

Precisamente este jueves el Tribunal Supremo pidió al Ministerio del Interior que inicie los trámites para el traslado de los presos del 'procés' para que lleguen a Madrid "la última semana del corriente mes de enero". Así lo solicita el magistrado del alto tribunal Manuel Marchena en un escrito en el que recuerda además que "en el momento actual ha sido ya declarado abierto el juicio oral", aclarando en este sentido que "en los próximos días vencerá el plazo para la presentación de los escritos de defensam a los que seguirán la declaración de pertinencia de las pruebas propuestas y el señalamiento de la fecha para el inicio de las sesiones".

Dicha petición afecta a los nueve presos que se encuentran de manera provisional en cáceles de Cataluña: Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Josep Rull, Joaquim Forn, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart, Dolors Bassa y Carme Forcadell. Aunque el magistrado no menciona una fecha concreta para el arranque del juicio oral, el hecho de que quiera a los investigados en Madrid la última semana de enero sugiere que podría comenzar a finales de este mismo mes o comienzos del siguiente.

Tal y como informa este viernes El Confidencial, las fechas que se barajan son el 29 de enero y el 5 de febrero. El deseo del tribunal es comenzar en la última semana de enero, aunque los tiempos marcados para los trámites aún pendientes antes del señalamiento pueden trastocar esta idea. El plazo para la presentación de los escritos de defensa se cierra la próxima semana y el tribunal en pleno debe deliberar sobre las peticiones de testigos que efectúen los 12 procesados a los que se juzgará en el Supremo. Deliberar y decidir cuáles de ellos se admiten y cuáles se rechazan y argumentar en un nuevo auto los motivos que les han conducido a hacerlo.

Ambos días caen en martes y encajan en la iniciativa del tribunal de no dedicar la semana completa a la celebración de la vista y reservar los lunes y los viernes para dar cabida a la gestión de otros asuntos de la Sala de lo Penal que deben continuar tratándose.