El PP abre negociaciones formales con Vox para desbloquear la investidura de Moreno

La dirección nacional del PP ha tomado nota de las amenazas de Vox de desmarcarse de la investidura de su presidente regional, Juan Manuel Moreno, como próximo presidente de la Junta de Andalucía y se aplica a dar al partido de Santiago Abascal el protagonismo que reclama. El secretario general de los populares, Teodoro García Egea, ha mantenido una primera conversación con el 'número dos' de Vox, Javier Ortega Smith, con el fin de abrir negociaciones formales entre ambos partidos para garantizar un proximo ejecutivo "de cambio y regeneración" en esa Comunidad autónoma.

Ambos dirigentes hablaron por teléfono unos 20 minutos y constataron la coincidencia de ambos partidos en la necesidad de abrir un nueva etapa en la gestión de la Junta de Andalucía a favor de la prosperidad de la región. Acordaron además celebrar una primera "reunión de trabajo" el próximo martes en Sevilla para estudiar y "desarrollar" puntos de acuerdo que garanticen la investidura de Moreno en los próximos días.

Después de las declaraciones del candidato de Vox, Francisco Serrano, en contra de algunos de los puntos pactados entre el PP y Ciudadanos, con amago incluido de forzar la repetición de elecciones, en fuentes de la sede de Génova se mostraron más tranquilos con el intercambio de información entre García Egea y Ortega.

Según explicaron en medios del PP, los dos secretarios generales abordaron en primera instancia algunos de los objetivos que deberá acometer el próximo gobierno de la Junta de Andalucía: la realización de una auditoría de los gastos del gobierno autonómico, el desmontaje de la llamada administración paralela o el "fomento de la inversión y el emprendimiento en Andalucía para conseguir que se convierta en una de las regiones más prósperas de Europa".

García Egea insistió a Ortega en la necesidad de articular una mayoría sólida en el Parlamento andaluz que dé apoyo al nuevo gobierno, pero no abordaron el principal punto de fricción de los últimos días con el partido de Abascal: el rechazo de Vox a algunas medidas y dotaciones presupuestarias destinadas a combatir la "violencia de género" previstas en el acuerdo suscrito entre populares y riveristas.