Marjaliza dice que Granados acudió al chófer de Bárcenas para "interceptar documentos"

El constructor David Marjaliza, considerado 'cerebro' de la trama Púnica, ha asegurado este lunes en la Audiencia Nacional que el exconsejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, acudió al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, a petición del excomisario Villarejo para que les ayudara a "interceptar algún tipo de documentación" que el extesorero del PP tenía en su poder. El empresario implica así a Granados en la denominada operación Kitchen, diseñada por Interior en 2013 para recuperar documentos sensibles sobre el partido que tenía Bárcenas.

El empresario, sin embargo, no ha aclarado en ningún momento en qué fechas se produjo este supuesto contacto entre Granados y el conductor, ni tampoco ha profundizado en el hecho de que Sergio Ríos trabajase para el propio exconsejero de Presidencia antes de convertirse en chófer de Bárcenas. "Me pidió que por favor le intentara conseguir el teléfono. Yo hablé con mi conductor y mi conductor le localizó. Me hablaban de que iban a interceptar documentación que llevaba la mujer de Bárcenas a Soto [la prisión]". Sobre el chófer, Marjaliza ha asegurado además que le vendió un piso en Valdemoro con un descuento de 3.000 euros porque así se lo "pidió Paco [Granados]".

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Durante su declaración ante el Juzgado Central de Instrucción número 6, el constructor ha dicho también que Granados recurrió al excomisario José Manuel Villarejo para ocultar a las autoridades españolas la cuenta en Suiza en la que tenía 1,5 millones de euros. Según su versión de los hechos, los contactos con el expolicía se produjeron en torno a 2013, poco antes de que tanto él como Granados fueran detenidos y encarcelados por la trama Púnica. "[Granados] utilizó a Villarejo para intentar paralizar a la fiscalía de Suiza. Tuvimos un par de reuniones con él y nos presentó a un abogado, a Ernesto Díaz-Bastien", ha dicho, afirmando además que tanto él como Granados pagaron a este letrado por sus servicios.

"Yo estaba en shock por el bloqueo de la cuenta. Paco nos dijo esto y fuimos a verle", ha dicho. En lo que se refiere al papel que habría jugado Díaz-Bastién, Marjaliza ha dicho que "pusieron dos abogados suizos que vinieron a España y estuvieron haciendo gestiones que fueron negativas, porque al final mandaron la información de Suiza aquí y salió todo Púnica". Preguntado sobre por qué no había mencionado a Bárcenas ni a Sergio Ríos hasta ahora, en plena investigación de la Audiencia Nacional sobre la operación Kitchen, el empresario ha argumentado que "porque no me habían preguntado".

La operación Kitchen

El Ministerio del Interior reconoció la pasada semana ante la Audiencia Nacional la existencia de la operación policial conocida como Kitchen, diseñada en 2013 para sustraer documentos sensibles al extesorero del PP Luis Bárcenas, y confirmó la utilización de fondos reservados en la misma.

La Dirección General de la Policía entregó para ello al titular del Juzgado de Instrucción número 5, José de la Mata, un escrito en el que explicaba que "hasta el momento se conoce que en dicha operación han participado funcionarios adscritos a la Dirección Adjunta Operativa de la Policía así como a la Comisaría General de Información". La Policía confirmó además que a la operación se sumaron "colaboradores o informadores, alguno de los cuales recibía una remuneración periódica a cambio de la información facilitada".

Con su declaración de este lunes, Marjaliza, que colabora con la Justicia desde junio de 2015 y tendrá que volver a declarar en una fecha todavía por determinar, vincula ahora la trama Púnica con la operación Kitchen.