La exhumación de Franco, de promesa estrella a "posibilidad de no llevarse a cabo"

La exhumación de Francisco Franco no está asegurada. Así lo reconocen los servicios jurídicos del Gobierno en un escrito de 25 páginas entregado a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, que este lunes estudiará el recurso interpuesto por la familia del dictador y decidirá si paraliza cautelarmente el plan de Moncloa. "Cabe la posibilidad de que la exhumación y el traslado no se lleven a cabo y que, en consecuencia, devengan ineficaces el proyecto y la eventual autorización municipal del mismo", confirma la Abogacía del Estado en el mismo.

El escrito no supone un cambio de rumbo del Gobierno, que sigue adelante con su idea de exhumar a Franco, pero abre un nuevo capítulo en la promesa estrella de Moncloa. Atrás quedaron los discursos de Pedro Sánchez y sus ministros en los que la duda no era si la exhumación se llevaría a cabo, sino cuándo: no pudo ser en julio, no pudo ser en agosto, no pudo ser en septiembre, no pudo ser en octubre... Y ahora en diciembre las miradas abandonan el Valle de los Caídos para centrarse en el Tribunal Supremo, que en los próximos meses decidirá si da luz verde al proyecto o todo queda en que 'no pudo ser'.

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En el recurso que se estudia este lunes en el alto tribunal, los Franco critican "los reiterados anuncios por parte de miembros del Gobierno" sin que "ni siquiera se haya tramitado en su totalidad el procedimiento administrativo establecido en el decreto", una situación ante la que defienden que "no es temerario presumir que se terminará llevando a cabo la exhumación del cadáver de Don Francisco Franco antes de existir un pronunciamiento firme en el orden jurisdiccional".

Los servicios jurídicos del Gobierno, sin embargo, califican estos argumento como simples "hipótesis o suposiciones", descartando así cualquier razonamiento que dé por seguro que se vayan a sacar los restos del dictador del Valle de los Caídos. Al fin y al cabo, "ya ha sucedido en obras de mucha mayor envergadura que las aquí necesarias [que se suspendan]", reconocen en su escrito.

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Las dudas en torno al plan de Pedro Sánchez se dispararon el pasado 4 de diciembre, cuando el Supremo admitió a trámite el recurso de la familia. El propio presidente trató entonces de calmar la situación en una entrevista concedida ese mismo día a 'Telecinco', asegurando para ello que era "previsible y lógico" que el alto tribunal hubiese aceptado el escrito de los Franco. "El año 2019 vamos a hacer algo muy importante para este país y para el mundo, lanzar un mensaje inequívoco de compromiso de este país y de esta sociedad con la democracia", sentenció ante las cámaras.

De todos modos, los propios servicios jurídicos del Gobierno dejan claro en su escrito que las palabras del presidente y sus ministros no tienen ya valor alguno en el capítulo que se abre ahora. "Las declaraciones públicas de diferentes miembros del Gobierno a las que alude el escrito de interposición deben reputarse cuestiones metajurídicas ajenas a los términos jurídicos en que debe desarrollarse el debate procesal", defienden.

La pelota, por tanto, ya no está en el tejado de Moncloa, sino en el del Supremo. Y hacer previsiones sobre el resultado de este lunes es como echar una moneda al aire, comentan fuentes jurídicas consultadas por El Confidencial. Algunos aseguran que lo más probable es que el proyecto siga adelantes, mientras que otros se inclinan por una suspensión cautelar. A falta de conocer la decisión, al Gobierno se le abre a partir de ahora un nuevo frente: ya no le vale con convencer a los votantes... Ahora tendrá que defender la exhumación ante los jueces.