El PSOE tacha de "patéticos" y "mezquinos" a PP y Cs por no ver la victoria de Gibraltar

"No he visto a ningún líder europeo hablar en los términos tan despectivos como los que utilizan los líderes de la derecha española". Con esta frase, el secretario de Estado para la Unión Europea, Luis Aguiriano, ha respondido a las críticas que PP y Ciudadanos han hecho al Gobierno sobre el acuerdo alcanzando con Gibraltar, al que han calificado de "timo de la estampita" y de una "humillación" para España.

En declaraciones a RNE, Aguiriano ha explicado que la declaración política de la Comisión Europea para que España tenga capacidad de veto sobre cualquier futuro acuerdo de la UE para Gibraltar es "vinculante" y ha criticado con dureza la oposición que tanto Pablo Casado como Albert Rivera han hecho al respecto al hablar de "humillación" a España. Además, ha tachado de mezquina su postura por colocarse lejos del Gobierno en una cuestión de vital importancia para la política exterior del país y de buscar en todo momento la "crispación" en la sociedad.

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"¿Cómo se puede decir que nos han humillado?"

El secretario de Estado para la UE considera que dicho acuerdo es "un hito histórico" y ha remarcado que mientras en Reino Unido se critica el pacto por no ser beneficioso para el país, "aquí, en España, se habla de humillación". "Hablan con palabras llenas de mezquindad, interpretando con falsedad los resultados", ha dicho en clara referencia a los líderes de Ciudadanos y Partido Popular, a quienes no ve como oposiciones "responsables" ya que en Europa la oposición "critica cuando toca hacerlo, no cuando hay temas de Estado".

Bastante molesto con Ciudadanos y PP, Aguiriano se ha cuestionado en varias ocasiones que "cómo se puede decir que nos han humillado". "Es incomprensible, anda que no hay temas de oposición para hablar", ha asegurado, lamentando que ambas formaciones lo que busquen sea la "crispación" y de denunciando su "incapacidad de diálogo".

Opinión

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Más dura se ha mostrado la presidenta de la Delegación Socialista en el Parlamento Europeo y secretaria de la UE en la ejecutiva del PSOE, Iratxe García, que ha acusado de "patética" a la derecha española por no reconocer que el resultado de la negociación sobre Gibraltar es "una victoria para el conjunto del país".

La eurodiputada y dirigente socialista ha rechazado, en una entrevista en TVE, que una declaración política de los 27 jefes de gobierno, firmada por el presidente de la Comisión Europea, por el presidente del Consejo Europeo y por propio Ejecutivo británico pueda tildarse de "papel mojado" y cuestionarse su validez ante un conflicto jurídico. "Es un acuerdo político fuerte, vinculante y nos sitúa en las mejores condiciones para las futuras negociaciones", ha subrayado.

Tras incidir en que "quien traslada mensajes de falso patrioterismo" respecto a este asunto "debería de estarse alegrando por España, porque realmente se ha conseguido un resultado histórico", ha recordado que no solo el Gobierno español afirma que esta negociación ha sido un éxito para España, sino que lo dicen también el presidente Juncker, el negociador de la UE para el "brexit", Michel Barnier, y la prensa británica.

"El timo de la estampita"

Este fin de semana, ambas formaciones han centrado parte de sus discursos en Gibraltar en plena campaña de las elecciones andaluzas. Especialmente duro con el Gobierno se mostró Albert Rivera, que considera que el acuerdo entre la UE y Reino Unido "sella una tragedia" y supone "dar un paso atrás en la UE". "Esto no es una buena noticia", se lamentó, para añadir que en la cuestión que afecta a Gibraltar el acuerdo no es más que "papel mojado" y "el timo de la estampita".

También criticó que "esto le ha pillado a Sánchez despistado" y "haciéndose fotos en La Habana". "Estaba allí, con la dictadura cubana mientras aquí nos metían un gol por la escuadra en el último minuto a los españoles".

Por su parte, Pablo Casado instó a Sánchez a evitar la "humillación" a España hasta el último momento y le exigió negociar a "cara de perro" en Bruselas para "sacar de allí un buen acuerdo" más allá de "una cartita sin ninguna efectividad jurídica". Tachó el acuerdo de "pésimo" y considera que el Ejecutivo es el culpable de un "fracaso histórico" que ha roto todo lo que el PP de Mariano Rajoy dejó "encarrilado".