Rivera evita la foto con Casado y no acude a la reunión de constitucionalistas del PP

Albert Rivera no acudirá en persona a la reunión impulsada por Pablo Casado entre partidos constitucionalistas de la que el líder del PP decidió excluir al PSOE porque lo que pretende el encuentro es abordar “una estrategia de defensa de la unidad de España y contraria a la forma de actuar del Gobierno” en cuestiones como Cataluña. La iniciativa llegó días después de que el partido del Gobierno anunciara públicamente su “ruptura” con el PP por unas declaraciones de Casado en las que aseguró que el Ejecutivo era “cómplice” del golpe de los independentistas.

Sin embargo, la reunión de los constitucionalistas contará con pocos invitados. Después de que Coalición Canaria anunciara ayer mismo que no acudiría (según explicó la propia Ana Oramas) y habiendo descartado al PSOE, Ciudadanos confirma que Rivera no acudirá a la cita. En representación de Ciudadanos acudirá el vicepresidente de la Mesa del Congreso, Nacho Prendes. Aunque se trata de un cargo institucional de máxima relevancia dentro del partido, la realidad es que Rivera no posará en la foto que entienden está buscando Casado.

En Ciudadanos tienen la sensación de que el líder del PP pretende lanzar una imagen de unidad y afinidad en torno al constitucionalismo y la defensa de la unidad de España liderada por los populares y, de paso, ‘blanquear’ los últimos pactos establecidos con los socialistas tras los “teatrillos parlamentarios” en los que rompieron relaciones. En la formación naranja reconocen que “no se prestarán” a ello y entienden que nadie pone en duda la bandera constitucionalista que el partido y Rivera defienden como principal seña de identidad.

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Por eso, el sustituto de Rivera está pensado meticulosamente: nadie puede acusarles de marcar perfil bajo en la reunión al enviar al vicepresidente de la Cámara representando a Ciudadanos y, al mismo tiempo, el líder naranja evita dar la imagen de un entendimiento con Casado. Sobre todo, porque el partido centrista empezó la semana criticando fuertemente a PP y PSOE por la negociación del nuevo Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). De hecho, Ciudadanos es el único de los grandes partidos que se ha mantenido alejado de las conversaciones.

El propio Rivera y su número dos, José Manuel Villegas, insistían el lunes en que “los viejos partidos” volvían a “repartirse el pastel de los jueces”, simulando una ruptura de relaciones y después “hablándose, juntándose y entendiéndose en el fin de semana” para “seguir mangoneando”. Precisamente despolitizar la Justicia es una de las grandes banderas de la formación naranja, pese a que su iniciativa legislativa se quedó guardada en un cajón por no contar con suficientes apoyos.

Este nuevo pacto entre PP y PSOE vuelve a dar una excusa perfecta a los naranjas para continuar su guerra contra “el bipartidismo” y “todo lo que representa”. Y en este contexto, una fotografía junto a Casado rompería el argumentario de los últimos días y abriría la precampaña de las elecciones andaluzas con una imagen difícil de explicar al electorado.