Colau, Errejón y ahora Bescansa: la última bala contra el liderazgo de Iglesias

Carolina Bescansa ha retrasado este lunes su anuncio oficial para liderar Podemos Galicia, aunque ha iniciado ya la precampaña atendiendo a los medios de comunicación desde Santiago de Compostela y entrando al cuerpo a cuerpo con el secretario general, Pablo Iglesias. Con el líder de Podemos no se habla desde que se filtró su hoja de ruta para derrocarlo en una turbia operación interna y evitar así que fuese el candidato del partido a la presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales. Sin embargo, la diputada y fundadora de Podemos tomó la decisión de elegir Galicia, para gastar la última bala que le permitiría recuperar un importante poder orgánico, poco después de que se hiciese público el denominado 'documento Bescansa'.

Para ello, se dio de baja de Podemos Madrid y se inscribió como militante de Podemos Galicia en el mes de julio, según aseguran a este diario fuentes de la formación en esta comunidad autónoma. La diputada estatal cumpliría de este modo con un requisito reglamentario imprescindible para optar a las primarias internas. Desde la dirección estatal, confirman también que todo estaría en regla para lanzar su candidatura, al ser militante en este territorio antes del cierre del censo. Todo ello después de que el secretario de Organización, Pablo Echenique, se limitase este lunes a valorar que cualquier inscrito en Galicia puede presentarse a las primarias a la secretaría general autonómica y reconocer, a preguntas de los periodistas, que Bescansa "es diputada por Madrid y es cierto que se postuló para ser diputada autonómica en la Asamblea de Madrid".

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El salto a Galicia de Bescansa ha cogido por sorpresa a una buena parte de los diputados de En Marea, confluencia de la que forma parte Podemos, en el parlamento gallego de O Hórreo. Bescansa siempre estuvo inscrita en Madrid, desde la fundación del partido, y como militante madrileña y miembro de la dirección estatal se había mantenido más o menos al margen de la vida orgánica del partido en este territorio. En las pasadas elecciones generales incluso se le propuso encabezar las listas por A Coruña, provincia de la que es originaria, pero prefirió concurrir por Madrid, circunscripción donde fue elegida como diputada en el Congreso. Ahora, su candidatura cuenta con el respaldo de la dirección autonómica saliente encabezada por Carmen Santos, y Bescansa quiere recabar más apoyos en Podemos Galicia antes de hacerla oficial.

La sorpresa generada por este movimiento interno no se limita a la organización en Galicia. Cuando se filtró el 'documento Bescansa', la diputada defendió que el supuesto plan para evitar que Iglesias fuese el candidato en las elecciones generales estaba "fuera de lugar, fuera de foco", argumentando que lo que estaba negociando con Íñigo Errejón, y a quien querría sumar en este plan, solo afectaría a la Comunidad de Madrid. En la hoja de ruta marcada en el documento, y cuya redacción Bescansa atribuyó a un primer borrador realizado por su equipo, no por ella, se defendía que ganar el Gobierno de la Comunidad de Madrid era "la mejor aportación que ahora mismo podemos hacer para garantizar que el cambio político orientará el rumbo del próximo Gobierno de España".

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En todo caso, Bescansa reconoció entonces que mantenía una posición crítica con la dirección estatal, como "conoce todo el mundo". Al mismo tiempo, criticó la línea política del secretario general en la Comunidad de Madrid, Ramón Espinar, afirmando que "defiende un proyecto que no es el que yo comparto". Con Errejón como candidato del partido en Madrid, y la oposición a la dirección estatal de otros territorios como Andalucía y Cataluña, después de que Noelia Bail relevase al dimitido Xavier Domènech, la apuesta de Bescansa por Galicia, de resultar ganadora, sumaría este territorio al bloque de los líderes territoriales críticos con Pablo Iglesias. Ada Colau, por su parte, mantiene la incógnita de si dará el salto o no a nivel estatal, aunque de momento optará a la reelección como alcaldesa de Barcelona.

Este bloque de territorios críticos podría sumar fuerzas para aglutinar la oposición interna a Pablo Iglesias, con las primarias para las elecciones generales, a las que concurriría Bescansa según el documento filtrado, como telón de fondo. Hasta el momento, el único que públicamente ha apostado por que Iglesias no sea el candidato del partido en las elecciones generales ha sido Antonio Maíllo, coordinador de Izquierda Unida en Andalucía y número uno por Sevilla en la candidatura de confluencia con Podemos para las elecciones andaluzas: Adelante Andalucía. En una entrevista con 'eldiario.es', Maíllo era contundente: “Me encantaría que Pablo Iglesias diera paso a Irene Montero en la candidatura a la presidencia del Gobierno”.

A la espera de que se consume el paso adelante de Bescansa para recuperar poder orgánico en un territorio donde En Marea fue la segunda fuerza más votada, y donde se enfrentaría al también diputado estatal Antón Gómez Reino, más cercano a las tesis de Pablo Iglesias, la polarización con la dirección estatal ya ha comenzado. Este mismo lunes, tachaba de "provocaciones personales" los ataques de Iglesias, en referencia a las declaraciones que realizó en una entrevista en 'El Objetivo' de La Sexta, donde mostró sus dudas por su intención de saltar a la política gallega tras dos décadas en Madrid. El que sería su rival, Gómez Reino, advertía también de que Galicia "no puede ser el retiro dorado ni el plan B de nadie", mientras que el portavoz de En Marea en el Parlamento de Galicia, Luís Villares, sentenciaba que "para poder dirigir una organización es necesario conocer el lugar donde tiene implantación y realiza su acción política".