El autobús accidentado en Avilés rebasaba la velocidad máxima cuando impactó

Entre nueve y 10 autobuses de la compañía Alsa cubren diariamente la distancia entre Cudillero y Gijón en poco más de hora y media. Son nueve paradas. Este lunes, el autocar que debería haber llegado a Avilés (la penúltima estación del recorrido) a las 13:25 no lo hizo. El vehículo se estrellaba a una velocidad de 90 kilómetros por hora en una zona de 70 contra un pilar de cemento de un viaducto en obras en la carretera de circunvalación de Avilés, causando cinco muertos y 15 heridos. Fuentes de la compañía han informado de que el vehículo circulaba a 55 km/h 45 segundos antes de que tuviera lugar el accidente.

La investigación se centra ahora en averiguar los motivos por los que el conductor del autobús perdió el control del vehículo. Fuentes cercanas a la investigación han confirmado que el conductor viajaba a unos 90 kilómetros por hora en el momento en que tuvo lugar el accidente en una zona en la que se debe circular normalmente a 80. Desde la Delegación del Gobierno en Asturias, han confirmado a este diario que el conductor rebasaba en el momento del accidente la velocidad permitida en la zona, que se encuentra en obras actualmente y cuyo límite es de 70 kilómetros por hora.

Cuatro personas perdieron la vida en el lugar del accidente. Otra persona lo hacía tras ser trasladada al hospital. En total, tres hombres y dos mujeres fallecidos. El balance de heridos asciende a 15, de los que tres se encuentran en estado crítico y cuatro han sido dados de alta con traumatismo leve. Fuentes cercanas a la investigación aseguran a este diario que al conductor se le ha tenido que amputar, al menos, una pierna.

Las causas del accidente todavía se están investigando. Sin embargo, la más plausible, explican las mismas fuentes, es que el conductor sufriera un desvanecimiento mientras conducía su autobús, provocando que no pudiera "controlar la trayectoria del vehículo". Sin embargo, lo que no queda claro es el motivo por el que el conductor rebasaba la velocidad máxima permitida cuando ocurrió el accidente.

Fuentes de la investigación han señalado a EFE que el autobús se salió de la vía por el margen derecho, regresó a la izquierda y siguió recto, sin que hubiera prácticamente frenada en la calzada, antes de colisionar contra el pilar de hormigón.

El punto de la variante en el que tuvo lugar el accidente tiene la velocidad limitada por las obras que se están acometiendo para dotar de nuevos accesos al Parque Empresarial Principado de Asturias y a la margen derecha del puerto de Avilés, donde también hay colocados separadores de plástico que el autobús ha arrollado antes de empotrarse contra la columna que sujeta el paso elevado.

El conductor, que llevaba trabajando siete años como chófer de la compañía, había pasado las pruebas para trabajar y el vehículo tenía todas las revisiones en regla.