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El juez decreta prisión provisional y sin fianza para la viuda negra de Alicante
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se ha acogido a su derecho a no declarar

El juez decreta prisión provisional y sin fianza para la viuda negra de Alicante

María Concepción fue pillada por una agente de la Policía Nacional mientras acuchillaba a su cuarto marido, con el que se había casado apenas dos semanas antes

Foto: La agente vio desde esta distancia a dos personas acuchillando a una tercera. (EFE)
La agente vio desde esta distancia a dos personas acuchillando a una tercera. (EFE)

El juez ha decretado la prisión provisional y sin fianza para la recién casada de 45 años detenida, junto a otro hombre de 58 años, por presuntamente matar a puñaladas a su marido, de 69 y nacido en Santander, en un aparcamiento al aire libre de la ciudad de Alicante.

El titular del juzgado de Instrucción número 8 de Alicante, Ángel Villanueva, en funciones de guardia, ha acordado poco después de las 20 horas el envío a la cárcel de la mujer y del otro arrestado, después de tomarles declaración y de que ambos se acogieran a su derecho a no declarar. El juez los envía a prisión por la gravedad de los hechos y la posible pena que les podría acarrear, así como por el riesgo de fuga. A partir de ahora, este juez se inhibirá a favor del Instrucción número 5, que dirige Manrique Tejada, que será el que continúe con la investigación.

Parte del pequeño descampado que hay al cruzar la carretera que discurre junto al mar en la Avenida de Villajoyosa de Alicante se tiñó de sangre la noche del pasado lunes. Un gran charco rojo rodeaba a José Luis, un camionero jubilado de 69 años que se había casado hacía apenas dos semanas, cuando llegaron varios coches patrulla. Los policías habían sido alertados por una compañera del departamento de la Científica que paseaba por la colina justo en el momento en el que ocurrieron los hechos.

La mujer, que no estaba de servicio, observó cómo dos personas peleaban con una tercera, se abalanzaban sobre ella y le clavaban un objeto punzante. Al verlo, comenzó a gritarles para que pararan. Les advirtió de que de lo contrario llamaría a la Policía y comenzó a correr hacia donde estaban. Ellos, sin embargo, hicieron caso omiso a las advertencias y siguieron clavando lo que luego resultó ser un destornillador sobre el cuerpo de José Luis. Mientras la agente corría lo más rápido que podía por un camino que no iba directo sino que bordeaba la zona, agarraba su teléfono móvil para llamar al 091.

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La policía dijo que era compañera, que se estaba cometiendo un asesinato junto a la carretera pegada al mar y que iba a intervenir. Cuando llegó, se abalanzó sobre el hombre que en ese momento se encontraba sobre la víctima clavándole la herramienta una y otra vez. Consiguió apartarlo, arrebatarle el destornillador y retenerle tanto a él como a la otra persona, una mujer en silla de ruedas, hasta que llegaron los refuerzos solicitados, que tardaron escasos minutos.

Los policías de los coches patrulla pusieron los grilletes a los dos agresores y contemplaron la terrible escena. José Luis presentaba incontables heridas por las punzadas del destornillador en el cuello y en el pecho. La gran cantidad de sangre que había perdido le provocó la muerte. De hecho, los agentes y los servicios médicos que llegaron posteriormente nada pudieron hacer. El hombre estaba ya muerto cuando se acercaron a verle.

José Luis, que había perdido a su mujer hacía pocos meses, conoció a María Concepción y se casó con ella sin saber que sería su verdugo. La mujer había perdido a su tercer esposo, que también murió. De los dos primeros, sin embargo, se divorció. La Policía investiga aún por qué asesinó a José Luis y qué relación tenía con el hombre que lo hizo, que algunos medios definen como su cuidador, ya que ella iba en silla de ruedas. Algunos vecinos, sin embargo, ponen en duda su discapacidad y aseguran que la vieron de pie fuera de la silla el día de los hechos.

Tanto Francisco P. O. (de 58 años) como María Concepción M. V. (de 45) se negaron inicialmente a declarar en la comisaría provincial, donde se encuentran desde su detención. Este jueves, ambos pasaron a disposición judicial, momento en el que varios agentes tuvieron que introducir en volandas a María Concepción M. V. en los juzgados tras negarse a caminar al ver las cámaras, según explicaron fuentes judiciales. El Grupo de Homicidios ha averiguado ya que la mujer se había casado con José Luis apenas dos semanas antes del asesinato aunque de momento no ha trascendido el motivo que llevó a María Concepción a planear junto a Francisco, su cuidador, el asesinato de su nuevo marido, el cuarto que tenía la detenida.

Foto: El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica, Walter Espinoza, habla durante una conferencia de prensa. (EFE)

Los investigadores tratan de averiguar también si el matrimonio entre María Concepción y José Luis era "de conveniencia", como aseguró al diario 'Información' un amigo del fallecido que este último le dijo antes de morir. Los términos de aquel acuerdo matrimonial podrían ser claves, por lo tanto, para entender el móvil del asesinato que perpetraron con saña e incluso a pesar de las advertencias de la agente que lo vio todo en directo. Según este último diario local, el asesinato se produjo después de que la mujer citara a su marido a una "cena romántica" que en realidad se convirtió posteriormente en una encerrona para matarle.

El juez ha decretado la prisión provisional y sin fianza para la recién casada de 45 años detenida, junto a otro hombre de 58 años, por presuntamente matar a puñaladas a su marido, de 69 y nacido en Santander, en un aparcamiento al aire libre de la ciudad de Alicante.

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