Rafael Hernando, el último 'hombre duro' del Partido Popular
El hasta ahora portavoz del PP en el Congreso ha sido sustituido por Dolors Montserrat
La llegada al equipo de Pablo Casado de la que se perfilaba como secretaria general del Partido Popular no ha tenido lugar en la forma en la que muchos esperaban: Dolors Montserrat era, junto a la exministra de Medio Ambiente Isabel García Tejerina, la candidata favorita para sustituir a María Dolores de Cospedal. Finalmente la que fue titular de la cartera de Sanidad en el último mandato de Mariano Rajoy se ha convertido en la portavoz del partido en el Congreso de los Diputados, un puesto que hasta ahora había ostentado quien fue el 'hombre fuerte' del PP de Rajoy los últimos cuatro años, Rafael Hernando.
El que fuera la máxima autoridad de los 'populares' en la gestión de la oposición parlamentaria se mantuvo oficialmente neutro en todo el proceso de primarias para elegir al sustituto de Rajoy. "Cualquier candidato (del PP) es mucho mejor que Pedro Sánchez", dijo, dejando claro siempre que "todos son necesarios" y que en el partido "no sobra nadie" sino que "falta gente". Lo cierto es que, aun así, el alcarreño finalmente se decantó por la candidatura única propuesta por Soraya Sáenz de Santamaría. Tras casi cuatro años como portavoz del Grupo Popular, Hernando queda así relegado a su cargo de diputado en las Cortes por Almería, que ostenta desde hace 25 años, y asume un nuevo cargo, el de presidente del Comité de Derechos y Garantías.
Hernando entró joven en la política: a pesar de sus estudios —es licenciado en Derecho y tiene un máster en ADE cursado en el Instituto Católico de Administración y Dirección de Empresas (ICADE)— fue concejal de su Guadalajara natal desde el año 1983 (cuando solo tenía 22 años) a 1987, y diputado autonómico después, hasta 1989. Desde 1993 diputado en las Cortes, su experiencia profesional se reduce al mundo de la política y fuera de ella no se le conoce currículo. No obstante, a pesar de no haber cumplido ni cuatro años como portavoz, cumplió su papel como se espera de quien tiene que defender pública y férreamente a su partido.
Fuerte en sus declaraciones, el perfil de Rafa Hernando poco o nada tiene que ver con el de la nueva portavoz de los 'populares', más suave y discreta. Tanto es así, que en los cuatro años de cara visible del partido en la esfera parlamentaria, Rafa Hernando se ha visto envuelto en más de una polémica, todas por sus declaraciones, más o menos acertadas, pero siempre incisivas.
En su llegada a la portavocía del Grupo Popular, tras la designación de su precedesor (Alfonso Alonso) como ministro de Sanidad, se estrenó teniendo que pagar una multa de 20.000 euros por 'atacar' a líder de UPyD. "La señora Rosa Díez va por ahí dando, o intentando dar lecciones de legitimidad democrática", dijo en una entrevista en RNE a propósito de un informe del Tribunal de Cuentas de 2008 sobre la contabilidad del partido. Sus palabras no se quedaron ahí y se repitió, pero en su habitual tono burlesco: "Oiga, es que algunas personas que van por ahí dando lecciones cuando lo que tienen es el pañal muy sucio".
Sin embargo, es un carácter que siempre ha formado parte de su persona. "Yo soy así, no me van a cambiar", advirtió cuando asumió la portavocía del PP. Demasiado claro, acusaban algunos; perfil de batalla, criticaban otros. Él dijo que su intención era recuperar la confianza de los ciudadanos sin cambiar ni un ápice su perfil; y no lo hizo.
Otras salidas de tono
Antes incluso de sus años de portavoz, Hernando ya había dado mucha batalla, tanto en el hemiciclo como en los pasillos del Congreso. Hace más de una década, en 2005, se celebraba en el Congreso una tensa sesión en la que se rechazaba la solicitud del PP para que compareciera la entonces vicepresidenta, Teresa Fernández de la Vega, y explicara las circunstancias del incendio de Guadalajara —un incendio forestal que duró varios días y que se cobró la vida de once miembros de los equipos de extinción—. Una vez finalizada, ya en los pasillos, Ángel Acebes y Eduardo Zaplana tuvieron que sujetar a Hernando porque su compañero de partido pretendía agredir a Alfredo Pérez Rubalcaba, entonces portavoz del Grupo Socialista.
"¡Rafa, por Dios! ¡Rafa, basta ya!", grita alguna de sus compañeras a un joven Hernando que llama "caradura" a Pérez Rubalcaba. También antes de su papel de 'hombre fuerte' del PP Hernando se vio obligado a pedir disculpas al juez Santiago Pedraz después de que éste justificara el auto contra los convocantes de las movilizaciones del 25-S ('Rodea el Congreso'). "No he insultado a nadie", dijo, después de haberlo llamado "ácrata pijo". Un año después, volvió a saltar la polémica cuando, tras un informe sobre desnutrición infantil, Hernando sostuvo que eran casos "puntuales" y que, de producirse, eran "responsabilidad de los padres".
Entre las recientes y más sonadas se encuentra el comentario que hizo a Irene Montero y Pablo Iglesias en pleno debate de la moción de censura a Rajoy, haciendo referencia a su relación. Después de afirmar que muchos habían considerado que Irene Montero había estado "mejor" que Iglesias en su dialéctica parlamentaria en la víspera defendiendo la moción, Hernando aseguró que no daría su opinión: "Yo no sé qué decir, porque no sé qué puedo provocar en esa relación", aseguró; la reacción de Unidos Podemos no se hizo esperar, y la bancada reaccionó entre gritos, quejas, reproches y miradas estupefactas.
Antes de que se celebrara la moción de censura, cuando el PSOE la registró en el Congreso, Hernando fue de los primeros en reaccionar. "La primera la presentaron Pablo y Pedro y esta la presentan Pedro, Pablo y los independentistas. Jugar a desestabilizar España es insensato; la justificación, una impostura", escribió en su cuenta de Twitter. El comentario duró poco tiempo en la red, ya que lo eliminó para escribir algo mucho más suave: "Es la segunda vez que Pedro Sánchez intenta llegar al Gobierno de la mano de los independentistas, ERC y PDeCAT. La primera la pararon los barones del PSOE. Espero que Ciudadanos esté a la altura", dijo.
La llegada al equipo de Pablo Casado de la que se perfilaba como secretaria general del Partido Popular no ha tenido lugar en la forma en la que muchos esperaban: Dolors Montserrat era, junto a la exministra de Medio Ambiente Isabel García Tejerina, la candidata favorita para sustituir a María Dolores de Cospedal. Finalmente la que fue titular de la cartera de Sanidad en el último mandato de Mariano Rajoy se ha convertido en la portavoz del partido en el Congreso de los Diputados, un puesto que hasta ahora había ostentado quien fue el 'hombre fuerte' del PP de Rajoy los últimos cuatro años, Rafael Hernando.