Cifuentes dice que hizo el máster, pero que no encuentra la prueba por las mudanzas

La expresidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes ha dicho este lunes ante el Juzgado 51 de Madrid, que investiga el caso máster, que sí hizo su trabajo fin de máster, que lo presentó ante un tribunal, pero que no lo puede acreditar porque durante los últimos años ha hecho varias mudanzas y lo ha perdido. Aun así, ha añadido, seguirá buscándolo para entregarlo cuanto antes. Ha dicho también que no acudió a las clases porque tenía dispensa académica. Cifuentes ha contestado a la Fiscalía, a la magistrada y a su defensa, no al resto de las acusaciones. Según fuentes jurídicas, la imputada se ha mostrado colaboradora. Tras su intervención, la jueza la mantiene imputada por prevaricación, cohecho impropio y falsedad documental.

La expresidenta madrileña, que ha indicado que también hizo otro posgrado similar en otra universidad del mismo modo, ha acudido al Juzgado 51 de Madrid "puntualmente", según fuentes jurídicas, a las 16:30. Ha comparecido durante poco más de una hora y media. Al comienzo, ha esquivado a los periodistas accediendo al edificio de los juzgados de plaza de Castilla por otra puerta que no es la principal. Además, su visita ha conllevado que anómalamente los informadores tengan que abandonar el inmueble, cosa que normalmente nunca ocurre.

TE PUEDE INTERESAR

Un exedil de Gallardón que aprobó el mismo máster que Cifuentes: "No hice ni el huevo"

Agencias

Estaba citada para declarar como investigada en el denominado caso máster, que trata de averiguar cómo obtuvieron el posgrado en la Universidad Rey Juan Carlos tanto ella como el actual máximo dirigente del PP, Pablo Casado. Cifuentes, que estaba citada inicialmente para el pasado 26 de junio por los delitos de falsificación y cohecho, presentó a última hora de ese martes un certificado médico ante la jueza Carmen Rodríguez Medel, actual titular del juzgado.

En su escrito, Cifuentes explicó que se encontrataba "enferma" y que por ese motivo no podía acudir a la citación, que la magistrada retrasó hasta este lunes. Al mismo tiempo, la instructora envió un forense judicial al domicilio de la expresidenta con el fin de confirmar el grado de enfermedad que sufría y si realmente estaba justificada su excusa. Allí, el médico confirmó que Cifuentes sufría fuertes migrañas y de ese modo se lo trasladó a la jueza.

Un día antes de ese episodio, compareció ante el Juzgado 51 el exdirector del Instituto de Derecho Público de la URJC Enrique Álvarez Conde, que se acogió a su derecho a no declarar hasta que se resolviera el recurso que el propio catedrático había interpuesto ante la Audiencia Provincial de Madrid que alegaba que la magistrada pretendía hacer una causa general contra el máster. El profesor también aseguró que no hablaría hasta conocer de qué se le acusaba, se supiera el resultado de las últimas diligencias y el Tribunal Supremo se posicionara respecto a si se hacía cargo o no de algún punto de la investigación. De momento, el Supremo ya ha remitido al Juzgado 51 la documentación que acredita que Casado es aforado, por lo que esa parte de la investigación podría derivarse al alto tribunal.

Tanto Álvarez Conde como la profesora Alicia López de los Mozos están citados para el próximo 2 de agosto. La causa se inició a partir de las supuestas irregularidades detectadas en el máster de Derecho Autonómico que Cifuentes cursó en la Universidad Rey Juan Carlos, si bien la instrucción ha ido revelando nuevas anomalías que han ampliado la investigación con tres piezas separadas al margen de la principal. La expresidenta, que renunció al uso de su máster, atribuye todas las irregularidades a la universidad y defiende que obtuvo el título legalmente, porque cumplió con todo lo que le pidió el centro y todo lo que exigía la ley.