Borrell defiende que el Gobierno no intervenga en las acusaciones a los presos

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha participado este domingo en unas jornadas sobre Democracia Constitucional en las que ha intervenido y no ha evitado hablar de la situación en Cataluña y del papel que el Gobierno socialista debe tener en el proceso judicial contra los presos independentistas. Borrel ha asegurado que retirar las acusaciones a los presos soberanistas es una cuestión judicial y que el Gobierno no puede intervenir, en alusión a la demanda del independentismo de que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, inste a la Fiscalía general del Estado a retirar las acusaciones a los procesados.

"No soy quien para decir que debe hacer el Gobierno con la Fiscalía. Esto está situado en el terreno judicial", ha señalado en su intervención para clausurar las jornadas de Societat Civil Catalana que se ha celebrado este domingo en Barcelona.

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Sara de Diego

También ha explicado que la euroorden se debe entender como una manera de construir un espacio común, de seguridad, de justicia y de aplicación de los códigos penales, y que la sentencia del tribunal alemán pidiendo la extradición del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont por malversación "tampoco dice lo que dicen (el Govern) que dice".

Por eso, ha explicado que la euroorden es una fórmula de diálogo entre jueces y no entre administraciones. "Es precisamente la gracia de la euroorden. Antes era una relación de gobierno a gobierno, en la que un ministro de Interior le decía al otro ministro que extraditara a alguien. Ahora es el juez español el que pide y el juez alemán el que contesta. Los gobiernos no pueden intervenir", ha aseverado.

Sobre la manifestación de este sábado para pedir la liberación de los políticos presos, ha reconocido que entiende perfectamente que la gente que haya votado la opción independentista manifieste su sentimiento y pida la libertad de la gente a la que votaron: "Es lógico y normal. No debería extrañarnos, al contrario, es una opinión respetable". "Si yo hubiera apoyado a alguno de los políticos independentistas presos seguramente también estaría en la calle pidiendo su libertad, pero eso no les da más superioridad moral", ha sostenido.

La "superioridad moral" del independentismo

A lo largo de su intervención, el actual titular de Exteriores socialista ha elogiado al organizador, Sociedad Civil Catalana, por haber sido "un instrumento importante para reflejar la pluralidad de la sociedad catalana" y ha aprovechado para lanzar un mensaje a los asistentes: "No tenemos que reconocer ninguna superioridad moral a quienes defienden la independencia de Cataluña. Están en su derecho, afortunadamente estamos en un país donde el derecho de defender esta opción está reconocido. Pero no son mejores catalanes que los que pensamos que la independencia no es una buena solución".

Además, ha explicado que el derecho a la autodeterminación que defienden los independentistas "quedó zanjado" en la reunión entre Pedro Sánchez y Quim Torra, en la que las posiciones quedaron "claras". "Una cosa son las declaraciones retóricas que seguramente se hacen de cara a la galería y otra cosa son los hechos concretos", ha dicho sobre esa reunión.

"Dialogar no significa aceptar, pero sí significa saber cuales son los planteamientos de la otra parte. U so es algo que hay que valorar positivamente", ha dicho.