La repulsa por la libertad de La Manada llegará a San Fermín con protestas en la calle

Faltan dos semanas para el chupinazo y la mecha de San Fermín ya está prendida. No la de la fiesta. La de la polémica. La chispa ha surgido por la decisión de la Audiencia de Navarra de decretar la libertad provisional bajo fianza de 6.000 euros a los cinco miembros de La Manada que fueron condenados a nueve años de prisión por abusar sexualmente de una joven de 18 años durante la primera noche de las fiestas de 2016. Los Sanfermines de 2018 no han empezado y todo hace indicar que van a pasar a la historia por ser las fiestas de la protesta. La calle ya es un clamor contra la última decisión judicial ante las agresiones sexuales y este rechazo se va a reproducir durante los días festivos.

Llueve sobre mojado en Pamplona, que se ha vuelto a revolver ante lo que consideran una nueva “injusticia” judicial que “nada ayuda” a lucha contra las agresiones sexuales, según denuncian colectivos feministas. La ciudad ya se agitó en 2009 con la condena de 12 años y medio a Diego Yllanes por asesinar en los Sanfermines del año anterior a la joven de Irún Nagore Laffage por resistirse a mantener relaciones sexuales. Y, ahora, la indignación contra una resolución de la Justicia se acrecienta cuando aún está muy presente en la calle la rabia por la “exigua” pena de nueve años de prisión que la Audiencia Nacional impuso el pasado 26 de abril a los integrantes de La Manada, que fueron exonerados de un delito de agresión sexual. El tribunal no atendió al criterio de la Fiscalía y las acusaciones, que reclamaban entre 22 y 25 años de cárcel y que ahora han recurrido la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) al insistir en que hubo violación.

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Aún es pronto para conocer la respuesta que se va a dar durante los Sanfermines –todavía no se ha hecho público el auto de la Sección Segunda, si bien El Confidencial adelantó este jueves el contenido de la resolución que se notificará hoy a las partes–, pero colectivos feministas y las instituciones se muestran a favor de mostrar la repulsa por la resolución judicial durante las fiestas para "avanzar en la lucha contra la violencia machista". “Si La Manada sale ocupamos las calles”, es el grito de las agrupaciones feministas, que van a llevar a la calle durante los próximos días el clamor contra la resolución judicial. De momento, las primeras y ruidosas protestas han tenido lugar este jueves en muchas ciudades españolas. La Audiencia de Navarra ha adoptado esta medida cuando está a punto de vencer el plazo máximo de dos años estipulado para la prisión provisional, si bien cumplido este periodo la ley contempla la revisión de cara a su posible ampliación hasta cumplir la mitad de la condena -en este caso, hasta los cuatro años y medio-. El Gobierno de Navarra, que está presente en el caso como acción popular junto al Ayuntamiento de Pamplona, ya ha anunciado su intención de recurrir la excarcelación provisional de los integrantes de La Manada a la espera de que el TSJN aborde los recursos presentados contra la sentencia, lo que está previsto para septiembre u octubre.

El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, ha mostrado su "desacuerdo más absoluto" con la decisión de la Audiencia de Navarra. Dentro del Gobierno municipal son partidarios de evidenciar la protesta durante las fiestas si bien, según resaltan fuentes del Ejecutivo local, todavía es “pronto” para saber de qué forma se puede canalizar este clamor. En todo caso, la decisión judicial no va a cambiar el amplio dispositivo que el consistorio va a implantar para evitar las agresiones sexuales, el cual ya se reforzó el pasado año para evitar otros casos como el de La Manada.

La decisión judicial no va a cambiar el amplio dispositivo para evitar agresiones sexuales, que ya se reforzó el pasado año para evitar otros casos

El pasado año cerca de 3.000 policías velaron por la seguridad en las fiestas dentro de un dispositivo que incluía especialistas en atención a víctimas y en el tratamiento de los delitos de agresiones sexuales. Asimismo, se reforzó la instalación de cámaras de alta definición en los lugares más frecuentados de la capital navarra, especialmente en la plaza del Ayuntamiento, para prevenir conductas no deseadas e identificar a los agresores en caso de episodios de violencia machista. "Los Sanfermines están muy por encima de estas situaciones y la ciudadanía de Pamplona sabrá estar a la altura, como ha estado siempre, desde el momento que decidió ponerse a la vanguardia de la lucha contra los ataques sexistas", afirma el alcalde de Pamplona.

El Ejecutivo municipal sí va a hacer hincapié en la campaña 'Pamplona libre de agresiones sexistas' que pone en marcha con motivo de los Sanfermines con el apoyo del resto de instituciones navarras. El ayuntamiento ha editado la guía 'Por unas fiestas libres de agresiones sexistas' que se puede descargar en la web de los Sanfermines, donde se reflejan las pautas a seguir en caso de agresión sexual. El objetivo es, según señala la edil de Igualdad, Laura Berro, "erradicar todas las agresiones sexistas y en el caso de que se produzcan apoyar a las víctimas y que el agresor reciba cero impunidad.

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"San Fermín pretende ser una fiesta segura para las mujeres. Es muy importante la convivencia y el respeto entre quienes forman parte de la fiesta para disfrutar lo máximo posible", sostiene el Gobierno municipal. Para combatir las agresiones sexuales se repartirá el pin con una mano roja que ya forma parte de la fotografía de las fiestas desde que en 2016 los integrantes de La Manada abusaran sexualmente de una joven de Madrid. De hecho, los pasados Sanfermines ya se significaron por los mensajes y actos en la calle destinados a lograr una mayor concienciación social en contra de las agresiones sexuales. El "no es no" estuvo muy presente el pasado año y en esta ocasión imperará el grito de "no es abuso, es violación" que se escucha en Pamplona desde la sentencia de la Audiencia de Navarra.

Los movimientos feministas llevarán su protesta a la calle durante las fiestas. También lo harán las peñas. Fiesta y reivindicación social se darán más si cabe la mano. "Exigimos apuestas institucionales y medidas valientes, así como compromisos de todos los agentes políticos y sociales", afirma el Movimiento Feminista de Pamplona.

La movilización ciudadana para que las víctimas de la violencia machista sean las protagonistas del chupinazo acumula más de 117.000 firmas

En Pamplona había voces que pretendían evidenciar la protesta contra la sentencia de La Manada ya con el mismo chupinazo. El clamor contra la sentencia de la Audiencia de Navarra provocó una movilización ciudadana para pedir que el inicio festivo corriera a cargo de víctimas de la violencia machista en apoyo a las mujeres que son objeto de agresiones. Esta reivindicación para que de forma “excepcional” se acordara una candidatura unitaria para que las víctimas de la violencia machista sean las protagonistas del arranque festivo acumula más de 117.000 firmas en la plataforma change.org. Sin embargo, esta propuesta de consenso no ha cuajado y son cuatro las candidaturas que optan a lanzar el chupinazo. De hecho, este mismo jueves termina el plazo para la votación popular de cara a designar el protagonista del inicio festivo de este año. Sea quien sea el encargado de lanzar el chupinazo, lo que es seguro que el clamor contra la decisión de la Audiencia Nacional sonará con fuerza el 6 de julio a las 12.00 horas.