Golpe a los colegios 'indepes': un juez anula el apoyo de los arquitectos catalanes al 1-O

La deriva de muchos colegios profesionales en Cataluña a favor de la independencia ha topado con la justicia. Una sentencia ha anulado la adhesión del Colegio de Arquitectos de Cataluña (COAC) a un manifiesto a favor del derecho a decidir antes del referéndum ilegal del 1-O. Un grupo de colegiados denunciaron que eso vulneraba su libertad ideológica y así lo entiende un juzgado de Barcelona al considerar que los colegios de colegiación obligatoria no pueden entrar en política. Hay recursos pendientes en otros colegios profesionales.

Días antes del 1-O, decenas de colegios profesionales en Cataluña sumaron al manifiesto 'Colegios por el referéndum', en el que lamentaban que el 1-O no se produjera de forma pactada y reiteraban el apoyo "al derecho a decidir de los ciudadanos de Cataluña". Era parte del apoyo que exhibía el Gobierno de Carles Puigdemont como apoyo de la sociedad civil catalana. El único colegio relevante que no se sumó fue el Colegio de Abogados de Barcelona, cuya decana entró en el cargo en junio de 2017 con el compromiso de despolitizar la institución. El colegio tenía fresco el fiasco de 2013, cuando apoyó el pacto nacional a favor del derecho a decidir impulsado por Artur Mas. Entonces, un grupo de colegiados recurrió a la Justicia y en diciembre pasado el TSJ catalán les dio la razón.

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Aquella primera sentencia consideró que al suscribir el pacto "se rompe con la neutralidad ideológica o política que se espera del Colegio Profesional". "Dado que la colegiación es obligatoria para quien ejerce la abogacía, no deja otra opción a los colegiados que alinearse con la opción ideológica o política que el Colegio Profesional ha asumido", concluyó el tribunal. Sociedad Civil Catalana consideró que con el nuevo manifiesto, “las juntas directivas de los colegios realizan una representación tramposa de sus colegiados y que además es ilegal”.

En 2017, y con el fervor independentista al máximos, los colegios multiplicaron su adhesión al independentismo. Los separatistas han copado las cúpulas de estos colegios: médicos, arquitectos, ingenieros... y su sumaron a un manifiesto a favor del derecho a decidir. El texto se rebajó y no hablaba directamente del 1-O pero seguía teniendo un sesgo político. Muchos de colegios los firmantes representan a miles de profesionales que no tienen elección. Cuando la colegiación obligatoria no pueden ejercer sin estar en el colegio.

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Por eso muchos profesionales no independentistas se agruparon y recurrieron la adhesión de sus respectivos colegios. El primero que ha conseguido sentencia es el colectivo de arquitectos. Invocaron "la vulneración del derecho a la libertad ideológica y de pensamiento" recogido en la Constitución. Además pedían el cese inmediato del entonces decano del colegio de arquitectos de Cataluña, Lluís Comeron, que después ha sido elegido decano del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España.

La sentencia, a la que ha tenido acceso El Confidencial, no concede esta destitución, pero sí entra a valorar "la adhesión político-jurídica" al manifiesto independentista, que "no constituye ningún fin público profesional de interés general al que se ha dirigir tal colegio profesional, y máxime cuando no se cuenta con la totalidad de la aquiescencia de los miembros colegiados, ejercientes o no, para emitir ese acuerdo". La sentencia da por reproducidos los argumentos de la sentencia de 2016 contra el Colegio de abogados de Barcelona.

"La colegiación es obligatoria para los arquitectos, por lo que obligaría a sus colegiados a alinearse con la opción ideológica política del colegio"

"Nos hallamos ante un COAC en donde la colegiación es obligatoria e imprescindible para el ejercicio de la profesión de arquitecto, por lo que tal hecho obligaría 'per se' a sus colegiados a alinearse con la opción ideológica o política que el colegio profesional en boca de su junta de Gobierno ha asumido y expresado". Y la sentencia concluye que la adhesión al manifiesto "se están invadiendo parcelas (en nuestro caso de los recurrentes) de su libertad ideológica y de pensamiento, libertad de expresión en su vertiente negativa, el principio de igualdad (no se ha justificado de forma razonable esa desigualdad en el trato ideológico de los recurrentes) y el de asociación".

Ricardo Gómez Val, cabeza de lista de la candidatura que promueve la neutralidad política del colegio, opina que esto demuestra que "los colegios de colegiación obligatoria no pueden pronunciarse en política". Y añade: "Llevamos meses luchando por eso y nos dan la razón. Siguen en la politización pero vamos a intentar enmendarlo". Y sobre el hecho de que el entonces presidente ascendiera a liderar todos los colegios de España, opina: "El resto de decanos de España lo eligieron a sabiendas de su posicionamiento".