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El juez Llarena estudia acudir a la Justicia europea y paralizar la euroorden
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considera que el tribunal aleman se ha extralimitado en su valoración

El juez Llarena estudia acudir a la Justicia europea y paralizar la euroorden

Irá al TJUE para plantear una cuestión prejudicial acerca de la aplicación de la OEDE al considerar que el tribunal Alemania se extralimita al valorar la intensidad de la violencia

Foto: De izquierda a derecha los magistrados del Tribunal Supremo, Jose Ramón Verdugo y Pablo Llarena. (EFE)
De izquierda a derecha los magistrados del Tribunal Supremo, Jose Ramón Verdugo y Pablo Llarena. (EFE)

El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, estudia recurrir al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para plantear una cuestión prejudicial acerca de la decisión marco relativa a la Orden de Detención Europea (OEDE) y a los procedimientos de entrega entre Estados miembros. En el caso de que el magistrado decida finalmente presentarla, la tramitación de la euroorden en manos de Alemania quedaría en suspenso, apuntan fuentes del alto tribunal.

Esta estrategia pone en manos de Europa el arbitrio de la diferencia de criterio sobre la entrega, después de que la Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein resolviera ayer en contra de la petición del instructor. Esta misma mañana se ha conocido que la Fiscalía alemana no ve encaje para recurrir la decisión lo que condenaría a España a juzgar a Carles Puigdemont únicamente por el delito de malversación. La rebelión quedaría fuera.

Por qué la euroorden no es automática

Llarena considera que la decisión del tribunal alemán ha desbordado la naturaleza de la OEDE, porque la Audiencia hace una valoración sobre la intensidad de la violencia que no procede, informan a El Confidencial fuentes jurídicas. Es decir, cuestiona que los tres magistrados alemanes hayan entrado en el fondo de la cuestión cuando una tramitación de este tipo debe limitarse a comprobar si el hecho delictivo queda recogido en la legislación del país que examina la solicitud.

La cuestión pondría en manos de Luxemburgo la duda del juez que quiere saber si cuando un Estado de la UE activa una euroorden, el Estado al que se le reclama la entrega (en este caso Alemania) puede limitar su capacidad de juzgar tras realizar consideraciones que afectan a aspectos fácticos, como en este caso la intensidad de la violencia.

El tribunal alemán se ha basado en que el comportamiento de Puigdemont no es penalmente punible en Alemania porque el delito alemán de alta traición -al que habría que asimilar los hechos en aplicación de la doble incriminación- requiere que haya una "violencia" tal sobre terceros que presione al "órgano constitucional" hasta el punto de doblegar su voluntad. "Este no es el caso aquí", sostiene.

Foto: Vista del exterior de la prisión de Neumünster. (Reuters)

Antes de tomar una decisión definitiva, el juez Llarena escuchará a las partes. Tras estudiar la resolución, que aún no le ha sido remitida, pedirá al menos informe a la Fiscalía del Tribunal Supremo, que ya ha adelantado, en una nota de prensa, que estudia ya ejercitar las acciones pertinentes para la protección y defensa del orden jurídico europeo relativas a la OEDE".

Tras escuchar los distintos criterios, el magistrado se pronunciará, informan las fuentes consultadas. Si se decanta por esta opción la primera consecuencia sería la de ganar tiempo. Alemania no podría pronunciarse hasta que los magistrados del TJUE respondieran a las dudas que plantee el instructor español, algo que puede tardar meses. Es previsible que durante ese tiempo, aún indeterminado, Puigdemont -libre previo pago de una fianza de 75.000 euros- deba queda a disposición de la Justicia alemana, obligada a cumplir lo que decidiera el tribunal europeo.

La defensa del 'expresident', ya barajaba acudir a Europa pero por otro motivo. Sus abogados tienen ya preparada otra cuestión prejuicial, en este caso por la violación de sus derechos, entre ellos los políticos.

El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, estudia recurrir al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para plantear una cuestión prejudicial acerca de la decisión marco relativa a la Orden de Detención Europea (OEDE) y a los procedimientos de entrega entre Estados miembros. En el caso de que el magistrado decida finalmente presentarla, la tramitación de la euroorden en manos de Alemania quedaría en suspenso, apuntan fuentes del alto tribunal.

Carles Puigdemont Tribunal Supremo Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE)
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