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Sánchez avisa a Rajoy: si los PGE fracasan, el PSOE no apoyará su aprobación vía decretos
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RUEDA DE PRENSA EN FERRAZ

Sánchez avisa a Rajoy: si los PGE fracasan, el PSOE no apoyará su aprobación vía decretos

Rechaza las cuentas de este año porque consolidan un Estado "mínimo, 'low cost", son "ideológicos" y "continuistas", además de "ineficaces". Y no respaldará la estrategia del Gobierno

Foto: Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa este 2 de abril en Ferraz. (EFE)
Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa este 2 de abril en Ferraz. (EFE)

El PSOE no apoyará los Presupuestos Generales del Estado de 2018. En ningún formato y bajo ninguna circunstancia. Ni tampoco caerá en la "frivolidad" de que cinco de sus diputados los respalden "por azar", como quería el PP, para salvarle así la papeleta al Gobierno. El voto será contrario siempre, aunque el presidente del Gobierno intente rescatar en la medida de lo posible sus cuentas en caso de ser tumbadas y llevar las medidas estrella más importantes a la Cámara para su convalidación.

Los socialistas ya se ven venir desde hace semanas que Mariano Rajoy no va a poder sacar sus PGE adelante. En una entrevista en El Confidencial, Pedro Sánchez ya dijo que si no se aprobaban, el presidente tendría que convocar elecciones generales, y una semana más tarde añadió que si no llamaba a las urnas, al menos debía someterse a una cuestión de confianza. Las dificultades siguen existiendo, dado que el 155 continúa en vigor en Cataluña y el PNV ha dejado meridianamente claro que no se sentará ni a negociar mientras que persista la intervención de la autonomía. Así que si nada cambia, el escenario que Ferraz ve más probable es el de que Rajoy intente salvar todo los posible de sus Presupuestos —como el aumento de las pensiones o la subida salarial a los funcionarios—, aprobando reales decretos leyes que, para su convalidación, requieren de la mayoría del Congreso. Mayoría que tampoco tendría garantizada y en la que no quiere estar el PSOE.

Un Gobierno que no saca su principal ley no tiene más que decir, está agotado y debe someterse a una cuestión de confianza


"El fondo y la forma son igual de importantes en democracia. Y un Gobierno que no saca su principal ley no tiene más que decir, está agotado y finiquitado y debe someterse a una cuestión de confianza", sostuvo este lunes el propio Sánchez en rueda de prensa en Ferraz, la primera en la sede federal tras las vacaciones de Semana Santa y la primera en un mes. El líder socialista argumentó que el Ejecutivo de Rajoy "intenta convencer los derechos en mercancías", no plantea un "reequilibrio de las cuentas públicas" ni tampoco reconoce subidas de pensiones establecidas por ley, como las prestaciones de viudedad, cuya base reguladora debería aumentarse del 52% al 60% (así figuraba en una ley socialista de 2011 y que el PP congeló), y en cambio solo crece al 54%.

Foto: Manu Escudero, secretario de Economía del PSOE, este 27 de marzo en rueda de prensa en Ferraz. (EFE)

"Levantar la dictadura del 0,25%"

Para el PSOE, que el Gobierno plantee para 2018 una subida de las mínimas y de las de viudedad del 3% es insuficiente, porque no se sabe si se prolongará en el tiempo y porque a la postre mantiene el alza de solo el 0,25% para los jubilados que más cobran. Es decir, marca un "horizonte de incertidumbre" para "muchísimos pensionistas", no pone sobre la mesa una "hoja de ruta" clara. ¿Qué tienen que hacer los mayores entonces para reivindicar sus derechos?, se preguntó. "¿Que se manifiesten año a año?". Lo que hay que hacer es "levantar la dictadura del 0,25%", concluyó.

Sánchez se niega al préstamo de cinco votos al "azar" como pedía el PP para sortear el "chantaje" del PNV a las cuentas de 2018

Fuentes de la dirección dejaron claro posteriormente que, en efecto, el PSOE no respaldará los decretos leyes que pueda intentar sacar el Gobierno en caso de que sus Presupuestos sean tumbados. Su tesis es que al Ejecutivo de Rajoy se le "perdona" todo —como no presentarse a una investidura y rechazar el encargo del Rey, como ocurrió en 2016—, pero a su juicio no puede pasarse por alto una derrota parlamentaria tan pesada como el rechazo a las cuentas del Estado. En caso de recibir ese revés, el presidente, "por higiene democrática" debería o convocar elecciones o someterse a una cuestión de confianza, y por eso Ferraz entiende que es injusto que se mire al PSOE. Es Rajoy, insisten, quien deberá explicar por qué no saca su principal ley adelante.

Pedro Sánchez sobre los PGE: "Estamos ante el intento de consolidar el Estado social low cost"

Sánchez, durante su comparecencia en la sede federal, desgranó las razones que llevan a los socialistas a votar no a los PGE, postura ya anticipada someramente por el responsable de Economía de la ejecutiva, Manu Escudero, hace una semana. Uno, que llegan "con seis meses de retraso", es decir, que aterrizan en el Congreso "tarde y mal". Dos, son "continuistas", porque vuelven a plantear un ajuste sobre el gasto en lugar de buscar el aumento de los ingresos.

Tres, porque son unos Presupuestos "ideológicos, no sociales", por lo que el Gobierno intenta "consolidar un Estado social mínimo, 'low cost", con un bajo porcentaje de gasto público (del 38%), más en línea de países como Bulgaria que en la media del conjunto de Estados de la UE, que lo sitúan "en el 45-46%", "y no digamos ya países como Dinamarca". Y ese propósito del Ejecutivo es "sangrante y preocupante" en un país como España, que encabeza las estadísticas de desigualdad.

Foto: El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez (i), y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. (EFE)

Alternativa presupuestaria, la semana próxima

Cuarta razón: porque suponen un "ataque al Estado del bienestar", con baja inversión en educación o dependencia, y porque no plantean medidas extraordinarias que permitan reducir el déficit de la Seguridad Social. Quinta, porque son cuentas "ineficaces", además de "injustas", porque Hacienda ni siquiera ha propiciado que España salga del brazo de la vigilancia de la UE, al mantenerse dentro del Procedimiento de Déficit Excesivo. Seis, porque no se aborda la modernización del aparato productivo ni una redistribución del crecimiento. Y siete, porque son unos PGE "no creíbles", porque con una tasa de crecimiento inferior y una rebaja fiscal fruto de su acuerdo con Ciudadanos, pronostica un incremento de la recaudación del 6,5%, frente al 6,4% de 2017.

Para el PSOE, los PGE son "continuistas", suponen un "ataque al Estado del bienestar", no son "creíbles" y son "injustos", además de "ineficaces"

La dirección explicará la próxima semana su alternativa presupuestaria, de la que Sánchez avanzó dos líneas básicas: se respetará el cumplimiento del objetivo de déficit y demostrará que es "posible" una política "expansiva".

Pedro Sánchez ve "compatible" su fondo de pensiones con defender el sistema público

Por la mañana, Javier Maroto, vicesecretario de Política Social y Sectorial del PP, pidió al PSOE cinco votos al azar de sus diputados para sortear el "chantaje" del PNV a los Presupuestos. Sánchez contestó que ni hablar: "Somos un partido serio, frivolidades ninguna".

Moción de censura a la vista en Madrid

El PSOE, por su parte, está ya preparando el terreno para una moción de censura a la presidenta madrileña. Sánchez advirtió de que Cristina Cifuentes debe dar explicaciones en el pleno de este miércoles, "y aclarar las dudas sobre su formación académica". Y, en función de eso, los socialistas "tomarán nota y actuarán en consecuencia", y "todas las opciones están abiertas".

El líder anuncia una respuesta "contundente" del PSOE si Cifuentes no da explicaciones en el pleno. El partido también baraja pedir su dimisión

El secretario general no quiso precisar las medidas que adoptará el partido en Madrid a partir de la sesión en el hemiciclo —"paso a paso"—, pero sí prometió respuestas "contundentes" para devolver la estabilidad a la política madrileña y "recuperar" el buen nombre de las instituciones. Y aunque Sánchez no quiso adelantar "ningún escenario", sí recalcó de que lo hace el PSOE por ahora es avisar a Cifuentes de que tiene que dar las explicaciones pertinentes —que no ha dado hasta ahora, porque se ha "escondido" y ha amenazado al periódico que destapó la noticia, eldiario.es, con una querella—, "y si no las da, la obligación de la oposición es actuar en consecuencia". "Y no miraremos ni a derecha ni a izquierda", sostuvo, dando a entender que negociará con Podemos y Ciudadanos, cuyo concurso es necesario para que prosperase esa eventual moción de censura.

Desde la dirección del PSOE deslizaban que ese instrumento parlamentario sí está sobre la mesa, aunque pueda emplearse con carácter simbólico, aun a sabiendas de que no salga adelante en caso de que la formación naranja no lo apoyase. Pero también hay otras medidas antes, como pedir la dimisión de Cifuentes, una decisión que en todo caso le correspondería a ella tomar. Los socialistas dan por hecho que habrá que actuar puesto que la presidenta tiene ya difícil escapatoria, dada la "riada de informaciones y contrainformaciones que están desmontando en buena medida su versión", en palabras del propio Sánchez.

Sánchez anuncia medidas contundentes si Cifuentes no aclara las dudas sobre el máster

Sobre Cataluña, el secretario general no quiso ahondar en las discrepancias con el PSC a propósito de la propuesta de Miquel Iceta de un Gobierno de concentración. "No hay nada que recomponer con el PSC, porque no se ha roto nada", básicamente porque el propio primer secretario reconoció que su planteamiento es "inviable". El secretario general sí mostró su preocupación por la "violencia" en las calles de Cataluña y su solidaridad con el partido hermano por los actos vandálicos de los que ha sido víctima. El PSC se merece la "empatía" y el "compromiso del conjunto del socialismo español" porque está defendiendo la Constitución y el Estatut en primera línea de frente, en circunstancias "muy difíciles".

Pedro Sánchez: "No hay nada que recomponer con el PSC, porque no se ha roto nada"

El líder ve "compatible" defender el sistema público de pensiones y el ahorro privado

Es cierto que desde hace cuatro años las declaraciones de bienes de Pedro Sánchez y de su ejecutiva están colgadas en la web del PSOE. Pero hasta ahora se había reparado menos en los planes de pensiones que tienen contratados sus miembros. También el secretario general. Él tiene más de 104.000 euros en un fondo de BBVA. ¿Es coherente mantener vivas esas aportaciones con la defensa del sistema público? A su juicio, sí. 

"Es perfectamente compatible el ahorrar y el defender un sistema público de pensiones digno, equilibrado y sostenible", señaló Sánchez. El líder llamó a "no confundir el debate" y "centrarse en lo que importa a los ciudadanos", que es "cómo se va a sostener el sistema público de pensiones, a reducir el déficit público y a garantizar pensiones dignas". 

El secretario general defendió que desde que fue elegido en 2014 ha obrado con "transparencia absoluta", un ejercicio "sano" del que deberían aprender el resto de partidos. Añadió que no ha habido "investigación" periodística ninguna, sino que se ha acudido a la web del PSOE, donde está accesible.

Lo importante es que el partido plantea, añadió, un "horizonte de reforma para quitar la dictadura del 0,25%", ya que con esa alza tan limitada los socialistas calculan un 17% de pérdida de poder adquisitivo para los pensionistas en diez años. 

Una pregunta clásica en todas las comparecencias de Sánchez gira en torno a las encuestas. La de este lunes estaba justificada por los sondeos publicados este fin de semana por 'El Mundo' y 'El Español', que pronostican una estimación de voto del PSOE inferior al 20%, frente al 22,63% de las generales de 2016. El líder presumió de ser el político que más responde sobre encuestas, pero las que más les preocupan a los socialistas "son las que publican las urnas". En la dirección insisten en que no hay trasvase de PSOE a Cs, porque los naranjas "comen en el plato de la derecha". 

El PSOE no apoyará los Presupuestos Generales del Estado de 2018. En ningún formato y bajo ninguna circunstancia. Ni tampoco caerá en la "frivolidad" de que cinco de sus diputados los respalden "por azar", como quería el PP, para salvarle así la papeleta al Gobierno. El voto será contrario siempre, aunque el presidente del Gobierno intente rescatar en la medida de lo posible sus cuentas en caso de ser tumbadas y llevar las medidas estrella más importantes a la Cámara para su convalidación.

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