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El PSOE avanza las primarias en baronías de peso pero aplaza la patata caliente de Madrid
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LA ENTRADA EN EL AÑO ELECTORAL

El PSOE avanza las primarias en baronías de peso pero aplaza la patata caliente de Madrid

Andalucía, Asturias y Extremadura, además de Navarra, elegirán a sus candidatos en junio, aunque más federaciones podrían sumarse a la lista. Sigue pendiente el agujero enorme de la capital

Foto: Sánchez, con Díaz y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, el 24 de junio de 2016, en el cierre de campaña de las últimas generales, en la capital andaluza. (EFE)
Sánchez, con Díaz y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, el 24 de junio de 2016, en el cierre de campaña de las últimas generales, en la capital andaluza. (EFE)

Las máquinas empiezan a ponerse en marcha otra vez. Esta vez para las elecciones municipales, autonómicas y europeas de la primavera de 2019. Pedro Sánchez se ha marcado como objetivo vencer en la convocatoria del próximo año, pero antes debe poner el partido a punto. Y uno de los primeros pasos es la elección de los candidatos. Todas las dudas no se despejarán hasta finales de 2018, pero antes del verano ya habrá una primera oleada de aspirantes designados. Será así porque algunas federaciones ya han expresado a Ferraz su voluntad de celebrar sus primarias —bien para la elección de los cabezas de cartel locales, bien para los números uno autonómicos, o bien ambos— en junio, aunque el grueso de los territorios se acogerá al segundo turno, al del otoño, entre ellos Madrid. Las federaciones que desean arrancar en semanas el proceso son Andalucía, Extremadura, Asturias, Navarra, y tal vez Cantabria. Y Aragón se lo está pensando.

El último comité federal del PSOE, el pasado febrero, aprobó que la ejecutiva de Sánchez negociará, territorio a territorio, las fechas de las primarias. Se acordó, por tanto, un calendario a la carta, a la medida de cada barón. El argumento es que cada territorio es distinto, con circunstancias divergentes. En algunos, en siete, los socialistas ocupan el Gobierno autonómico, y en otros están en la oposición; en muchos lideran los ejecutivos locales, y en muchos otros, no. Ya para los comicios de 2015 también Ferraz, hasta julio de 2014 en manos de Alfredo Pérez Rubalcaba y después con Pedro Sánchez como secretario general, también hubo calendarios diferenciados, aunque la cúpula intentó ordenar el tráfico y agrupar los procesos en la medida de lo posible.

De cara a 2019, todos los presidentes autonómicos socialistas, a excepción del asturiano Javier Fernández, optarán a la reelección en las urnas. Ellos, y los que ya son alcaldes y quieren repetir, están casi blindados. El reglamento de desarrollo de los estatutos aprobado en febrero [aquí en PDF] establece que solo habrá primarias para los presidentes que pretendan revalidar su mandato cuando así lo acuerde el comité regional o lo solicite la mayoría de sus miembros o el 40% de la militancia. Y solo las habrá para los alcaldes que se postulen de nuevo si lo requiere el 50% de los afiliados. Son umbrales tan elevados que, en la práctica, les hace estar a salvo de primarias.

Los presidentes o alcaldes que opten a la reelección están casi blindados: para que se encuentren con disputa una gran porción de sus bases debe pedirlo


En aquellas comunidades o municipios de más de 20.000 habitantes donde el PSOE está en la oposición, sí que se celebrarán. La norma general es que serán primarias cerradas, entre militantes, aunque podrán ser abiertas a la ciudadanía —para la elección del cabeza de cartel autonómico o del aspirante a la alcaldía en localidades de más de 50.000 habitantes— si lo pide la dirección autonómica correspondiente o Ferraz estima que ese es el procedimiento adecuado. La elección, en ambos casos, es a doble vuelta.

Foto: Pedro Sánchez, junto a Beatriz Corredor, exministra de Vivienda y miembro de su ejecutiva, el pasado 26 de febrero en Ferraz. (EFE)

Ábalos y Cerdán como coordinadores

La negociación de los calendarios, territorio a territorio, la está pilotando la Secretaría de Organización federal de José Luis Ábalos, ayudado por una de sus manos derechas, el navarro Santos Cerdán, responsable de Coordinación Territorial. Andalucía es una de las federaciones que ya ha trasladado a Ferraz, incluso por escrito, su voluntad de que sus candidatos municipales estén elegidos en junio de este año. El PSOE gobierna, aunque con pactos, en cuatro de las capitales de provincia —Sevilla (Juan Espadas), Granada (Paco Cuenca), Córdoba (Isabel Ambrosio) y Huelva (Gabriel Cruz)— y en ciudades grandes como Dos Hermanas (Quico Toscano) o Jerez (Mamen Sánchez). En total, de los más de 80 ayuntamientos andaluces con más de 20.000 habitantes, los socialistas dirigen medio centenar. El objetivo de Susana Díaz es, como mínimo, afianzar el poder institucional de su partido en la comunidad, aunque algunos alcaldes están débiles y en otros, como Málaga o Almería, el PP les lleva sacando ventaja años. La cúpula regional cree que es mejor lanzar ya a sus hombres y mujeres para que se den a conocer en el año que resta hasta la cita con las urnas.

El PSOE-A quiere lanzar el proceso para que sus aspirantes se vayan dando a conocer. Pero aún no será proclamada Díaz como candidata a la Junta

Ábalos y Cerdán recibieron la solicitud del PSOE-A de manos de Juan Cornejo, el número dos de la presidenta de la Junta. La idea del jefe del aparato regional es que la primera vuelta de las primarias locales —cerradas— se celebre el domingo 17 de junio, y la segunda ronda, una semana más tarde, el 24. Pero lo que trasladó Cornejo a Ferraz, porque ese fue el acuerdo de la dirección autonómica, es que no se abría por el momento el proceso de confirmación de la candidatura a la Junta, y eso que las elecciones andaluzas serán forzosamente antes que las de las 13 CCAA que celebran sus comicios a la vez.

placeholder Los presidentes de Aragón, Javier Lambán; Canarias, Fernando Clavijo; Castilla y León, Juan Vicente Herrera; Extremadura, Guillermo Fernández Vara y Ceuta, Juan Jesús Vivas (i a d), en el desfile del 12 de octubre de 2016. (EFE)
Los presidentes de Aragón, Javier Lambán; Canarias, Fernando Clavijo; Castilla y León, Juan Vicente Herrera; Extremadura, Guillermo Fernández Vara y Ceuta, Juan Jesús Vivas (i a d), en el desfile del 12 de octubre de 2016. (EFE)

"Solo hemos pedido hacer ahora las primarias municipales", insisten desde el PSOE-A a este periódico. Y es que arrancar el proceso de aclamación de Díaz reabriría las especulaciones sobre la fecha de las elecciones. La presidenta y su equipo han desmentido en repetidas ocasiones que ella tenga la intención de disolver ya el Parlamento. La legislatura formalmente acaba en marzo. La baronesa no tiene prisa. En caso de que adelantara los comicios autonómicos, su reelección como número uno sería rápida. No tendrá rival, pese a sus diferencias con los sanchistas, porque Ferraz no va a promocionar ninguna alternativa —no lo hizo en verano pasado, para disputarle el bastón de mando del PSOE-A— y las condiciones son muy exigentes. Díaz controla sin demasiados problemas la principal federación del PSOE.

Foto: El comité federal del PSOE, con la cúpula de Pedro Sánchez al frente, aplaude el sí al nuevo reglamento, este sábado en Aranjuez. (Borja Puig | PSOE)

Chivite, la favorita otra vez en Navarra

El extremeño Guillermo Fernández Vara ya ha comunicado informalmente a Ferraz que también quiere primarias en junio en su federación, aunque en las próximas semanas cerrará las fechas. En su caso, su idea sí es celebrar los dos procesos, autonómico y local, a la vez. El PP lidera las dos capitales provinciales, Cáceres y Badajoz, pero la capital autonómica, Mérida, está en manos de los socialistas, igual que Don Benito.

En Asturias, Sánchez ya ha señalado al sucesor de Fernández: Adrián Barbón, líder regional desde 2017 y amigo de la número dos, Lastra

Asturias, otra federación simbólica dentro del PSOE, elegirá a su candidato a la Presidencia del Principado antes del verano. Fernández está agotando ya su segundo mandato en el poder. Ya dejó en septiembre las riendas de su partido al sanchista Adrián Barbón, exalcalde de Laviana e íntimo amigo de la número dos del PSOE, la diputada Adriana Lastra. Él ya ha sido ungido por Sánchez como el sucesor. Sin ambages. "Yo apoyo a Javier Fernández ya en su último tramo del mandato y apoyo también a Adrián Barbón para que sea el próximo presidente asturiano", le dijo a 'El Comercio' en una entrevista publicada el domingo pasado. ¿Y las primarias locales? "No tienen por qué coincidir con el proceso autonómico", responden fuentes cercanas al líder regional, que tiene ante sí el reto de mantener la posición del PSOE como primera fuerza, como en Extremadura y Andalucía. El PSOE gobierna los ayuntamientos de Oviedo (Wenceslao López) y Avilés (Mariví Monteserín), pero no Gijón, en poder de Foro.

En Navarra por ahora también tienen claro que lo que desean avanzar es la elección de la candidatura a la jefatura del Gobierno foral. Lo previsible es que resulte designada, sin mayores dificultades, la baronesa regional, María Chivite, que ya compitió en las urnas en 2015 y quedó como quinta formación en la Cámara navarra (siete escaños y un 13,37% de los votos). La designación de los aspirantes municipales llegará más tarde.

placeholder Pedro Sánchez, con Adrián Barbón, líder de la Federación Socialista Asturiana, el pasado 21 de marzo en Oviedo. (EFE)
Pedro Sánchez, con Adrián Barbón, líder de la Federación Socialista Asturiana, el pasado 21 de marzo en Oviedo. (EFE)

Ferraz calcula que Cantabria podría entrar en la primera tanda, aunque en la federación insisten en que no hay nada "cerrado". El pasado verano se hizo con el control de la dirección, en medio de una formidable gresca interna que no se apagó con las primarias, el alcalde de Santa Cruz de Bezana, Pablo Zuloaga. Él venció a la todavía vicepresidenta del Ejecutivo regional y consejera de Universidades, Eva Díaz Tezanos. Las tiranteces entre los dos dirigentes han sido constantes y perduran.

Aragón podría sumarse a la lista. El presidente autonómico, Javier Lambán, decidirá la semana próxima el calendario, pero si le "dieran los plazos", intentaría que las primarias se celebraran antes del verano, según recalcan desde su entorno más inmediato. En su caso, el principal agujero se halla en Zaragoza, ciudad que los socialistas gobernaron ininterrumpidamente, con el ex 'biministro' Juan Alberto Belloch al frente, entre 2003 y 2015. El PSOE cree que puede arrebatar el bastón de mando al actual alcalde, Pedro Santisteve, cabeza de la plataforma impulsada por Podemos —Zaragoza en Común—. Lambán quiere lanzar para su principal plaza a su última secretaria de Organización (2014-2017) y consejera de Innovación, Investigación y Universidad, Pilar Alegría.

Murcia, CyL, Canarias

Murcia va a intentar tener a su candidato autonómico listo para antes de agosto, y prevé dejar la designación de los cabezas de lista locales para más adelante. En la disputa regional, tiene todas las papeletas para convertirse en cabeza de cartel el nuevo barón, Diego Conesa, aunque antes de lanzarse a la arena debe dejar amarrada la sucesión en el municipio que dirige, Alhama, subrayan en lo alto de la cúpula murciana. Los socialistas ganaron más poder institucional hace tres años. Encabezan Cartagena (Ana Belén Castejón), pero aún se les resiste la capital, bastión de los populares.

Para el otoño quedan Castilla-La Mancha, Valencia, Baleares, La Rioja... y la mayoría de plazas del PSC, salvo Barcelona, que tendrá candidato en mayo

Otras federaciones están planteándose qué hacer. Por ejemplo, Castilla y León, feudo seguro del PP y comunidad maldita para los socialistas desde la dimisión, en 1986, de Demetrio Madrid. Su secretario general es Luis Tudanca, y lo previsible es que repita como candidato. "Vamos a hacer varias simulaciones de calendario y lo hablaremos con las provincias. No hemos decidido nada, así que veremos después de Semana Santa", señalan desde el círculo del barón autonómico. La joya de la corona es la alcaldía de Valladolid, que el PSOE recuperó en 2015, mediante pactos. El regidor, Óscar Puente, teórico portavoz de la ejecutiva federal —su papel, sin embargo, se ha reducido en la dirección para poder centrarse en su gobierno—, confía en repetir en 2019. Además de Valladolid, el PSOE dirige los ayuntamientos de Segovia y Soria.

En Canarias, igual que en Castilla y León, no hay "nada cerrado" y "todo está por decidir", aunque pinta que se esperará al segundo turno. El nuevo secretario regional es el sanchista Ángel Víctor Torres, aunque sus críticos ya adelantan que habrá alternativa, habrá que ver si liderada por la ex vicepresidenta autonómica y candidata en 2015, Patricia Hernández, que devolvió al PSOE a su condición de primera fuerza en votos, no en escaños. El PSOE gobierna en una de las dos capitales, Las Palmas, aunque su alcalde, Augusto Hidalgo, está bastante tocado internamente.

placeholder Jaume Collboni, líder del PSC en Barcelona, el pasado 26 de enero en el pleno del Ayuntamiento. (EFE)
Jaume Collboni, líder del PSC en Barcelona, el pasado 26 de enero en el pleno del Ayuntamiento. (EFE)

Con seguridad, quedarían para después del verano, salvo sorpresas, las primarias de las federaciones restantes (y la fecha orientativa es la del 21 de octubre): Madrid, Valencia, Castilla-La Mancha —Emiliano García-Page prefiere a últimos de año—, Euskadi, Baleares, Galicia y La Rioja. Cataluña, igual que País Vasco, Galicia y Andalucía, queda fuera del calendario común de autonómicas. La mayor parte de las plazas en juego del PSC se dilucidarán en el otoño, aunque la pugna por Barcelona empieza oficialmente el 3 de abril. El partido de Miquel Iceta ha programado primarias abiertas a la ciudadanía —como pasó en 2014— para elegir al cabeza de cartel de la ciudad condal, con urnas a doble vuelta el 12 y el 19 de mayo. La previsión es que repita el vencedor de la disputa interna de hace cuatro años, Jaume Collboni, cuyo perfil se ha reforzado en este tiempo, primero como teniente de alcalde en el Gobierno de Ada Colau y ahora en la oposición, según subraya la cúpula. El PSC tiene en sus manos el control de dos capitales, Tarragona (Josep Fèlix Ballesteros) y Lleida (Àngel Ros), y preserva su condición de fuerza municipalista, aunque con un poder ya muy mermado.

El tropiezo de Alicante

Madrid es, sin duda, el objetivo principal de Sánchez y un verdadero agujero negro para los socialistas desde que perdieron la alcaldía, en 1989, fruto de una moción de censura. El secretario general ya anticipó, en una entrevista con El Confidencial, que confirmaba al exministro Ángel Gabilondo como número uno a la Comunidad, y que una mujer lideraría la lista al Ayuntamiento de la capital. Gabilondo fue su arriesgada apuesta en 2015, y acertó, porque se quedó a un escaño de alcanzar el Gobierno regional, con pacto con Podemos mediante. La brutal caída del PP y los sucesivos escándalos que han rodeado a la presidenta autonómica, la popular Cristina Cifuentes, alimentan las expectativas del PSOE, aunque es consciente de la fuerte competencia que suponen Íñigo Errejón y Ciudadanos.

Las expectativas crecen en Madrid por la mayor debilidad de Cifuentes, y en la capital el nombre que se mantiene como opción es el de Corredor

Pero el vacío sigue existiendo en la ciudad. Los socialistas ya fueron terceros en 2015, con Antonio Miguel Carmona como candidato. Ahora se exponen incluso a ser cuartos, dado el auge de Cs y la aparente consolidación de Manuela Carmena. Por ahora, el único nombre que emerge, aunque más por descarte, es el de la exministra de Vivienda Beatriz Corredor, que sin embargo no convence a la cúspide de la federación. La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, y la portavoz en el Congreso, Margarita Robles, se han quitado de en medio. Las dudas sobre una candidatura clave y la debilidad de Cifuentes —que podría tener que afrontar una nueva moción de censura en caso de que no dé explicaciones satisfactorias sobre el máster que cursó en 2011-2012— han convencido a Ferraz de que es mejor esperar, y la dirección autonómica de José Manuel Franco está de acuerdo. Así que, si nada cambia, la elección del aspirante autonómico y de los candidatos municipales —con la capital copando todos los focos— se hará a comienzos del otoño.

placeholder La presidenta de Baleares, Francina Armengol, y Pepe Hila en agosto de 2016, cuando este era aún alcalde de Palma. (EFE)
La presidenta de Baleares, Francina Armengol, y Pepe Hila en agosto de 2016, cuando este era aún alcalde de Palma. (EFE)

En la segunda tanda, saldrán nominados casi de forma autonómica los presidentes de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; Valencia, Ximo Puig, y Baleares, Francina Armengol. Los dos primeros ya están más afianzados en sus comunidades, y la jefa de las islas tiene ante sí el reto de que un Govern progresista repita dos mandatos seguidos. Los tres tienen puntos prioritarios en sus territorios. Page sabe que debe conservar al menos las alcaldías de Toledo (Milagros Tolón) y Ciudad Real (Pilar Zamora); Armengol, volver a gobernar Palma (socialistas y Podemos se repartieron la legislatura), y Puig, mantener Castellón (Amparo Marco), aspirar a liderar Valencia —la señalada es la nueva secretaria local, Sandra Gómez— y volver a soñar con Alicante. El PSPV gobierna la ciudad, pero el doble procesamiento del alcalde, Gabriel Echávarri, y las dificultades que está encontrando la elegida para sucederle, Eva Montesinos, complican las expectativas del partido para 2019.

En Galicia, Abel Caballero busca un cuarto mandato en Vigo —en 2015 logró una rarísima mayoría absoluta, y con holgura—; y en La Rioja el nuevo secretario general, Paco Ocón, se ha comprometido a que repita como candidata Concha Andreu, miembro de la ejecutiva federal.

La andadura socialista de 2019 ya ha comenzado. El camino se desplegará en varias fases. La tensión natural por las primarias y la confección de las listas irá en aumento. El PSOE de Sánchez se adentra en un nuevo ciclo electoral, y no acabará hasta las generales. Hasta entonces durará, al menos, el crédito concedido al líder.

El reto de 2019: ganar las locales, afianzar CCAA y ayuntamientos y avanzar en ciudades medias

"Quien gana las municipales, gana las generales". Pedro Sánchez se puso a sí mismo el listón para 2019. Recuperar el trono de primera fuerza en las urnas de ámbito más general como preludio de su victoria en las legislativas. La norma no escrita es verdad que se ha solido cumplir. Solo en una ocasión, en 2007, el vencedor de las municipales, el PP, no se impuso en las generales: en 2008, pudo revalidar su mayoría José Luis Rodríguez Zapatero. 

En los comicios del 24 de mayo de 2015, el PSOE recabó 5.603.112 votos, el 25,02% de los sufragios. El PP cosechó 6.057.767 papeletas, el 27,05%. Apenas dos puntos de diferencia que ahora parecen poca cosa para Ferraz visto el hundimiento del partido de Mariano Rajoy en todas las encuestas. El PSOE cree que tiene a su favor la caída de Podemos y la menor implantación territorial de Ciudadanos. 

Sánchez aspira a preservar el poder institucional que conquistó hace tres años. Entonces, el PSOE pasó de gobernar nueve a 17 capitales de provincia, en buena medida gracias a los pactos: Sevilla, Córdoba, Huelva, Valladolid, Toledo, Segovia, Soria, Lleida, Tarragona, Alicante, Castellón, Palma, Lugo, Huesca, Ciudad Real, Oviedo y Las Palmas de Gran Canaria. En estos tres años, el PSOE ha logrado el mando de Granada; ha cedido la vara a su socio de MËS en Palma a mitad de legislatura pero sigue en el Ejecutivo local, y puede perder Alicante. El PP, que en 2011 pudo dirigir 34 cabeceras de provincia, pasó a quedarse con 19. Además, los socialistas se hicieron con el control de grandes urbes como Vigo, Jerez o Mérida. 

El PSOE preside siete comunidades autónomas: Andalucía, Aragón, Valencia, Extremadura, Castilla-La Mancha, Asturias y Baleares. Y forma parte del Gobierno de otras dos: Cantabria (con los regionalistas del PRC) y Euskadi (con el PNV), y hasta finales de 2016 integraba el Gobierno de Canarias con CC. 

Ferraz aspira a afianzar el poder ganado en 2015 y avanzar en las ciudades grandes y medias, sus grandes agujeros. El objetivo marcado en rojo es Madrid. El Ejecutivo regional se le escapó en 1995 y el de la capital, en 1989. 

La candidatura europea es la que sigue bastante verde. No hay nombres firmes sobre la mesa, aunque sí una especulación muy repetida: que quien puede encabezar la lista es la exministra Carmen Calvo, secretaria de Igualdad de la ejecutiva y mujer fuerte del núcleo duro de Sánchez. En 2014, la número uno fue la entonces vicesecretaria general, Elena Valenciano, apartada por Sánchez desde 2014 y vetada por él para presidir el grupo socialista europeo.

Las máquinas empiezan a ponerse en marcha otra vez. Esta vez para las elecciones municipales, autonómicas y europeas de la primavera de 2019. Pedro Sánchez se ha marcado como objetivo vencer en la convocatoria del próximo año, pero antes debe poner el partido a punto. Y uno de los primeros pasos es la elección de los candidatos. Todas las dudas no se despejarán hasta finales de 2018, pero antes del verano ya habrá una primera oleada de aspirantes designados. Será así porque algunas federaciones ya han expresado a Ferraz su voluntad de celebrar sus primarias —bien para la elección de los cabezas de cartel locales, bien para los números uno autonómicos, o bien ambos— en junio, aunque el grueso de los territorios se acogerá al segundo turno, al del otoño, entre ellos Madrid. Las federaciones que desean arrancar en semanas el proceso son Andalucía, Extremadura, Asturias, Navarra, y tal vez Cantabria. Y Aragón se lo está pensando.

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