El TC se agarra a la investidura de Sànchez para evitar pronunciarse sobre Puigdemont

El pleno del Tribunal Constitucional ha eludido este martes pronunciarse sobre el recurso presentado por el Gobierno hace un mes sobre la investidura de Carles Puigdemont. El providencial anuncio efectuado por el Parlament este lunes de que propondrá al expresidente de la ANC Jordi Sànchez ha evitado que el TC se inclinara por admitirlo a trámite con división. La candidatura del dos del PDeCAT en las elecciones del 21-D fue registrada esta misma mañana en el Boletín Oficial de la cámara.

Tras más de cuatro horas de reunión, el pleno se ha decidido por dar trasladado a las partes para que valoren si, tras la aparición en escena de Sànchez, la reclamación del Ejecutivo queda ya sin efecto. Les da un plazo de 10 días para presentar sus escritos y también acuerda mantener las medidas cautelares acordadas el 27 de enero mientras se decide. En ellas advirtió de que la investidura de Puigdemont no podría llevarse a cabo ni a través de medios telemáticos ni por sustitución por parte de otro parlamentario y, en todo caso, debía contar con autorización judicial.

El tribunal también prohibió entonces delegar el voto en otros parlamentarios en el caso de aquellos contra los que pese orden de busca y captura. La decisión ha recabado la unanimidad de los 12 magistrados, que han atendido a dos resoluciones: la primera en la que Torrent designa a Sànchez, y una segunda, dictada hoy mismo, en la que se fija para el próximo lunes la celebración del debate de investidura.

Los magistrados han resuelto de este modo el asunto que estuvo a punto de partirles por la mitad. El tribunal de garantías tiró el 27 de enero por la calle del medio. Anuló entonces todas las posibilidades de que Carles Puigdemont pudiera ser investido a distancia, pero no se pronunció sobre si procedía entrar a valorar el recurso en sí. En una solución de consenso y por unanimidad, que no acogía de forma completa la reclamación del Gobierno.

Seguro para activar la cuenta atrás

Por otra parte, el tribunal de garantías ha admitido a trámite el amparo que solicitaba el PSC de Miquel Iceta contra la paralización de los plazos para nuevas elecciones ante los vaivenes para la formación del Gobierno en Cataluña, aunque no se pronuncia aún sobre las medidas cautelares reclamadas. La situación se mantiene desde que el pasado 30 de enero Torrent aplazara 'sine die' la sesión plenaria. La decisión a adoptar, avisa el TC, "trasciende del caso concreto, porque pudiera tener unas consecuencias políticas generales".

El Constitucional abre así, al admitir la petición de los socialistas, la posibilidad de decidir en unos días sobre la puesta en marcha del reloj para las elecciones, un hecho que crearía jurisprudencia. El desbloqueo de la cámara catalana ante el anuncio de pleno el próximo lunes es solamente un espejismo. En la primera intentona, su 'president', Roger Torrent, desconvocó tras el amago de investir al 'expresident' y no activó la cuenta atrás de los plazos. Sànchez no tiene muchas más opciones si se tienen en cuenta los precedentes —el juez no le autorizó a acudir a la constitución del Parlament—, y es posible que Torrent vuelva a repetir la misma jugada y no llegue a celebrar una reunión de la cámara ante la imposibilidad legal de investir al candidato propuesto.

En su demanda, el PSC sostiene que el aplazamiento sin fecha de la investidura afecta a la iniciativa legislativa de los diputados del Parlamento de Cataluña y a su función de control al poder ejecutivo, que son elementos básicos del derecho fundamental de los diputados a ejercer los cargos y funciones públicas en condiciones de igualdad y sin perturbaciones ilegítimas.