Es noticia
Los impulsores de la marcha del 8-O estudian cómo continuar el movimiento
  1. España
tras el éxito histórico del domingo

Los impulsores de la marcha del 8-O estudian cómo continuar el movimiento

La mayoría silenciosa alzó la voz el pasado domingo tras una movilización histórica en redes sociales. Los organizadores, aún abrumados, piensan en las opciones que hay de seguir

Foto: Asistentes escuchan los discursos al final de la manifestación convocada por Societat Civil Catalana este domingo en Barcelona. (EFE)
Asistentes escuchan los discursos al final de la manifestación convocada por Societat Civil Catalana este domingo en Barcelona. (EFE)

No podían imaginar el éxito del 8 de octubre. Lo que empezó siendo una movilización vía WhatsApp entre un grupo de amigos para dar difusión a la manifestación por la unidad de España convocada por Societat Civil Catalana se ha terminado convirtiendo en un grupo de Facebook que cuenta casi con 400.000 miembros. Las masivas muestras de apoyo han dejado en estado de 'shock' a estos jóvenes, que aún no son conscientes de lo que lograron en menos de una semana. El primer objetivo se ha cumplido: "Teníamos que conseguir que la gente saliera a la calle. Y lo hicieron con un espíritu festivo y sin incidentes", explica Nacho, uno de ellos, a este diario.

La cuestión es qué sucederá a partir de ahora con esta iniciativa que, sin esperarlo, se ha transformado en una verdadera referencia para miles de personas hasta ahora sin esperanza ni un rumbo que seguir. El peso de la responsabilidad comienza a hacer mella entre ellos. La nube en la que estuvieron la pasada semana, dejando de lado unos días sus trabajos y dedicando 20 horas diarias a contestar mensajes, aceptar solicitudes de adhesión al grupo y poner en contacto a gente de distintos puntos de España para que acudieran a la marcha del domingo, desapareció de golpe este mismo lunes. Los cuatro chicos que constituyeron el germen de la movilización a través de la aplicación de mensajería instantánea volvieron a sus trabajos. Las otras dos jóvenes, que todavía estudian su carrera, a la Universidad. Se han dado un margen para reflexionar sobre lo ocurrido y sopesar qué futuro puede tener el grupo "8 de Octubre!" y el hashtag #NoEstamosSolos. Por el momento, cerraron la opción de emitir comentarios hasta el 12 de octubre, en la celebración de la Fiesta Nacional, y quisieron permitir a los integrantes del grupo comunicarse entre ellos.

Imágenes de la manifestación del 8 de octubre a favor de la unidad de España.

La cuestión no es sencilla. Hace justo una semana este grupo de jóvenes vio como su vida y su rutina daban un giro de 180 grados. Jamás imaginaron Nacho y sus amigos, que se conocen de toda la vida y comparten año de nacimiento (1979), que aquel grupo de WhatsApp en el que fueron incluyendo a sus contactos para desahogarse, para "condenar la injusticia" que muchos catalanes están viviendo, pudiera llegar a adquirir estas dimensiones. Precisamente el éxito logrado es lo que les ha puesto en una tesitura difícil. Tenían que decidir qué hacer con esta marca lograda en apenas cuatro días y que consiguió reventar las calles de Barcelona de banderas españolas, 'senyeras' y gritos de unidad.

No era tarea fácil. Cada uno de ellos tiene sus propias convicciones, sus puntos de vista y su modo de vida. Pero el grupo acumula cada día cientos de mensajes que filtrar y responder (en estos momentos hay más de 3.000 en cola) y peticiones para unirse a la causa. "Tenemos que tomar aire, asimilar lo que ha ocurrido y tomar una decisión". Para dar este paso, una gran parte del grupo debería dedicarse a ello a tiempo completo o encontrar personas que pudieran hacerlo.

Foto: Miles de personas se manifestaron por la unidad de España el pasado 30 de septiembre en Barcelona. (EFE)

Nacho recuerda cómo la pasada semana todos dejaron a un lado durante unos días sus trabajos y estudios y acabaron reunidos en una misma oficina con sus ordenadores portátiles. La media eran entre 15 o 20 horas diarias y dudan que el resultado hubiera sido el mismo si el esfuerzo empleado hubiese sido menor. Una vez cumplida la finalidad, era el momento de decidir el futuro de ese movimiento surgido el 8 de octubre y que dio lugar a una histórica manifestación por la unidad de España.

placeholder Vista de la manifestación del domingo en Barcelona. (EFE)
Vista de la manifestación del domingo en Barcelona. (EFE)

Sociedad Civil Catalana cifra en más de un millón de personas los asistentes y la Guardia Urbana dice que acudieron 350.000 personas. Más allá de la guerra de números, la ciudad condal asistió a una imagen que muchos no recordaban. La mayoría silenciosa alzó la voz. Bastaba con un vistazo por el grupo para encontrar cientos de ofertas. Gente de Barcelona que daría alojamiento a quienes decidieran ir desde fuera a manifestarse, grupos de personas en Galicia y Andalucía mostrando interés por viajar juntos y personas que ofrecen sus vehículos para trasladarse de forma más eficiente. "Mi marido y yo ofrecemos una cama de matrimonio, un sofá cama y una rica fideuá a quien venga a la concentración", decía otro de los comentarios. Los intentos por coordinarse eran continuos: "¿Algún coche que salga desde Terrasa?", "desde Sitges vamos muchos" o "¿dónde se pueden encontrar banderas en Sabadell?" fueron algunos de los cientos y cientos de mensajes que el grupo registraba cada pocos minutos. Hoy por hoy siguen llegando (y acumulan más de 3.000 por revisar) comentando la experiencia del domingo, de la que la gran mayoría dicen sentir un orgullo indescriptible. Una imagen que, sin embargo, no fue transmitida por TV3. La televisión pública catalana describió la manifestación con gravedad, y tildó de "fascistas" a la mayor parte de los asistentes, despertando su indignación.

La representación política tampoco faltó a la manifestación. Fue el caso de Ciudadanos, que sacó la artillería pesada con la plana mayor del partido dirigida por Albert Rivera e Inés Arrimadas; políticos del PP, empezando por la ministra Dolors Montserrat y el portavoz conservador en la Comunidad Autónoma, Xavier García Albiol. El PSC optó por no convocar de manera oficial, aunque algunos de sus miembros sí estuvieron. El momento cumbre llegó de la mano del expresidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, que afirmó sin titubeos: "Si habéis venido tantos es para decirle al mundo que los que no pensamos como los nacionalistas somos tan de Cataluña como ellos"; y del premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, cuando afirmó que la "conjura independentista no destruirá 500 años de historia" de la unidad de España.

No podían imaginar el éxito del 8 de octubre. Lo que empezó siendo una movilización vía WhatsApp entre un grupo de amigos para dar difusión a la manifestación por la unidad de España convocada por Societat Civil Catalana se ha terminado convirtiendo en un grupo de Facebook que cuenta casi con 400.000 miembros. Las masivas muestras de apoyo han dejado en estado de 'shock' a estos jóvenes, que aún no son conscientes de lo que lograron en menos de una semana. El primer objetivo se ha cumplido: "Teníamos que conseguir que la gente saliera a la calle. Y lo hicieron con un espíritu festivo y sin incidentes", explica Nacho, uno de ellos, a este diario.

Manifestación
El redactor recomienda