Así se para el desalojo en Pineda: "Por orden del presidente del Gobierno, nos quedamos"
El jefe del contingente alojado en uno de los hoteles asediados informa a los policías que estaban a punto de irse de que finalmente se quedan, lo que provoca el aplauso de los funcionarios
"Por orden del presidente del Gobierno, nos quedamos aquí". Así se ha expresado esta mañana el máximo responsable del contingente policial que se aloja en estos momentos en uno de los hoteles de Pineda del Mar. Se ha dirigido de este modo a los dos centenares de agentes que esperaban en el 'hall' del establecimiento para ser trasladados fuera del pueblo barcelonés después de que la teniente de alcalde de la localidad, Carme Aragonés, anunciara ayer que la cadena hotelera se había comprometido a echar a los agentes hoy mismo.
Tras el anuncio del jefe del grupo policial a sus agentes, estos no dudaron en aplaudir con energía y rabia. "Algunos incluso se han puesto a llorar", explica uno de los asistentes, quien añade que ha sido en ese momento cuando todos se han sentido realmente apoyados por la autoridad. "Lo que nos esperaba era el pasillo de la vergüenza", ha dicho el funcionario en referencia a que los policías se disponían a andar en formación por las calles hasta el otro hotel que aloja policías para marcharse posteriormente de la población.
La situación de los agentes continúa siendo enormemente tensa, dado que las presiones del ayuntamiento al propietario del hotel siguen percibiéndose detrás de las decisiones que toman los responsables del establecimiento. En este momento, por ejemplo, según relatan agentes que se encuentran en el local, este ha desactivado las tarjetas de acceso a las habitaciones con el fin de que los funcionarios no puedan entrar en las mismas. Estos, sin embargo, tienen que coger sus cosas para montar un dispositivo de seguridad alrededor del hotel.
Uno de los jefes del contingente policial asegura que incluso tienen en contra a la Policía Local. El responsable de este último cuerpo ha dicho en varias ocasiones a los agentes que se marchen. "Con la placa en la mano, nos ha indicado que nos ordena que nos marchemos", explica uno de los funcionarios, que entiende que el grupo se encuentra actualmente asediado por ciudadanos del pueblo. "No quieren que salgamos del hotel, pero tenemos que montar el dispositivo de seguridad", añade.
Tras la expulsión que sufrieron dos centenares de guardias civiles en la localidad barcelonesa de Calella y el amago de Pineda del Mar, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dio orden esta mañana de que los agentes de la Benemérita y de la Policía Nacional no abandonasen los hoteles donde se encuentran hospedados en Cataluña, una decisión que trasladó el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, a los responsables de los dispositivos y que fue tomada tras reunirse este último con el jefe del Ejecutivo, con la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Turismo, Álvaro Nadal, en el Palacio de la Moncloa.
Este encuentro tuvo lugar justo después de que Zoido convocara de urgencia en Interior a la cúpula de la Policía y de la Guardia Civil con el fin de analizar el acoso que están recibiendo las fuerzas de seguridad y las presiones que están provocando que algunos funcionarios sean expulsados de los hoteles en los que están alojados.
En este contexto, en un comunicado conjunto emitido por el Ayuntamiento de Pineda y los hoteles Checkin Mont-palau y Checkin Pineda, ambas entidades destacan el "comportamiento ejemplar" que han tenido los agentes alojados "durante toda su estancia", pero añaden que es necesario avanzar en su salida "por razones de seguridad" y con el fin de "garantizar la convivencia en el municipio". El consistorio desmiente haber amenazado al dueño del hotel con el cierre así como haber llevado a cabo cualquier otra medida de presión.
"Por orden del presidente del Gobierno, nos quedamos aquí". Así se ha expresado esta mañana el máximo responsable del contingente policial que se aloja en estos momentos en uno de los hoteles de Pineda del Mar. Se ha dirigido de este modo a los dos centenares de agentes que esperaban en el 'hall' del establecimiento para ser trasladados fuera del pueblo barcelonés después de que la teniente de alcalde de la localidad, Carme Aragonés, anunciara ayer que la cadena hotelera se había comprometido a echar a los agentes hoy mismo.
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