Montoro reabre conversaciones con C's y el 'diputado 176' tras el 'no es no' de Sánchez

El Gobierno recurre a sus socios presupuestarios después del esperado 'no es no' de Pedro Sánchez a negociar el llamado techo de gasto, que se tiene que someter a votación la próxima semana en el Congreso. Encarrilado el respaldo del PNV y de Ana Oramas (Coalición Canaria), el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se aviene a acordar con Ciudadanos algún tipo de rebaja fiscal para la rentas más bajas en 2018 con el fin de cerrar el apoyo de Albert Rivera, al tiempo que planteará a Pedro Quevedo, el 'diputado 176', que al menos se abstenga para garantizar que el Ejecutivo tenga en la Cámara más síes que noes a su proyecto.

El 'nuevo' PSOE rechaza conversar siquiera con el Gobierno sobre el primer paso parlamentario para el próximo proyecto de Presupuestos y examen del cumplimiento de compromisos con la UE, negociación en la que sí participó hace siete meses la gestora socialista, hasta alcanzar un acuerdo que luego apoyaron sus diputados en el Congreso en diciembre pasado. Mariano Rajoy quiso repetir la operación después del regreso de Sánchez a la secretaría general, aunque solo fuera para que el reelegido se 'retratara' en su giro hacia las posiciones de Podemos, y la respuesta ha sido la esperada: el rechazo de plano incluso a reunirse.

Después de la reunión del Consejo de Ministros, Cristóbal Montoro reconoció que la dirección del grupo socialista tenía decidido desde que aterrizó en el cargo hacer lo contrario que sus antecesores y no participar en las conversaciones sobre el techo de gasto. "Vamos a coincidir lo justo, pero por nuestra parte no va a quedar", comentó el titular de Hacienda para destacar que volverá a la carga. Destacó también que mantendrá relaciones con los gobiernos autonómicos controlados por socialistas, con los que ya prepara el cambio de modelo de financiación y sobre el que habrá un primer borrador en agosto.

Pese a la cerrada oposición del PSOE a negociar esta vez, en medios gubernamentales confían en salvar la votación del Congreso por la mínima, pero sin demasiados problemas. Ante la exigencia de Ciudadanos de bajar impuestos a las rentas mas bajas, Hacienda trabaja en una oferta para que Rivera pueda apuntarse el tanto sin tener que tocar los tramos del IRPF. Rajoy dijo que no se puede cambiar esa ley cada ejercicio, pero también cabe entrar en el capítulo de desgravaciones y mínimos familiares para buscar medidas de 'alivio' fiscal por 2.000 millones de euros, como propone Rivera.

En el caso del diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, decisivo ya en la aprobación de los Presupuestos para este ejercicio, en fuentes parlamentarias se da por hecho que se decantará por la abstención en vez de por el no de socialistas y podemitas para no poner en aprietos al Gobierno. A cambio de su apoyo, el diputado regionalista canario logró un paquete de medidas y subvenciones (billetes de avión y barco) que le permitieron rentabilizar su voto ante sus electores.

Quevedo no apoyó el anterior techo de gasto, como sí hicieron los socialistas en tiempos de la gestora, y esta vez también se desmarcará de la posición del PSOE de Pedro Sánchez si es necesario, según apuntan en medios del Grupo Mixto.