El sector anticapitalista de Podemos rompe con la línea oficial y apoya la vía Puigdemont
El desmarque se produce menos de 24 horas antes de que Pablo Iglesias defienda en la moción de censura un referéndum pactado, y a la espera de que las bases de Podem fijen su posición
El sector 'Anticapitalistas' de Podemos, que lidera el portavoz de la formación en Bruselas, Miguel Urbán, ha roto con la línea oficial marcada tanto por la dirección del partido como por la confluencia catalana -En Comú Podem-, que rechazan la vía unilateral anunciada por el president Carles Puigmont. Los 'anticapis' han dado ya su apoyo a la consulta no pactada, sin garantías legales ni reconocimiento internacional, prevista para el próximo 1 de octubre, al considerarla como un "derecho democrático del pueblo catalán". Una posición que han anunciado a través de un comunicado la mañana de este lunes, menos de 24 horas antes de que Pablo Iglesias y las confluencias defiendan en la moción de censura un referéndum pactado.
Este desmarque con la dirección irrumpe de lleno en el debate que están teniendo los círculos catalanes y la dirección de Podem, cuyo secretario general Abano Dante fue apoyado por el sector revolucionario, para fijar su posición respecto al reférendum unilateral. Si Dante adquirió un perfil más ambiguo que los comuns de Ada Colau al acudir a la cumbre soberanista junto al resto de partidos independentistas, en los últimos días había mostrado su reticencias con la vía Puigdemont, aunque la decisión final estará en manos de las bases. Asimismo, el secretario de Organización, Pablo Echenique, explicaba la semana que, pese a entender como "legítimo que la gente pida votar y lo pida en las calles", laa consulta unilateral "no va resolver ningún problema”.
Los anticapitalistas argumentan que "la celebración del referéndum desobediente en Catalunya contribuiría sin duda a acelerar el proceso destituyente en el resto del Estado español, contribuyendo a profundizar la democracia y a debilitar al régimen del 78". La impugnación y el supuesto empuje para la apertura de un proceso constituyente en el resto del Estado que creen que se derivará del desafío catalán, los lleva a extender un llamamiento "a toda la izquierda del Estado español a organizar la solidaridad con los derechos democráticos del pueblo catalán". En esta línea piden "tender puentes entre las clases populares del resto del Estado y las catalanas frente a la clase dominante pasa por ser capaces de tejer relaciones de solidaridad crítica y generosa, en donde la defensa de los intereses comunes no excluya las demandas particulares".
"Acelerará el proceso destituyente en el resto del Estado español, contribuyendo a profundizar la democracia y a debilitar al régimen del 78"
El texto programático que acompañará mañana la moción de censura de Unidos Podemos apuesta por la plurinacionalidad y un reférendum pactado, con garantías legales, en la línea con lo defendido desde sus orígenes tanto por Podemos como por la confluencia catalana. El encargado de defender esta propuesta sobre el estrado durante la moción será el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech, aunque también está previsto que tanto Iglesias, candidato alternativo a la presidencia, como la portavoz parlamentaria, Irene Montero, hagan referencia a ello durante sus turnos de intervención. En el debate, que se celebrará este martes, también intervendrán por parte del grupo confederal el coordinador de IU, Alberto Garzón, y el portavoz de En Marea, Antón Gómez.
El texto hecho público por el sector que la pasada asamblea de Vistalegre II encabezaron Urbán y la coordinadora en Andalucía Teresa Rodríguez, califica de "antidemocrática" la posición "del 'bloque constitucional' español, que solo reflejaría "los límites de la propia Constitución y la incapacidad de este bloque de organizar el Estado mediante el consenso, recurriendo así a métodos cada vez más autoritarios". Una argumentación en la línea de lo que han defendido los partidos independentistas tras anunciar la fecha y la pregunta del reférendum.
"Desde Anticapitalistas defendemos que las leyes no están por encima de la democracia", han manifestado, sin dejar de señalar sus "diferencias profundas con las fuerzas que dirigen el proceso independentista catalán, que defienden y aplican políticas neoliberales contra el pueblo catalán que dicen defender". Sin embargo, consideran que el referéndum es una demanda mayoritaria en Cataluña, por lo que "negarlo es negar la democracia y abriría el camino a posiciones peligrosas, en donde “votar y decidir” se convierte en una “cesión” de las clases dominantes, dejando de ser un derecho del pueblo".
Las críticas al Gobierno del PP, "apoyado por el PSOE y Ciudadanos", van más allá de su posición "inmovilista", calificando de “fundamentalismo constitucional” su rechazo al derecho a decidir y a que la sociedad catalana defina "su relación con el resto del Estado". Desde su punto de vista, esta política tiene por objeto "polarizar el escenario político y utilizar el 'chovinismo' español para cerrar filas en torno a un gobierno autoritario, corrupto, al servicio de los grandes poderes económicos".
El sector 'Anticapitalistas' de Podemos, que lidera el portavoz de la formación en Bruselas, Miguel Urbán, ha roto con la línea oficial marcada tanto por la dirección del partido como por la confluencia catalana -En Comú Podem-, que rechazan la vía unilateral anunciada por el president Carles Puigmont. Los 'anticapis' han dado ya su apoyo a la consulta no pactada, sin garantías legales ni reconocimiento internacional, prevista para el próximo 1 de octubre, al considerarla como un "derecho democrático del pueblo catalán". Una posición que han anunciado a través de un comunicado la mañana de este lunes, menos de 24 horas antes de que Pablo Iglesias y las confluencias defiendan en la moción de censura un referéndum pactado.