Los empresarios celebran "avances y tratados bilaterales" que el Rey logró en Japón

La primera visita de Estado a Asia de Felipe VI estaba llamada a impulsar las relaciones institucionales y económicas entre España y Japón después de que en 2016 la Jefatura del Estado se viera obligada a cancelar el viaje más relevante previsto en su agenda exterior a causa de la situación política nacional. Los empresarios con intereses en el país nipón no escondieron sus altas expectativas ante la pronta reanudación del mismo y no esconden ahora el optimismo con el que afrontan el futuro más inmediato tras la celebración de la visita hace apenas una semana.

"Este viaje ha servido como punta de lanza y sin duda va a tener efectos muy positivos para todos los intereses económicos", explica a este diario Tomás Zumarraga, director general de Shacho Kai —asociación de empresas japonesas con mayor representación en toda España— que incide en la importancia de que los acercamientos entre ambos países se produzcan a través de las "más altas relaciones".

En efecto, la Casa Real española mantiene estrechos lazos con la Familia Imperial nipona, como quedó demostrado en su reciente encuentro, algo que a ojos de los empresarios es fundamental. "Los Reyes son queridos en Japón y esta visita ha sido muy importante para que nos vean con mejores ojos, se interesen por nuestro país, nuestras empresas y por los productos españoles", afirma Zumarraga. Máxime cuando se trata de un país amante de los detalles y una cultura, la asiática, en la que las relaciones institucionales juegan un papel crucial. Más allá de los encuentros puramente empresariales que el Rey mantuvo con colectivos españoles, el director general de Shacho Kai pone el foco en los acuerdos bilaterales firmados a raíz de la visita de Estado, que el empresariado ha recibido como una apuesta por el futuro y una mejora asegurada para las relaciones presentes.

Zumarraga destaca uno encaminado a favorecer la movilidad de jóvenes y estudiantes japoneses y españoles por el cual podrán programar estancias de un año en el país de destino en calidad de turistas mientras acceden a una actividad laboral. En el caso de los estudiantes también podrán acceder al Programa de Vacaciones y Actividades Laborales Esporádicas —así designado— compaginándolo con sus respectivos cursos de formación. Además de profundizar en conocimientos mutuos e iniciar una experiencia laboral en un país extranjero, el director general de la asociación empresarial insiste en la "modernidad" y "los avances" que se consiguen a través de visitas de Estado como la realizada y que estaba pendiente desde hacía tiempo.

En la misma línea, otro de los acuerdos firmados eliminará trámites burocráticos para facilitar los permisos de residencia en ambos países, que hasta ahora dificultaban el asentamiento de nuevas empresas. "Lo que no puede ser es que un empresario llegue a un país, sea a Japón o España, y se encuentre con numerosas trabas para formalizar su permiso de residencia. Hay que ayudar y facilitar esa labor", afirma el director general de Shacho Kai. En la actualidad y según los datos que maneja el Ministerio del Exterior relativos a enero de 2016, el número de residentes españoles inscritos en Japón alcanza los 2.653.

El mercado turístico fue otro de los ejes en la visita real. España es el tercer destino europeo para los japoneses, sólo después de Alemania y Francia. El pasado año el turismo nipón registró un máximo histórico al superar los 600.000 visitantes. En el caso contrario, alrededor de 100.000 españoles visitaron Japón en 2016, una cifra que también supone un récord absoluto. En este sentido, los empresarios ven con buenos ojos la inauguración del vuelo directo Madrid-Tokio operado por Iberia desde hace unos meses aunque reconocen que a medio plazo podría ser insuficiente. "Sería muy positivo que otras aerolíneas se sumaran e incluso que hubiera una conexión directa a diario", insiste el directivo de Shacho Kai.

El interés de Japón en desarrollar un modelo turístico similar al español durante los próximos años para potenciar al máximo sus intereses mira directamente a 2020, cuando el país nipón será anfitrión de los Juegos Olímpicos. Todas las asociaciones empresariales consultadas por este diario coinciden en señalar además la atracción de Tokio por Latinoamérica, en la que Madrid puede jugar un rol fundamental como punto de unión entre ambos continentes.

Las sensaciones tras la visita de Felipe VI y la Reina Letizia a Japón son más que buenas. El presidente de la Cámara de Comercio Hispano-Japonesa, Miguel Ángel Martínez Massa, asegura que los empresarios "se han llevado muy buenas impresiones" y apuesta por que "el entendimiento se verá reflejado a largo plazo". Después de ver aplazado un viaje que en Japón planificaban desde hacía meses, el momento en el que se ha terminado celebrando "no podía ser mejor".

Los empresarios señalan la imagen de estabilidad política en España trasladada por el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, tras un periodo de turbulencias complicadas y la imagen reforzada del país en el exterior con Mariano Rajoy acumulando logros y protagonismo en los grandes asuntos europeos junto al resto de potencias del Viejo Continente.

Y a nivel económico, recuerda Tomás Zumarraga, "el colofón ha sido la salida a bolsa de Gestamp" —coincidiendo con la vuelta de los Reyes de Japón—. La multinacional española de componentes de automoción cuenta con importantes intereses en el mercado nipón desde que el grupo industrial Mitsui adquiriera el 12,5% de la compañía el pasado septiembre. Gestamp, que generó sus primeros ingresos en China el año 2008, anunció precisamente hace unos meses la construcción de una primera planta en Japón, que abrirá sus puertas dentro de un año con el fin de suministrar carrocerías de estampación en caliente a Honda y Toyota.