López reprende a los barones por ligar su futuro al triunfo de Díaz en las primarias
El exlendakari sostiene que "se equivocan de raíz" quienes, como Page o Lambán, alerten contra una victoria de Sánchez y digan que su agenda está condicionada por lo que ocurra en mayo
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"Unidad" e "izquierda exigente". Son las dos ideas fuerza sobre las que bascula el proyecto de Patxi López, el candidato socialista que se cree en mejor disposición para cohesionar a un partido roto y anclarlo en una posición ideológica clara, el dirigente poco amigo de los excesos verbales y el que rechaza que el 39º Congreso Federal, ya convocado, se convierta en un ejercicio de aniquilación del contrario interno o de sucesión de amenazas (o de amagos).
Con estas coordenadas se explica la respuesta que el exlendakari dio a los presidentes de Castilla-La Mancha y Aragón, Emiliano García-Page y Javier Lambán. Ambos, pero sobre todo el primero, vinculó su futuro y el de su federación a la victoria de Susana Díaz en las primarias del 21 de mayo. Para López, ese tipo de pronunciamientos "no ayudan nada, nada" a la paz interna. En una entrevista en 'Informativos Telecinco', con Pedro Piqueras, advirtió de que el proceso de elección del líder del PSOE no puede usarse como "una oportunidad para cargarse a uno o a otra", sino para "salvar al PSOE", para que este vuelva a ser "la referencia de la inmensa mayoría" de ciudadanos progresistas. "Si alguien quiere condicionar su futuro o el de una federación, se equivoca de raíz", sostuvo.
El candidato recuerda que el PSOE no está "para bromas", de forma que la unidad es "una obligación" y no una opción, no cabe el 'si está uno, yo me voy'
En ese sentido, la secuencia solo puede ser esta: primero, "el debate de las propuestas", luego la "decisión" (las urnas) y finalmente "la integración", "y no el 'si está uno, yo me voy'". "Nos necesitamos todos y muchos más de los que estamos", defendió López. El candidato descartó la amenaza de "ruptura" o "escisión" en caso de que ganaran Pedro Sánchez o Susana Díaz. Si él gana, prometió, llamará a ambos, y si pierde, se pondrá "a disposición" del vencedor, porque el PSOE no está "para bromas" y la unidad "es una obligación" y no una opción, porque si el partido sigue dividido, los ciudadanos, auguró, no le escucharán. De forma sintética, el PSOE tiene un problema de "división", que se cura uniendo, integrando, y otro de "definición", caminando hacia una "izquierda exigente" que sea "alternativa a la derecha".
El "drama desgarrador" del 1-O
López reconoció que "todos" los dirigentes socialistas tienen su parte de responsabilidad en la "fractura". No los militantes, subrayó, que vivieron como "un drama desgarrador" lo que sucedió aquel 1 de octubre en el que se decapitó al secretario general, porque sentían que se les rompía "su vida". "Y no tenemos derecho a que vuelva a suceder", reforzó, apuntando que no vale de nada señalar al "más culpable" o cobrarse "la factura", porque la única salida es poner "toda la carne en el asador" para dejar atrás este tiempo de "división" interna, marcado por un "nivel de agresividad y descalificación" que no había visto "nunca".
No hubo malas palabras para Sánchez o Díaz: ambos son "compañeros" y no sus "adversarios". Reconoció que no habla con ambos, pero sí dijo que espera "encontrarlos en los debates", una de sus exigencias más firmes de campaña —el pasado sábado logró que la gestora introdujera en las bases la precisión de que habrá "al menos" un duelo entre candidatos, y no fijara solo uno—. ¿Y ha tenido presiones para que se aparte? "No tanto presiones. Habrá gente que piense que debo retirarme. Hay unos que dicen que tengo que buscar una alianza con Pedro y otros que la tengo que buscar son Susana. No está mal, porque todos me ponen a mí para el entendimiento".
Aquí puedes ver la entrevista de @PatxiLopez en Informativos Telecinco #PatxiLopezT5 pic.twitter.com/kjTiZ2svRT
— SocialistasConPatxi (@PSOEconPatxi) 3 de abril de 2017
Y, para defender la viabilidad de su candidatura, López esgrimió que su estilo de campaña no se basa en grandes actos, sino en el encuentro cercano con muchos militantes, recorriendo las agrupaciones locales. "Ya he tenido conversaciones con miles y miles, y hay una mayoría silenciosa a la que no le gusta lo que ve en los medios o las redes" y pide "volver a caminar juntos". "No estoy en el choque de trenes, no estoy en el 'o conmigo o contra mí', en buscar la fractura, sino en buscar un espacio para integrar", remachó.
López incide en que puede ser "compatible" liderar la Junta y el partido, pero "no es recomendable". "No le niego capacidad, pero se trata de prioridad"
Y sobre la voluntad de Díaz de compaginar la Junta con el liderazgo del PSOE, incidió en que puede ser algo "compatible", "pero no es recomendable". "No le niego la capacidad a Susana, pero es una cuestión de prioridad, y el PSOE necesita recuperar músculo orgánico para redifinir su proyecto", así que el partido "no puede permitirse el lujo de tener un secretario general que no sea a tiempo completo".
"Unidad" e "izquierda exigente". Son las dos ideas fuerza sobre las que bascula el proyecto de Patxi López, el candidato socialista que se cree en mejor disposición para cohesionar a un partido roto y anclarlo en una posición ideológica clara, el dirigente poco amigo de los excesos verbales y el que rechaza que el 39º Congreso Federal, ya convocado, se convierta en un ejercicio de aniquilación del contrario interno o de sucesión de amenazas (o de amagos).