Mañueco barre a Silván en la pugna por el poder en el PP de Castilla y León

Alfonso Fernández Mañueco se ha llevado el gato al agua. El alcalde de Salamanca se ha impuesto en las urnas al primer edil de León, Antonio Silván, y se proclama así candidato único a la presidencia del Partido Popular de Castilla y León. En abril, los compromisarios populares encumbrarán a Mañueco en el Comité Regional del PP que se convocará al efecto y se pondrá fin a 15 años de control absoluto de Juan Vicente Herrera en el partido.

En su primera comparecencia pública tras conocer que ha vencido a Silván, con el 67% de apoyo, Fernández Mañueco ha iniciado su discurso dando las gracias por la confianza depositada y poniendo de manifiesto que "el que más gana es el PP de Castilla y León". "Necesito a todos para seguir construyendo el proyecto del PP", anunció Mañueco.

Antonio Silván ha reconocido ya su derrota a través de Twitter, dando la enhorabuena al regidor salmantino. "Los afiliados han entendido que su proyecto es el que quieren para Castilla y León", ha afirmado. De los 51.191 afiliados del partido en la comunidad, 6.819 han podido ejercer el derecho al voto, aunque han sido 6.047 los que han decidido participar. Mañueco ha logrado el 77,7% de apoyos en la provincia de Ávila, el 74,56% en Burgos, el 97,5% en Salamanca, el 87% en Segovia, el 63,6% en Soria, el 51% en Valladolid y el 84,9% en Zamora.

El duelo entre Mañueco y Silván se ha librado sin aspavientos pero no ha estado exento de 'sangre' y de críticas. El entorno de Silván ha denunciado hasta este viernes que el Comité Organizador del Congreso, tutelado por Raúl de la Hoz, ha puesto trabas económicas a los afiliados para poder inscribirse como votantes, situación que habría afectado especialmente a los militantes leoneses, supuestamente 'silvanistas'. León cuenta con cerca de 13.000 afiliados, pero solo una mínima parte se ha inscrito para votar (unos 1.600 de los que solo han sido aceptados poco más de 700).

El propio Herrera, tras depositar su voto en blanco -tal y como se había comprometido- en Burgos alabó las bondades del procedimiento electoral, así como la limpieza de sus gestores en todo el proceso que, descartando cualquier maniobra para perjudicar o beneficiar a algún candidato.

Según fuentes del PP consultadas por El Confidencial, "algunos sectores interesados han agitado esta falsa teoría. Simplemente se ha aplicado la norma. Igual para todos en la comunidad autónoma, por lo que no se ha permitido votar a quien no estuviese al corriente de pago con el partido. Algunos han intentado resolverlo abonando tan solo 10 euros, cuando la cifra era muy superior, o haciendo una transferencia que más tarde podría ser anulada tras las votaciones. Silván ha jugado limpio; no hay ninguna duda en ello. Él mismo ha refrendado el procedimiento, pero hay gente próxima a su candidatura que ha tratado de crear polémica".

Mañueco (Salamanca, 1965) tiene ahora por delante la difícil tarea de recomponer la fractura que ha supuesto la contienda por la presidencia del partido, tras 15 años en los que la figura de Juan Vicente Herrera -presidente de la Junta de Castilla y León y hasta su renuncia 'capo' del PP regional- ha sido un tema tabú e incuestionable, hasta el extremo de que tanto Mañueco como Silván aguardaron a que Herrera comunicase su decisión para lanzarse al ruedo electoral.

El malestar de los de Mañueco por las acusaciones de los de Silván es notorio y ha irritado al alcalde de Salamanca

El pulso en las urnas ha desgastado sobremanera al partido. A lo largo de toda la semana, según ha podido saber El Confidencial de fuentes próximas a los dos 'delfines' de Herrera,el clima entre ambos políticos se ha caldeado. El malestar de los de Mañueco por las acusaciones de los de Silván es notorio y ha irritado al alcalde de Salamanca. Por su lado, partidarios de Silván hablan de "la prepotencia que ha mostrado" Mañueco durante toda la campaña.

El jueves, el posicionamiento inequívoco de la mano derecha de Herrera en el Gobierno regional, José Antonio de Santiago-Juárez, de la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, de la titular de Familia, Alicia García, y de la exvicepresidenta de la Junta, Rosa Valdeón, en favor de Silván ha sido tomada como una "agresión innecesaria". Asimismo, ataques como los del histórico portavoz del Gobierno de José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, en Twitter, atizando las brasas de un supuesto pucherazo han elevado la polémica en la contienda con las urnas ya dispuestas para votar.

TE PUEDE INTERESAR

Problemas de censo elevan la tensión entre Mañueco y Silván por el poder en el PPCyL

Antonio S. Maeso

El alcalde de Salamanca hereda un partido que ha sido una 'apisonadora' electoral en la región, y donde la figura de Juan Vicente Herrera ha sido venerada hasta las últimas elecciones generales, en las que por un solo escaño perdió la mayoría absoluta en las Cortes.

El enfrentamiento de Herrera con Rajoy -el famoso episodio del espejo, en el que el burgalés le pedía al presidente del Gobierno que reflexionase sobre si él era el mejor candidato para las generales- y con algunos de sus ministros, como el dimitido de Industria, José Manuel Soria (por las polémicas del carbón y la central nuclear de Garoña) o el de Hacienda, Cristóbal Montoro (por la rebeldía del Gobierno de Castilla y León a plegarse a algunos planes de ajuste y sobre ordenación territorial) ha provocado un declive del 'herrerismo'.

Mañueco -próximo al coordinador general de Génova, Fernando Martínez Maillo- tendrá entre sus planes más previsibles reestructurar un partido que es un auténticogranero de votos para el PP, donde gran parte de la estructura rebosa 'doctrina Herrera' por todos sus poros.