Rajoy pide a Puigdemont un esfuerzo para dejar de dividir a la sociedad catalana

Mariano Rajoy ha pedido a Carles Puigdemont que haga un esfuerzo para frenar el proceso de división que mantiene abierto en la sociedad catalana con el desafío separatista. El jefe del Ejecutivo ha vuelto a tender la mano a los nacionalistas en el poder al mismo tiempo que les invitaba a ocuparse de los problemas de los ciudadanos en vez de perseverar en su empeño con el referéndum para la secesión de Cataluña.

En la conferencia de prensa que ha ofrecido en el Palacio de La Moncloa con el presidente de la República de Argentina, Mauricio Macri, Rajoy aprovechó para dejar claro que él mantiene la puerta abierta al presidente de la Generalitat pese a sus continuos desplantes. Y lo hizo después de conocerse el "no" que recibió a acudir a la conferencia de presidentes autonómicos transmitido en la entrevista "secreta" del pasado 11 de enero.

"Hablar siempre tiene sentido y dialogar siempre tiene sentido y, por tanto, yo estoy dispuesto a dialogar con el señor Puigdemont, como estoy dispuesto a dialogar con la sociedad catalana, y eso es lo está haciendo intensamente el Gobierno", contestó a el jefe del Ejecutivo sobre una posible petición de cita del presidente de la Generalitat para una entrevista oficial y pública.

Rajoy añadió todo el guión habitual de matizaciones a esa oferta de negociación que se basa en abordar los asuntos que "preocupan de verdad a la gente", como los tratados en la conferencia de presidentes autonómicos: las pensiones, el sostenimiento de los servicios públicos fundamentales, el nuevo modelo de financiación autonómica, los Presupuestos Generales del Estado o las inversiones.

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El presidente del Gobierno acusó a los independentistas de llevar la división a la sociedad catalana en su afán de promocionar e imponer el proyecto de secesión, cuestión sobre la basan toda su actuación política en los últimos cinco años.

Rajoy también destacó lo negativo que es para Cataluña que la estabilidad de su gobierno autonómico dependa de "partidos radicales, extremistas y antisistema". A su juicio, y en referencia a la CUP al forzar la salida de Mas, es "poco comprensible" que un partido que se presenta a las elecciones con un candidato tenga que cambiarlo porque "lo dice un partido extremista".

El jefe del Ejecutivo reiteró que Puigdemont no puede pretender un pacto sobre su proyecto de referéndum para incumplir la Constitución y la ley. "Eso no se le puede pedir a nadie y menos a un presidente del Gobierno, cuya primera obligación es garantizar el cumplimiento de la ley", remachó.