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Comisaria Pilar Allúe: así es la mujer que aspira a ser la primera directora de la Policía
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ingresó en el cuerpo con solo 19 años

Comisaria Pilar Allúe: así es la mujer que aspira a ser la primera directora de la Policía

La comisaria Pilar Allúe, pionera en ocupar altos cargos desempeñados siempre por hombres, se presenta a la plaza de directora adjunta. Zoido tomará la decisión final

Foto: Pilar Allúe, durante su toma de posesión como comisaria general de Policía Científica el 13 de enero de 2012. (EFE)
Pilar Allúe, durante su toma de posesión como comisaria general de Policía Científica el 13 de enero de 2012. (EFE)

Pilar Allúe Blasco (Valencia, 1961) es la mujer que más lejos ha llegado dentro de la Policía Nacional, una institución dominada por hombres, sobre todo en los altos cargos. En 1980, con apenas 20 años ingresó en el entonces Cuerpo Superior de Policía como inspectora. Era la segunda promoción en la que se permitían mujeres, aunque aún solo en la escala ejecutiva (en la básica, no accederían hasta 1985). Su primer destino fue en los Servicios de Información de la comisaría de L'Hospitalet de Llobregat.

Estuvo allí hasta 1983, cuando se incorporó a la Policía Judicial de Valencia. Seis años más tarde, se hizo cargo del departamento de atención a la mujer. En 1991 se convirtió en la primera inspectora jefa de la corporación, y en 1997, en la primera comisaria. Fue entonces cuando la Dirección General la trasladó hasta Baleares, donde ejerció como jefa de Información de las islas. En 2007 volvió a romper moldes, fue la primera fémina en alcanzar el mando de jefa superior de una comunidad autónoma. En concreto, fue nombrada máxima autoridad policial de Cantabria.

Pero sus aspiraciones no terminaban en la consecución de un cargo más o menos relevante. El 13 de enero de 2012, Ignacio Cosidó introdujo por primera vez a una mujer en la cúpula de la Policía Nacional: Allúe fue nombrada comisaria general de Policía Científica, cargo que apenas cinco meses después fue ratificado por su ascenso al máximo rango profesional del cuerpo, el de comisaria principal. También, por supuesto, fue la primera mujer en obtener este último nivel profesional.

A efectos prácticos, sin embargo, y a pesar de su cargo, Allúe apenas contaba para el entonces director adjunto operativo, Eugenio Pino, que conformó una camarilla en la que no estaba la comisaria general. Este aislamiento podría venirle bien ahora a la pionera comisaria principal, ya que Pino acabó su mandato salpicado por los escándalos de la guerra entre comisarios, del caso del pequeño Nicolás o de las grabaciones al entonces ministro Jorge Fernández Díaz, y el actual responsable de Interior, Juan Ignacio Zoido, busca a alguien 'limpio' de corrupción para ocupar el cargo de director adjunto operativo.

Allúe, además, encaja en lo que busca el ministro, ya que la actual comisaria general de Policía Científica tiene un perfil neutro, que no busca protagonismo ni liderar corriente alguna dentro del cuerpo. Ni siquiera se arroga el mérito de ser la mujer de referencia del instituto armado, algo que achaca a la impepinable presencia cada vez más importante de las féminas en la corporación. Esta criminóloga y licenciada en Geografía e Historia, que cuenta con tres cruces blancas y casi un centenar de felicitaciones públicas, es, de hecho, poco dada a hablar con los medios, algo en lo que también se diferencia de su predecesor y que viene de nuevo como anillo al dedo a Zoido, que busca a alguien que respete el silencio, ya que a su entender es él directamente quien debe controlar la relación con la prensa.

Discreta y trabajadora, Allúe se considera una policía más, casi sin considerar el género. De hecho, huye del término 'cuota' casi lo mismo que de pertenecer a algún tipo de camarilla o 'lobby' dentro de la Policía. Es soltera, no tiene hijos y sus aficiones son de lo más variadas. Desde la fotografía hasta los viajes, todo parece interesar a una mujer culta que durante los últimos años no ha parado de acudir a foros de defensa de la mujer. Aunque no siempre con el mismo éxito. En uno de ellos, cuando se celebraba el 25 aniversario de la incorporación de las mujeres al cuerpo, algún comentario suyo levantó ciertos recelos entre el resto de público femenino.

Foto: El ministro Zoido, Cifuentes y Dancausa con mandos policiales. (EFE)

La comisaria Allúe tendrá que competir en la carrera a la dirección de la Policía con otros candidatos que también están bien posicionados y que cumplen los requisitos que exige el ministro, como el actual director operativo en funciones, el comisario principal Antonio Rodríguez, el máximo responsable del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco), José Luis Olivera, o el comisario general de Extranjería y Fronteras, Juan Carlos Ortiz Argüelles.

Los cuatro, además de otros aspirantes que también se han presentado a la plaza, se disputan un destino que ha salido por primera vez a concurso después de que así lo determinara Cosidó, que publicó por primera vez la plaza al final de la anterior legislatura. Entonces se presentaron 14 candidatos, pero el nuevo equipo de gobierno del Ministerio del Interior dejó pasar el tiempo y convocó otra vez el cargo. El plazo para entregar las solicitudes a ocupar la dirección adjunta operativa de la corporación concluye hoy. Todos los aspirantes deben ser comisarios principales y licenciados, requisitos exigidos en la convocatoria.

Pilar Allúe Blasco (Valencia, 1961) es la mujer que más lejos ha llegado dentro de la Policía Nacional, una institución dominada por hombres, sobre todo en los altos cargos. En 1980, con apenas 20 años ingresó en el entonces Cuerpo Superior de Policía como inspectora. Era la segunda promoción en la que se permitían mujeres, aunque aún solo en la escala ejecutiva (en la básica, no accederían hasta 1985). Su primer destino fue en los Servicios de Información de la comisaría de L'Hospitalet de Llobregat.

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