Iglesias asume la mayoría reforzada para una fusión con IU y 'una persona un cargo'

El modelo organizativo que Pablo Iglesias defenderá en el congreso de Vistalegre II asume varias de las premisas planteadas tanto por el sector errejonista como por el anticapitalista. Entre ellas destaca el principio de una persona un cargo interno -y otro público-, en el que coinciden todas las corrientes para frenar la acumulación de poder en un grupo reducido de personas, la descentralización del poder hacia los territorios, que tendrán autonomía para definir las listas electorales, así como la necesidad de que una hipotética fusión orgánica con Izquierda Unida sea respaldada por una mayoría reforzarda: dos tercios de los inscritos y dos tercios de los círculos activos. El documento, titulado 'mandar obedeciendo', en la lógica zapatista, supone un guiño al líder del sector anticapitalista, Miguel Urbán, que animaba al secretario general en una entrevista en este diario a adoptar la máxima que hizo famosa el subcomandante Marcos.

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Los ejes en los que se centra la propuesta para dotar a la formación de un nuevo modelo organizativo se basan en los principios de "democracia directa", frente a la democracia representativa, y en recuperar la senda fundacional del partido-movimiento, superando la estructura de la organización clásica de partido. Para ello, los círculos e inscritos contarán con representación en el consejo ciudadano estatal, podrán convocar consultas, decidir las alianzas en sus respectivos territorios y realizar revocatorios. Esta última posibilidad ya figuraba en los estatutos fundacionales del pertido, pero ahora se haría extensible también a los cargos internos, y no solo a los públicos. El secretario general mantendrá asimismo su actual atribución de convocar consultas en cualquier nivel territorial.

La apuesta por la descentralización, una dinámica en la que también han insistido tanto desde el sector errejonista como desde el anticapitalista, es otro de los retos que se marca el secretario general. Así, se otorgará plena capacidad jurídica a los niveles municipal y autonómico "para obrar en nombre de Podemos" y los responsables territoriales verían atendida una de sus reivindicaciones más compartidas: el acceso al censo de los inscritos.

Entre las novedades organizativas que introduce el documento, avalado por Pablo Iglesias y otros sesenta dirigentes, se encuentran también la creación de la secretaría de feminismos, un área de mundo rural y la asunción de la paridad como suelo, garantizando un mínimo del 50% de mujeres en todos los órganos. En la línea de la descentralización, reflejando la propia organización en el espejo de la plurinacionalidad y el federalismo que defienden para el país, el proyecto de 'Podemos para todas' pretende reforzar los niveles supramunicipales, como el insular, el provincial y el comarcal, que no contaban con entidad hasta ahora en la organización.

El texto sienta las bases para un entendimiento entre los dos principales sectores del partido tras Vistalegre II, aun si finalmente deciden confrontar

Tras registrarse la marca Unidos Podemos en el Ministerio de Interior, la comunidad de Madrid se ha convertido en la avanzadilla para la unidad de las fuerzas del cambio, prinicipalmente IU. El borrador del informe político que la formación dirigida en la región por el tercer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, Mauricio Valiente, y la alcaldesa de Ciempozuelos, María Jesús Alonso, presentará en su próxima asamblea político y social lo pone negro sobre blanco. En el texto se defiende el desarrollo de una estrategia unitaria mediante "la creación, en coordinación con Podemos, Equo y las fuerzas comprometidas con el cambio en nuestra región que lo deseen, de Unidos Podemos en la Comunidad de Madrid”.

El secretario de Organización de Podemos Madrid, Fran Casamayor, por su parte, rechazaba hablar de fusión orgánica en declarciones a este diario porque la "relación virtuosa” con otros actores del cambio no tiene por qué implicar “ataduras orgánicas”. En todo caso, insistía en que todas estas cuestiones, al igual que la fórmula jurídica bajo la que presentarse conjuntamente a las elecciones de 2019, se llevarán a debate y serán las bases las que tengan la última palabra mediante referéndum.

Bases para el acuerdo tras Vistalegre II

Íñigo Errejón reclamaba asimismo el pasado viernes, blindar la independencia de la formación y que cualquier fusión orgánica con otra organización, como puede ser IU, tenga que aprobarse en una Asamblea Ciudadana con el apoyo de una mayoría reforzada de dos tercios. Esta medida, ahora asumida por el máximo dirigente del partido, avanza en la idea que defiende el documento político 'Desplegar las velas: un Podemos para gobernar', suscrito por Errejón, que sostiene que "para cambiar España no basta con refundar o unir a la izquierda", sino que hay que buscar una meta más ambiciosa: la unidad popular".

Otro de los principales puntos con los que Iglesias trata de acercarse a Errejón en este documento tiene que ver con el modo de elección del consejo de coordinación, el órgano encargado del día a día de la organización. Hasta ahora estaba formado por diez miembros que nombraba directamente el secretario general. Errejón reclamaba que sus miembros fuesen nombrados directamente por el consejo ciudadano estatal (CCE) e Iglesias lo ha asumido también en su documento, añandiendo que actuará de manera colegiada. Las secretarías con las que contará también serán elegidas por el CCE. Este paso sienta las bases de un entendimiento entre los dos principales sectores del partido tras Vistalegre II, aun si finalmente deciden medir sus fuerzas.