Rajoy, Rivera y los equipos negociadores se reúnen en una cena en La Moncloa

La cena de este lunes en el Palacio de La Moncloa contó con mucha más gente de la habitual. Mariano Rajoy, Albert Rivera y sus respectivos equipos negociadores de cara a la investidura del candidato popular compartieron mesa y mantel anoche en un encuentro "distendido", según confirman fuentes naranjas y que adelantó la Cadena Ser. Miembros presentes en la cita aseguran que estuvieron presentes los protagonistas de las intensas conversaciones producidas el pasado agosto y que finalmente terminaron con una investidura exitosa de Rajoy en octubre. "Lo teníamos pendiente desde agosto, quedamos en que había que cenar un día y se ha ido retrasando", explican a este diario. El presidente de C's afirmó en una rueda de prensa este martes que se trató de "una cena sin debates" y dentro de la normalidad. "No debería ser noticia", afirmó.

De hecho, según insisten algunos de los que acudieron, la cita no tuvo un objetivo concreto más que el encuentro en sí mismo, pese a que todavía está pendiente la negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 2017, sobre los que la formación de centro apremia al Ejecutivo para que los presente cuanto antes. Fuentes populares enmarcan el encuentro, también "distendido", para "cuidar las relaciones" entre ambos teniendo en cuenta que el partido de centro es el socio preferente para el PP... aunque los acontecimientos recientes sitúan al PSOE en el objetivo principal de los conservadores.

El acuerdo de 150 puntos alcanzado entre PP y Ciudadanos para dar el sí a Rajoy en la investidura, permitieron abrir el debate en el PSOE que terminó con la abstención generalizada y la salida de Pedro Sánchez de la secretaría general. Algunos de los compromisos adquiridos entre populares y centristas ya se han puesto en marcha, como la ley de autónomos o la ampliación del permiso de paternidad -con modificaciones, eso sí- según resaltó ayer el mismo Rivera en una rueda de prensa, en la que también anunció un próximo acuerdo con el Gobierno para dividir la CNMC en dos organismos reguladores y modernizar el sistema bancario español.

Aun así, son muchos los compromisos que siguen pendientes de su aprobación. Algunos sobre regeneración democrática, que incluyen, entre otros, la limitación a dos legislaturas u ocho años los mandatos de los presidentes del Gobierno -que también ha protagonizado una polémica tras reconocer dirigentes de Ciudadanos que no existe una obligación jurídica para que Rajoy abandone tras la presente legislatura-. A este posible incumplimiento se suman otras medidas estrella para los de centro que el PP no tiene intención de asumir, como es el caso de la eliminación de diputaciones, la recuperación del dinero proveniente de la amnistía fiscal aprobada por Montoro o la no subida de impuestos.

Con respecto a las seis exigencias previas expuestas por los naranjas para iniciar la negociación pura y dura del sí, una de ellas fue la creación de una comisión que investigue la presunta financiación ilegal del PP en el Congreso de los Diputados, que la formación conservadora intentará dilatar por todos los medios. Fuentes de Ciudadanos insisten en que esa comisión “se creará” porque toda la oposición está de acuerdo y apoyará la iniciativa, que previsiblemente irá al pleno del Congreso en el mes de febrero. Eso sí, el pacto de Ciudadanos y PP estipulaba su creación “en los tres primeros meses de legislatura”, un plazo que los de centro ya dan por hecho que no se cumplirá.

Con respecto a la negociación de los PGE, Ciudadanos insiste en que todavía no han comenzado las conversaciones mientras reiteran su "voluntad de llegar a un acuerdo". Aunque la formación de centro no pretende negociar con otros partidos, Ciudadanos insiste en que "los números no dan", e instan al PP a explorar otros contactos para tener un proyecto de cuentas públicas cuanto antes.