Los barones dejan solo a Sánchez en su vuelta mientras Díaz mide su poder en Madrid

Pedro Sánchez vuelve. Casi un mes después de que dejara su escaño en el Congreso y de su impactante entrevista en 'Salvados'. Y lo hace en Xirivella y en Sueca, dos localidades valencianas, este mismo sábado. Pero no se rodeará, salvo sorpresa, de los barones que le apoyan frente a Susana Díaz. No busca una imagen que le facilitaría exhibir músculo orgánico. Su propósito es presentarse como el ex secretario general que desea formar parte de un proyecto que dé "la voz a la militancia" y que se apoya en ella. Aunque a la vez los responsables autonómicos alegan, en algunos casos, razones de agenda para no acompañar al exlíder socialista.

La cita en Valencia será algo más de 12 horas después de una cena en un céntrico restaurante en Madrid de cargos y militantes afines a la gestora, contrarios a Sánchez y alineados con Tomás Gómez y Susana Díaz. Dos fotos distintas y con significados diferentes: un Sánchez en territorio hostil como estrella principal de un acto con las bases y los susanistas midiendo poder en una federación cuya cúpula está claramente escorada del lado del ex secretario general. Cada bando, pues, calibra sus fuerzas antes de dar el salto, pero en el caso de Sánchez ya son muchos los dirigentes que reconocen que tiene dudas y que no está del todo decidido a competir otra vez por el liderazgo del PSOE.

En el coloquio en Xirivella participarán Odón Elorza y José Antonio Pérez Tapias, y José Luis Ábalos ejercerá de anfitrión. Asistirá al auditorio el alcalde de Jun

El ex secretario general reaparecerá este sábado a mediodía en el auditorio de Xirivella, una localidad de casi 29.000 habitantes del cinturón de Valencia. Y es más que seguro que llenará y rebasará de sobra un patio de butacas de entre 350 y 400 localidades. Allí participará en un coloquio titulado 'Repensar el PSOE, construir el futuro', en el que también intervendrán el diputado por Guipúzcoa y exalcalde de San Sebastián, Odón Elorza; José Antonio Pérez Tapias, rival de Sánchez en las primarias de 2014 y miembro de la corriente Izquierda Socialista, y dos dirigentes más cuyo nombre se estaba cerrando anoche. También hablarán tanto el alcalde de Xirivella, Michel Montaner, como la secretaria general de la agrupación que cursó la invitación a Sánchez, Águeda Ferrandis, y el secretario provincial del PSOE en Valencia, José Luis Ábalos, integrante de la dirección del grupo en el Congreso y uno de los más fieles peones del exlíder. Ha confirmado asistencia el regidor del municipio granadino de Jun, José Antonio Rodríguez Salas, que nunca llegó a entregar las firmas de más de 90.000 militantes para exigir la convocatoria urgente de un congreso federal.

Sobre las 17:30, Sánchez se desplazará a Sueca. Pero no protagonizará ni mesa redonda, ni mitin, ni tomará la palabra. Saludará a los militantes y después regresará a Madrid.

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"Entrada libre"

Los colaboradores de Sánchez esperan que se dé un "baño con las bases", porque ahí radica, dicen, su principal fuerza. Y se ha diseñado un acto "más en clave valenciana", y no nacional. "No se espera que venga ningún barón próximo a Pedro. No se ha invitado de hecho a nadie. La entrada es libre. Pero que fueran secretarios generales habría sido contraproducente para el mensaje que quiere lanzar. Habría sonado a campaña, y él no quiere eso, ni quiere adelantarse a los tiempos. Se trata de ver un poco la reacción de las bases", justifica uno de los dirigentes que es conocedor de los preparativos de la jornada.

En el entorno de Sánchez se insiste en que los protagonistas del acto son los militantes, y por eso no se prevé la llegada de barones. Algunos tienen agenda

"Pedro va a estar arropado suficientemente, y quienes deben hablar son los afiliados. Nosotros ya hemos hablado demasiado —amplía uno de los barones más activos en la defensa de Sánchez—. Se trata de una charla pausada, una reflexión serena y ordenada, y que se vea que hay al menos dos formas de entender el partido". Tiene importancia el lugar: la comunidad está gobernada por el líder del PSPV, Ximo Puig, uno de los dimisionarios de la anterior ejecutiva y un barón muy próximo a Susana Díaz, pero que tiene enfrente al jefe provincial más importante de su federación, el valenciano José Luis Ábalos.

En la órbita de Sánchez se ubican la presidenta de Baleares, Francina Armengol, y los secretarios generales de Castilla y León (Luis Tudanca), Madrid (Sara Hernández), Murcia (Rafa González Tovar), Euskadi (Idoia Mendia), Navarra (María Chivite) y La Rioja, César Luena, el secretario de Organización federal en los últimos dos años. También se sitúan en el flanco sanchista la presidenta de la gestora gallega, Pilar Cancela. Ninguno de ellos, en principio, estará en Xirivella, "salvo sorpresa", según insisten los organizadores y confirman en los territorios. Algunos barones tienen sus agendas completas: Armengol, por ejemplo, acude a un acto con la reina Sofía y Mendia asiste a la jura o promesa de Iñigo Urkullu como lendakari en Gernika. Este periódico no logró contactar con Luena o Tovar, pero se da por descontado que también faltarán. "El mensaje es que mientras que los barones alineados con la gestora se reúnen para urdir, Pedro está del lado de la militancia y su poder", resume uno de sus fieles.

Ausencias y presencias

No obstante, se sentirán otras ausencias significativas, como la de la responsable de Política Municipal con Sánchez, Adriana Lastra (una dirigente absolutamente fiel), que alega compromisos personales ineludibles, la de la diputada y exmagistrada Margarita Robles, la de su compañera aragonesa Susana Sumelzo o la del expresidente del Congreso Patxi López, que la víspera coprotagoniza un homenaje al exministro Ernest Lluch en Vilassar de Mar (Barcelona) con Miquel Iceta. El primer secretario, por cierto, ya está fuera de la 'trinchera' sanchista: quiere salvar la relación del PSC con el PSOE y proclama su neutralidad en la batalla interna del 39º Congreso. No es baladí que Iceta viajara este jueves a Sevilla para recomponer sus relaciones con la presidenta andaluza y le garantizara que no apoyará a ningún candidato.

Sí acompañarán al ex secretario general algunos diputados que votaron no a Mariano Rajoy el pasado 29 de octubre, y que han sido castigados por la dirección provisional de Javier Fernández, como la balear Sofía Hernanz (amiga del exlíder), la palentina Luz Martínez Seijo, y la madrileña Zaida Cantera, la comandante en retiro fichada para las listas de Madrid en las dos últimas generales. Asimismo le arroparán Juanma Serrano y Maritcha Ruiz, quienes fueron su jefe de Gabinete y la directora de Comunicación del PSOE en Ferraz durante su mandato y que siguen colaborando con él. "Pedro presentará en Valencia un proyecto común y un modelo de partido distinto al que defiende la gestora y que quiere imponer Susana: transparente y participativo y donde hablen las bases", precisan en el entorno más cercano a Sánchez. La próxima parada de su ruta será probablemente Asturias. Y aún faltaría otra cita más antes de Navidad, calculan en su círculo.

Sí asistirán las diputadas Sofía Hernanz, Luz Martínez Seijo y Zaida Cantera. El exlíder esbozará su proyecto y su modelo de PSOE, "transparente y participativo"

Sánchez no dispone todavía de un equipo "estable" de campaña, básicamente porque aún no ha llegado a ese punto. No quiere que su recorrido por las agrupaciones suene a una "gira personalista". También porque no hay primarias convocadas ni un calendario aprobado. Desde que fue descabalgado del poder, el 1 de octubre sus barones fieles o sus números dos y dirigentes afines, como relataba 'El Mundo', se han reunido en tres ocasiones: el 10 y el 22 de octubre (la víspera del comité federal que decidió el viaje a la abstención) y el 3 de noviembre. En esta última ocasión, en un formato más reducido, en un encuentro al que acudió el propio Sánchez. Pero el acto de Xirivella, confiesa uno de los asistentes a estas citas, "no forma parte de la estrategia ni de un operativo organizado". Nace en parte de la necesidad de reaparecer públicamente tras casi un mes fuera de los focos, de cumplir su compromiso y de ir forjando un relato.

Sin embargo, las dudas sobre la viabilidad de la candidatura de Sánchez existen. Quienes hablan con él le ven "animado", aunque también perciben sus "vacilaciones", porque no transmite a sus interlocutores que con toda seguridad vaya a optar al liderazgo del PSOE. A ello se suma que dentro de su propio espacio, haya quienes interpreten que está "quemado" como candidato por el grado de enfrentamiento con que culminó su mandato y que sea mejor construir una alternativa a Díaz con otro aspirante. Y ahí todas las miradas se dirigen a Patxi López, a quien no todos le ven dispuesto a competir, si llega el caso, contra la presidenta andaluza, y sí más bien a pactar con ella. Otros sanchistas estiman que el ex secretario general tiene un capital único: "Él éncarna el sacrificio, la voz de la militancia frente a los barones. Esa épica o mística, si él no va, se desvanece".

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De unas 100 agrupaciones de Madrid

Antes de la mesa redonda en Xirivella, habrá otro acto relevante en Madrid. De signo contrario: una cena hoy viernes en el restaurante Riazor de la capital, a las 21 horas, convocada por el núcleo de confianza del anterior líder regional, Tomás Gómez, defenestrado por Sánchez en febrero de 2015. Gómez es uno de los dirigentes que mantiene una relación fluida con Díaz, al igual que el exportavoz en el Ayuntamiento de la ciudad, Antonio Miguel Carmona.

Los interlocutores de Sánchez sí aprecian que tiene dudas y que tiene totalmente decidido si dar el paso. Si renunciara, el favorito es Patxi López

El encuentro se comenzó a montar "hace dos semanas", según fuentes de la antigua ejecutiva, a petición de distintos militantes y cargos regionales. En principio, se preveía una reedición de la cena que los tomasistas hicieron el pasado diciembre, pero en este caso se cuenta con dirigentes que se han resituado del lado de Díaz y se espera una movilización semejante: por encima de 400 personas, entre afiliados y cuadros (alcaldes, secretarios generales, responsables de Organización, concejales) "de unas 100 agrupaciones".

Es segura la presencia del círculo de confianza de Gómez: Maru Menéndez, Eusebio González, Noelia Martínez, Rosa Alcalá, las exdelegadas del Gobierno Lola Carrión y Amparo Valcarce, el exregidor de Getafe Pedro Castro, la exmiembro de la ejecutiva de Sánchez Eva Matarín o el propio Carmona. Díaz y la gestora "están plenamente informadas" de la cena, asegura uno de los organizadores del encuentro. Ferraz no lo desmiente y en el PSOE andaluz se apela a esa relación cercana que mantiene la presidenta con Gómez y Carmona.

La cena, convocada por los tomasistas, reunirá a unas 400 personas. De ella saldrá un apoyo explícito a la gestora y sus planes y un aval tácito a Díaz

El objetivo confesado de la cita es prestar "apoyo sin fisuras a la dirección de Javier Fernández" y a sus planes de convocar una conferencia política previa al congreso. "Pero es evidente que también Susana puede mostrar músculo aquí. Madrid no es ni mucho menos en su totalidad de Pedro ni de Sara Hernández. Todos los que nos veremos somos susanistas, y no vemos más alternativa que ella, eso está claro". No obstante, hay partidarios de la baronesa andaluza que no asistirán al encuentro en el Riazor, porque no encajan dentro del espacio del tomasismo, como los miembros de la ejecutiva de Hernández que se han desligado de ella —caso del alcalde de Móstoles, David Lucas, y de la diputada Ángeles Álvarez—, o el sector que lidera el parlamentario autonómico Juan Segovia, que rivalizó con la actual jefa del PSOE-M en primarias en julio de 2015 y perdió. De cualquier modo, es uno de los primeros pasos para tejer una plataforma de apoyo a Díaz en una federación clave, Madrid, la tercera en militantes tras Andalucía y Valencia.

Próxima reunión de la gestora, el lunes

Esta vez no pasará un mes desde la última reunión de la gestora socialista. El próximo encuentro de la dirección provisional, encabezada por Javier Fernández, será el próximo lunes, 28 de noviembre, once días después de la anterior, la que aprobó los relevos dentro del grupo parlamentario. Así lo confirmaron fuentes de Ferraz a este diario.

La gestora tiene pendiente fijar la fecha del siguiente comité federal, el que tiene que sancionar la hoja de ruta hasta el 39º Congreso. Hasta ahora, se daba por hecho que se celebraría a mediados de diciembre, pero en los últimos días algunos miembros de la cúpula interina anticipaban que quizá, por razones de agenda, se decida posponerlo hasta enero.