Es noticia
Guindos reivindica la idoneidad de Soria ante una oposición que le acusa de "mentir"
  1. España
LA POLÉMICA POR EL PUESTO EN EL BANCO MUNDIAL DEL EXTITULAR DE INDUSTRIA

Guindos reivindica la idoneidad de Soria ante una oposición que le acusa de "mentir"

El ministro subraya que su perfil era el "más adecuado", y reconoce que fue una "designación discrecional", aunque guiada por criterios "técnicos". Los grupos le piden que dimita

Foto: Luis de Guindos, durante su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso, este 13 de septiembre. (Reuters)
Luis de Guindos, durante su comparecencia ante la Comisión de Economía del Congreso, este 13 de septiembre. (Reuters)

La "historia de una no designación". El relato de un nombramiento efímero, de poco más de tres días, pero que soliviantó a la oposición y que forzó una inédita marcha atrás en un periodo de parálisis política. Eso fue a contar Luis de Guindos al Congreso. Que la postulación del exministro José Manuel Soria para el Banco Mundial respondía a una "designación discrecional", pero de carácter "técnico" y no "político", y que él tenía "el perfil más adecuado" de todos los candidatos. Pero sus explicaciones no convencieron. No movieron a los grupos de la oposición, que seguían atizando al Ejecutivo en funciones por la sucesión de "mentiras". Una secuencia de hechos que merecía, para algunos de ellos, la dimisión. Esa cabeza no rodará. Al menos de momento. Lo que sí hay es una asunción del Ejecutivo de que los argumentos de la oposición eran "válidos", pero solo en los tres días en los que duró la colocación de Soria en el BM.

La comparecencia del ministro en la Comisión de Economía del Congreso, este martes, intentó salvar la cara del Gabinete de Mariano Rajoy, aunque evidenció algunas rectificaciones o matizaciones en el propio discurso sostenido en las primeras horas y días que sucedieron a la borrascosa designación del extitular de Industria para el cargo de director ejecutivo del Banco Mundial. Guindos ya no dijo que habría sido ilegal no promocionarle (así lo aseguró también Rajoy desde la cumbre del G20 en Hangzhou, China), reconoció que el procedimiento de elección tenía una publicidad restringida, asumió que no era un puesto exclusivo para funcionarios aunque era la pauta que marcaba la tradición, se abrió a mejorar los mecanismos de concurrencia a partir de ahora.

Foto: El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, este 13 de septiembre en la Comisión de Economía del Congreso. (EFE)

Pero tampoco hubo en su intervención ante sus señorías —a ratos intensa, pero no tremendamente crispada, incluso diputados de diferentes grupos le agradecieron su "valentía" y le compadecieron por comerse ese "marrón" de la comparecencia— rastro de críticas al comportamiento del extitular de Industria.

La comparecencia destapó una cuarta "mentira" del Gobierno: Rajoy dijo que Soria se había reincorporado al cuerpo de funcionarios; el ministro dijo que no

Ante la constante marea de dudas y críticas por parte de la oposición, que se hacía cruces con el hecho de que el Gobierno no se diera cuenta de que un ministro dimitido por los papeles de Panamá y por tanto por su participación en empresas que operaban en paraísos fiscales no podía ser válido para un cargazo en el BM, Guindos tiró de la misma cantinela: que de todos los aspirantes que se presentaron a la segunda convocatoria, él era el más cualificado. Y por eso se le eligió. Con criterios "técnicos", y porque además no estaba ni está "inhabilitado ni tampoco investigado, ni judicial ni administrativamente".

Luis de Guindos sobre el nombramiento de Soria para el Banco Mundial: "Son designaciones técnicas"

"Más de 650 funcionarios" afectados

Guindos arrancó su comparecencia explicando cómo es el procedimiento de elección de aspirantes a las Instituciones Financieras Internacionales (IFIs), que en efecto no se rige por el estatuto del empleado público ni por el mecanismo de ingreso en la Administración General del Estado. La propuesta de candidatos "compete al Ministerio de Economía, en concreto al secretario de Estado de Economía", porque este es quien tiene la competencia de representación en los foros económicos internacionales. "Son designaciones de naturaleza técnica: no requieren ser elevadas a Consejo de Ministros ni intervención alguna del Gobierno. Por tanto, señorías, no se trata en ningún caso de nombramientos políticos". Esa primera aclaración del titular de Economía desprendió una risotada general entre los parlamentarios de la oposición. Guindos precisó justo a continuación: esa designación de candidatos es "discrecional", aunque "para facilitar su selección se dota al proceso de concurrencia". Y siempre se ha hecho así, alegó una y otra vez, para justificar el porqué del enchufe de Soria.

El ministro matiza varias de las afirmaciones que él mismo y Rajoy hicieron los días de la tormenta: no dijo que era ilegal no nombrarle ni que hubo concurso

O sea, una publicidad restringida, pues se da a conocer la apertura de convocatorias a los cuerpos superiores de funcionarios a través de sus distintas asociaciones. Hablamos de técnicos comerciales y economistas del Estado y diplomados comerciales del Estado. En total, "más de 650 funcionarios". Guindos recalcó en varias ocasiones ese carácter "discrecional" de selección de aspirantes a las IFIs, que "se da también en la mayor parte de países de nuestro entorno".

Guindos defiende que Soria era el candidato adecuado para el Banco Mundial

El ministro pasó a relatar después cómo se procedió a cubrir la vacante del Banco Mundial, la silla que España ocupará desde el próximo 1 de noviembre hasta el 31 de octubre de 2016, el puesto de director ejecutivo que representa a ocho países —España, México, Venezuela, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Honduras y Nicaragua— y que se somete a rotación cada dos años entre los tres primeros Estados. El 4 de enero de 2016, siguiendo un proceso "que se aplica desde hace décadas", la Secretaría de Estado de Economía remite cartas a los presidentes de las asociaciones de técnicos comerciales y de diplomados del Estado —los únicos cuerpos que han conseguido acceder a estos cargos en las IFIs en los últimos 30 años, insistió—, en las que se informa de los puestos a cubrir en las IFIs este año. Se dio 15 días de plazo para presentar solicitudes. A la convocatoria de los diferentes puestos se postularon 47 candidatos, de los cuales 25 lo hacían para el cargo de director ejecutivo del Banco Mundial, un cargo remunerado con más de 226.000 euros, libres de impuestos.

Foto: José Manuel Soria y Luis de Guindos, en La Habana en 2015. (EFE)

Por "prudencia"

A finales de febrero se reúne la Comisión de Evaluación conformada por los cargos del ministerio con competencia directa en las IFIs. Y decide cubrir solo las plazas de asesores, y no las demás. Actuó así por "prudencia y sensibilidad", indicó Guindos, porque en ese momento Pedro Sánchez estaba liderando su proceso de investidura y "siempre" la política del departamento era la de ser "cuidadosa" con los nombramientos. De nuevo, el ministro se agarró a la tradición.

[Consulta aquí en PDF la intervención inicial de Guindos en el Congreso]

A mediados de marzo, la resolución de las convocatorias para otros puestos y la reducción de aspirantes a 30 personas (y de 25 a 18 en el caso del Banco Mundial), aconsejó abrir un nuevo procedimiento. Y para eso la Secretaría de Estado pide informe a la Abogacía del Estado, que avala esa decisión el 27 de junio, un día después de las generales del 26-J. Ese documento consideraba "coherente" iniciar de cero la convocatoria, que se ejecuta el 28 de junio. Se envía de nuevo a las asociaciones y se reciben 15 solicitudes, 10 de ellas para el BM, entre las que figuran la de Soria y la del exsecretario de Estado Fernando Jiménez Latorre.

Economía abrió dos veces la convocatoria de la plaza para el BM: en la segunda se presentaron diez aspirantes. Entre ellos, Soria y Jiménez Latorre

La institución daba como fecha límite para enviar las propuestas el 2 de septiembre. Fue ese el día en que se reunió la Comisión de Evaluación para resolver la cobertura de las plazas de directores, justo cuando el Congreso votaba por segunda vez la investidura de Rajoy como presidente del Gobierno. Ese órgano valora las candidaturas según los términos de referencia difundidos en la convocatoria, que sin embargo no establecen baremos. Guindos afirmó que de entre los aspirantes que optaban a la plaza para el BM, era Soria el que "presentaba el perfil más adecuado". "Otros candidatos también cumplían los requisitos del puesto, pero ninguno de ellos en la medida en que lo hacía el señor Soria", defendió.

Guindos apoya la elección de Soria ante una oposición que le pide dimitir

Ese mismo 2 de septiembre, para "dotar de transparencia la propuesta", el Ministerio de Economía divulga un comunicado en el que da cuenta de la elección. Pero ese envío llegó apenas minutos después de que Rajoy se estrellara contra el muro del Congreso. La polémica dentro y fuera del PP estaba servida. El resto de la historia es conocida: Soria renunció el 6 de septiembre —el mismo día en el que El Confidencial informa de los términos de referencia de la convocatoria, que no era solo para funcionarios y que no fue publicitada—, "a petición del Gobierno". El sustituto elegido por la Comisión de Evaluación fue Jiménez Latorre, que había quedado en segundo lugar, y su nombre fue elevado a todos los gobernadores del BM, a tiempo para que España pudiera cubrir su vacante.

El titular de Economía sí admite que los argumentos y críticas de la oposición son "válidos, pero por tres días", los que mediaron hasta que Soria abandonó

El último pasaje de la intervención del ministro dejaba una pregunta obvia: si el exmandamás de Industria era el aspirante idóneo, ¿por qué el Gobierno le pidió que renunciara? Por las "dimensiones políticas y mediáticas" que había provocado la decisión de su postulación, señaló. O sea, por el "impacto" del escándalo, pese a que Rajoy había dicho que habría sido injusto no promocionarle.

Críticas hasta del partido naranja

Toda la oposición vio rendijas y fisuras en las explicaciones de Guindos, amén de que le reprochara que compareciera en comisión y no en pleno. La crítica compartida, escuchada por boca de los portavoces, incluso del de Ciudadanos, Toni Roldán, era que el Gobierno en funciones había "mentido" en un primer momento al dar cuenta de la designación de Soria. Los más duros, como era esperable, fueron el socialista Pedro Saura y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, que al acudir a la cita de este martes quería evidenciar que le concedía toda relevancia. Saura sostuvo que el compromiso de Rajoy con la regeneración democrática "es cero" como demostró que apenas "dos minutos después" de fracasada su reelección se anunciara la propuesta de Soria. El diputado recordó las tres "mentiras" que rodean este caso: no era "verdad" que el puesto de director ejecutivo del BM fuera solo para funcionarios, no era verdad que hubiera una convocatoria pública de por medio, no era verdad que era ilegal negarle el cargo.

Cazó una cuarta cuando Guindos aseguró que el exministro no se había reincorporado a la función pública, cuando Rajoy había dicho en China que sí lo había hecho. "El señor Soria es un funcionario y, como tal funcionario, como hacen otros muchos, ha reingresado en la Administración y ha participado en un concurso, como hacen todos los funcionarios", había asegurado el presidente el 5 de septiembre. El titular de Economía, sin embargo, indicó esta tarde que Soria estaba en excedencia voluntaria, y si la designación hubiera prosperado, sí se habría tenido que reincorporar.

Saura le advierte de que no es "digno" para continuar en el cargo e Iglesias le pide que se vaya "ipso facto" si se prueba que mintió. C's también exhibe dureza

Conclusión de Saura: Guindos no ha asumido "ningún error" y ha "avalado" la decisión del Gobierno, así que "no es digno" para continuar en el cargo. Era la primera petición de dimisión de la tarde.

Pedro Saura a Luis de Guindos: "Usted no es digno de ser el ministro de Economía"

No fue el único. Iglesias emplazó a Guindos a que pruebe que no mintió sobre la designación de Soria, porque si se demuestra que es así debe "dimitir ipso facto". El secretario general de Podemos formuló entonces seis preguntas para intentar desnudar al titular de Economía. Cuestionó así la idoneidad del exministro de Industria —"¿De verdad no encontraron a nadie mejor para representarnos en el Banco Mundial?—, preguntó qué es un concurso, si lo hubo o no, y si no lo hubo, ¿"era normal" proponer al dirigente canario? También recordó que el propio Guindos negó en junio que Soria fuera a ser nombrado para el BM.

Toni Roldán, de Ciudadanos, también utilizó la palabra mágica, la "mentira". Nada de paños calientes, y eso que Albert Rivera sigue siendo teórico socio del PP. Porque al Gobierno, aseguró el parlamentario, no le ha importado "mentir" para justificar el nombramiento de Soria, que fue más un "traje a medida" hecho por el Ejecutivo para buscarle una "salida digna" después de su dimisión en abril. Guindos negó que hubiera habido amaños, porque la primera convocatoria salió en enero, meses antes de que Soria anunciara su abandono del Gabinete de Rajoy, y porque en la segunda concurrió Jiménez Latorre, por lo que la plaza, arguyó, no estaba adjudicada de antemano. Claro que Soria pudo registrar su solicitud gracias a la segunda intentona, la de finales de junio.

El portavoz del partido naranja también pidió, a su manera, quizá de forma más oblicua, que rodaran cabezas: "Alguien tiene que asumir la responsabilidad política por el nombramiento de Soria al Banco Mundial. No sé si la vicepresidenta [Soraya Sáenz de Santamaría], usted o el señor Rajoy, pero es tiempo de que empiecen a cambiar las prácticas opacas y los dedazos impunes en este país".

Ciudadanos ve el puesto del Banco Mundial "un traje hecho a medida" para Soria

Los demás portavoces ahondaron en las mismas flaquezas del discurso de Guindos. Ester Capella (ERC) cuestionó los "estándares democráticos" del Ejecutivo del PP y denunció que este caso es "un ejemplo más de la corrupción de la verdad y el blanqueo de la mentira" del PP. Pedro Azpiazu, del PNV, siguió con la tunda calificando de "del todo inapropiado e inadecuado" el nombramiento de Soria, una "mayúscula metedura de pata en términos políticos" de la que el ministro "es responsable", pero quien es su "máximo responsable es Rajoy". Ha sido un "cúmulo de despropósitos", continuó Ferran Bel, del Partit Demòcrata Català. "Tantas mentiras", al fin, dijo Joan Baldoví, de Compromís, que deberían acarrear dimisiones. Tras la cierta distensión de las últimas intervenciones de los portavoces, la temperatura subió con el discurso del diputado popular Eloy Suárez, que acusó al PSOE de estar "preparando" unas terceras elecciones utilizando para ello el "desgaste" del presidente en funciones.

El ministro se aferra a que estas vacantes siempre eran cubiertas por funcionarios, y del mismo modo, aunque admite que el sistema puede mejorarse

El ministro no quiso ir más allá de lo que había afirmado en su discurso inicial. Se escudó en que el puesto de director ejecutivo del BM había sido "ocupado siempre por funcionarios", que el currículo de Soria no tenía tacha, que la designación no era "política", sino "técnica"... Sí admitió que los argumentos de la oposición podían ser "válidos, pero por tres días", los que mediaron entre la comunicación del nombramiento, el 2 de septiembre, y la posterior renuncia, en la tarde del día 6. También asumió que el sistema puede mejorarse y abrirlo más a la concurrencia. Pero no habrá dimisiones. Más aún: presumió de dar siempre la cara y de asumir su "responsabilidad". Para el Ejecutivo, el caso Soria está zanjado. Porque a fin de cuentas, es la "historia que acaba en una no designación".

Guindos: "Es la historia que acaba en una no designación"

La pelota sigue en el tejado de Pastor

La comparecencia de Luis de Guindos este martes en la Comisión de Economía no anula el mandato de la Junta de Portavoces del pasado jueves. Entonces la mayoría del Congreso acordó requerir al ministro de Economía que acudiera al pleno monográfico y urgente sobre el caso Soria. 

Ana Pastor, presidenta de la Cámara, no ha señalado aún la sesión plenaria, pese a la protesta de los grupos. Esa queja pudo oírla Guindos hoy. Él aseguró que tiene el "máximo respeto" por el Parlamento, y recordó que desde que está en el Gabinete ha acudido hasta 17 veces a la Comisión de Economía, por temas de mayor relevancia como el rescate a la banca o la nacionalización de Bankia. "Y nunca me pidieron ir a pleno. A lo mejor para algunos este [el caso Soria] un tema más relevante para el futuro económico de España", afirmó con sarcasmo. Sí fue al hemiciclo el año pasado para dar cuenta del nuevo plan de rescate a Grecia. 

"No se minusvaloren ustedes. Estoy aquí dando explicaciones", ironizó Guindos dirigiéndose a sus señorías. Era su forma de decir que sus argumentos son igualmente refutables en comisión, y ellos, los diputados de la oposición, podían ejercer su labor de control igual que en el hemiciclo. 

Hasta el socialista Pedro Saura le agradeció su disposición a ir a la Cámara. El peneuvista Pedro Azpiazu le congratuló por su "valentía", como Joan Baldoví, de Compromís, le reconoció que estaba comiéndose un "marrón". 

Ahora habrá que ver con el pleno. El Gobierno ya ha adelantado que no irá, pero Pastor está obligada a convocarlo. La duda es cuándo. Pero el PP no piensa moverse: da por buenas las explicaciones de Guindos, aunque se hayan producido en un formato más favorable para el Ejecutivo, en comisión. Quizá porque Ciudadanos había favorecido esa mayor comodidad, este martes quiso presentarse rocoso y duro. El tono de su diputado Toni Roldán lo decía todo. 

La "historia de una no designación". El relato de un nombramiento efímero, de poco más de tres días, pero que soliviantó a la oposición y que forzó una inédita marcha atrás en un periodo de parálisis política. Eso fue a contar Luis de Guindos al Congreso. Que la postulación del exministro José Manuel Soria para el Banco Mundial respondía a una "designación discrecional", pero de carácter "técnico" y no "político", y que él tenía "el perfil más adecuado" de todos los candidatos. Pero sus explicaciones no convencieron. No movieron a los grupos de la oposición, que seguían atizando al Ejecutivo en funciones por la sucesión de "mentiras". Una secuencia de hechos que merecía, para algunos de ellos, la dimisión. Esa cabeza no rodará. Al menos de momento. Lo que sí hay es una asunción del Ejecutivo de que los argumentos de la oposición eran "válidos", pero solo en los tres días en los que duró la colocación de Soria en el BM.

Luis de Guindos José Manuel Soria Banco Mundial Ministerio de Economía Pedro Saura Panama Papers Pedro Sánchez Ciudadanos
El redactor recomienda