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La Guardia Civil localiza a un sospechoso de la desaparición de Yéremi Vargas
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ESTÁ EN PRISIÓN POR agredir a un menor en 2012

La Guardia Civil localiza a un sospechoso de la desaparición de Yéremi Vargas

Se trata de A. O. y está en prisión cumpliendo condena por otros hechos. La Guardia Civil le imputa los delitos de detención ilegal y homicidio del niño

Foto: Manifestación de apoyo a la familia de Yéremi. (Reuters)
Manifestación de apoyo a la familia de Yéremi. (Reuters)

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil está investigando a A. O. -un ciudadano de 56 años con antecedentes por agresión, violencia de género y abusos a un menor-, en el marco de las pesquisas que realiza el instituto armado para esclarecer la desaparición de Yéremi Vargas en 2007, cuando el niño tenía apenas siete años, en la localidad canaria de Vecindario.

[Lea aquí: Desaparición de Yéremi Vargas: nueve años sin respuestas]

Fuentes de la investigación han dejado claro a El Confidencial que por el momento no tienen "ninguna prueba" contra el hombre, aunque sí "indicios suficientes" para investigarle como sospechoso de haber estado implicado en el mencionado caso.

El sospechoso cumple condena en la prisión de Botafuegos de Algeciras desde 2015 por abusar de un menor tres años antes. Además, cuenta con antecedentes que datan de 1988 y 2005 por agresión y violencia de género. Según ha contado esta mañana Antena 3, el investigado vivía en un solar de Santa Lucía de Tirajana (Vecindario), donde tenía una caseta en la que podría haber retenido al niño al que agredió en 2012. La Guardia Civil investiga ahora si el sospechoso pudo utilizar esa misma caseta para esconder a Yéremi Vargas.

Esta no es la primera vez que la identidad de A. O. aparece en el sumario que investiga la desaparición del niño, ya que estuvo bajo la lupa del Juzgado hace meses. En ese momento, sin embargo, los miembros de la UCO no encontraron indicios suficientes para incriminarle, extremo que aún está por ver en este último impulso.

La nueva investigación, según explica EFE, se abrió después de que la Guardia Civil tuviera conocimiento de que el interno había comentado a sus compañeros que podía tener información sobre la desaparición del niño. Los agentes fueron a visitarle, pero el sospechoso se cerró en banda y ni confesó los hechos ni acusó a nadie, motivo por el que los investigadores decidieron poner en tela de juicio sus declaraciones iniciales.

[Lea aquí: Así es A. O., el presunto homicida de Yéremi Vargas]

La familia de Yéremi ya sabía desde hacía tres semanas que una persona estaba siendo investigada, porque así se lo habían trasladado los responsables de la UCO. La madre del niño, de hecho, reconoció al sospechoso en una foto que se mostró en Antena 3 hace varios años. "Fue un choque bastante grande porque siempre he pensado que iba a aparecer bien", dice Ithaisa Suárez. Al parecer, era un conocido de la zona, "porque se paraba en el solar a ver a los niños desde un poste mientras jugaban".

A. O. -vecino del barrio que se trasladó al municipio de Sardina del Sur dos años antes de la desaparición de Yéremi Vargas- es propietario de un Renault 5 blanco, el mismo que buscaba la Guardia Civil por su posible relación con la desaparición del menor hace más de nueve años.

Yéremi Vargas fue visto por última vez el 10 de marzo de 2007. Desde entonces, la UCO no ha cejado en la búsqueda del pequeño y de los responsables de su desaparición. La investigación -que también ha seguido la pista de un Opel Corsa blanco- se centra en este momento en el rastreo de agresores sexuales del entorno.

Las fuentes de la UCO consultadas por El Confidencial han insistido en que es importante ser prudentes en este punto de la investigación, puesto que es necesario comprobar la veracidad de los indicios mencionados. Hace un año, de hecho, la Guardia Civil encontró unos huesos que se intuyó que podían ser del niño; sin embargo, tras los análisis científicos, los investigadores descartaron esa posibilidad.

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil está investigando a A. O. -un ciudadano de 56 años con antecedentes por agresión, violencia de género y abusos a un menor-, en el marco de las pesquisas que realiza el instituto armado para esclarecer la desaparición de Yéremi Vargas en 2007, cuando el niño tenía apenas siete años, en la localidad canaria de Vecindario.

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