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La AN condena a 13 de los acusados por la Operación Java contra mafia georgiana
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La AN condena a 13 de los acusados por la Operación Java contra mafia georgiana

El máximo responsable de la organización criminal, Kakhaber Shushanashvili, ha sido sentenciado a 20 años por blanqueo, conspiración para el asesinato y falsificación de tarjetas, entre otros delitos

Foto: El líder de la mafia ruso-georgiana en España, Kakhaber Shushanasvili. (Efe)
El líder de la mafia ruso-georgiana en España, Kakhaber Shushanasvili. (Efe)

La Audiencia Nacional ha condenado a 13 de los 19 miembros de mafia ruso-georgiana desarticulada en la Operación Java en 2010. La organización, que operaba tanto en España como en Francia, Italia, Suiza, Austria y Alemania, tenía como número dos a Kahaber Shushanashvili, detenido cuando residía en Barcelona y responsable último de la caja del grupo criminal. Las penas oscilan entre 1 y 20 años de prisión y 11 meses que se han impuesto a este úlitmo, para el que Anticorrupción reclamaba 32 años y ocho meses.

La Operación se desarrolló en 2010 por orden del juez Fernando Grande-Marlaska en Barcelona, Valencia, Vizcaya y Guadalajara. En su escrito de acusación, Anticorrupción relataba como Shusahanashsvili, alias 'Kakha', fue nombrado 'ladrón de ley', aunque por debajo en jerarquía de su hermano. El Ministerio Público pedía para él una pena de cárcel de 32 años y ocho meses, con una multa que superaba los dos millones de euros. En diciembre de 2011, 'Kakha' rechazó ser extraditado a su país para ser juzgado por los delitos de asociación ilícita y extorsión, al considerar que la república exsoviética es "el paraíso de la persecución".

El escrito de los fiscales José Grinda y Fernando Bermejo se remitía a la sentencia del Tribunal de Apelación Criminal de Salónica de julio de 2013 donde se detalla cómo esta organización extorsionaba a compatriotas con el pago obligatorio de determinadas cuantías como condición para que continuaran con sus negocios, contando para ello "con la ayuda de otros miembros del hampa", tal y como informó en el pasado marzo EP.

En la sentencia se relata cómo en el año 2008 en la zona de Cataluña y Levante se asentó esta organización criminal surgida en la antigua Unión Soviética y formada en su mayoría por ciudadanos georgianos, cuyo líder era Kakhaber, vinculado a su hermano Lasha, quien dirigia el grupo desde Grecia.

Como “ladrón en ley”, Shushanashvili se ocupaba de los fondos de la organización, de la caja común (obschack), que se nutría del dinero que los miembros de la organización recababan y le hacían llegar en su mayor parte de sustracciones en domicilios, generalmente llevadas a cabo en el extranjero.

Entre las actividades desarrolladas por la organización para poder aflorar los fondos, según la sentencia, en 2009 Shushanashvili constituyó una sociedad para explotar distintos negocios de limpieza y lavado de vehículos, así como una sociedad de paquetería, todo ello con la ayuda del español Juan Miquela Tomillero, informan fuentes de la Audiencia Nacional.

Los jueces relatan también cómo Kakhaber Shushanashvili y su hermano Lasha tomaron la decisión de matar a un miembro de una facción rival afincado en Niza y al que consideraban un traidor, para lo cual dos sicarios viajaron de Grecia a Barcelona, desde donde se desplazaron a la localidad francesa, si bien la acción no se pudo llevar a cabo al ser detenidos por la Policía francesa en el hotel donde se iban a alojar.

El desglose de la condena de Shushanashvili es el siguiente: 8 años por blanqueo de capitales, 7 por conspiración para el asesinato, 1 año y ocho meses por tenencia ilícita de armas, otros 4 años por falsificación de tarjetas de crédito y tres meses más por tentativa de estafa. Además de 'Kakha' entre los condenados están Zviad Darsadze, Giorgi Nadiradze, Archil Giorgobiani, Juan Miquela Tomillero, Katerina Myerkova, Argam Mirzoyan, Mamuka Gogolashvili, Koba Akhvlediani, Irma Jgeria, Jimshery Chanturidze, Levani Kojhtashvili y Maguli Sharuvanashvili.

La Audiencia Nacional ha condenado a 13 de los 19 miembros de mafia ruso-georgiana desarticulada en la Operación Java en 2010. La organización, que operaba tanto en España como en Francia, Italia, Suiza, Austria y Alemania, tenía como número dos a Kahaber Shushanashvili, detenido cuando residía en Barcelona y responsable último de la caja del grupo criminal. Las penas oscilan entre 1 y 20 años de prisión y 11 meses que se han impuesto a este úlitmo, para el que Anticorrupción reclamaba 32 años y ocho meses.

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