Pujol Ferrusola guardaba en un documento Excel a qué hermanos repartía el dinero

El hijo mayor del matrimonio conformado por Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola, Jordi Pujol Ferrusola, ha dicho esta mañana que él era el encargado de gestionar la herencia de su abuelo Florenci, que la repartía entre todos sus hermanos del modo que él iba considerando. Él decidía las inversiones y dividía las rentas que iba obteniendo de las mismas. Todas las entradas y salidas, ha indicado, quedaban reflejadas en un documento Excel que está en posesión de la Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional.

Jordi Jr, que ha comparecido a petición propia, ha recordado que su abuelo tenía "gran confianza" en él y ha rechazado que su padre tomara partido en la gestión del legado, en línea con lo que declaró el propio Pujol Soley ayer, que se desvinculó de cualquier negocio emprendido por su hijo. El 'expresident', ha aclarado, siempre ha estado "al margen".

El declarante ha insistido en la versión dada ayer por su padre sobre la cuenta abierta por Jordi Jr en 2000 que tenía 1,8 millones de euros. Según Pujol Ferrusola, su padre suscribió un manuscrito en el que se atribuía la titularidad del depósito con el fin de evitar que la pareja de Jordi Jr, Mercé Gironés, se lo reclamara. Ha argumentado que llevaron a cabo esta maniobra porque el dinero era de la herencia familiar y su exmujer podía tratar de arrebatárselo a su entender de forma injusta.

La tesis de Pujol padre e hijo ha sido respaldada por un documento que ha mencionado por primera vez Pujol Ferrusola, otro manuscrito que escribió el declarante con el fin de indicar a su gestora, Pallerola, que le enseñara el primer texto a Gironés para que sepa que el dinero no era suyo, sino de su padre. El novedoso documento, según fuentes jurídicas, lo pilló la Policía en casa de Pujol Jr durante uno de los registros realizados.

El hijo mayor de los Pujol ha respondido durante tres horas y media a las preguntas que fundamentalmente le ha realizado el juez, que ha acaparado la mayor parte del interrogatorio. El fiscal anticorrupción, Fernando Bermejo, de hecho, tan solo ha planteado una cuestión. A preguntas de su defensa, Jordi Jr ha negado taxativamente haber recibido comisión ilegal alguna en las diferentes operaciones de inversión realizadas.

Tras la declaración, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha pedido al juez José de la Mata, que retire el pasaporte a Jordi Pujol Ferrusola y que le prohiba abandonar territorio español. El magistrado decidirá en las próximas horas o incluso mañana si cursa la solicitud del Ministerio Público, a la que se ha opuesto el abogado del Jordi Jr, Cristóbal Martell.

La declaración de Pujol Ferrusola tiene lugar un día después de que pasaran por la Audiencia Nacional también en calidad de investigados sus padres, Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola. El primero estuvo declarando durante casi cuatro horas mientras su mujer se negó a hablar en línea con lo que hizo en su comparecencia ante el Juzgado 31 de Barcelona en enero de 2015.

El 'expresident' se desvinculó de los negocios de su primogénito, negó conocer sus movimientos bancarios y rechazó rotundamente que su familia fuera una organización criminal con papeles distribuidos, como indicó el juez José de la Mata en el auto que ordenó la imputación del matrimonio. Pujol Soley admitió también haber fingido en 2001 ser el propietario de la cuenta que su hijo mayor abrió en Banc Reig en el año 2000 para evitar que su pareja, Marcé Gironés, le reclamara el dinero que tenía en el depósito, que ascendía a 1,8 millones de euros.

El expresidente catalán aseguró que no está "orgulloso" de esa maniobra, pero señaló que la hizó únicamente para ayudar a su primogénito. Otro documento firmado por Pujol Ferrusola y que obra en la causa, sin embargo, indica el mismo día que abrió la cuenta que el verdadero dueño de la misma era su padre, extremo que contradiría la versión defendida por el 'patriarca' de la familia.

En el marco de la misma investigación que instruye De la Mata, también declararon el pasado martes dos empresarios de la construcción -Manuel José Nadal Pellejero y Sebastián Vives Sancha-, que fueron interrogados como testigos en relación con dos promociones, una de apartamentos de lujo y otra de viviendas, en las que el primogénitos de la familia Pujol Ferrusola habría intermediado y por las que cobró al menos 400.000 euros en comisiones.

En ambas operaciones -la compra de los terrenos y la construcción de los apartamentos situados en el puerto deportivo de Ibiza y de un edificio de pisos en L'Hospitalet- el primogénito aportó inversores e incluso participó en la gestión, según contaron los empresarios interrogados, que añadieron que todo el proceso se hizo de forma absolutamente legal, con un contrato privado y con unas comisiones convenidas y supuestamente declaradas.

Este último extremo, sin embargo, lo puso en duda el juez De la Mata, quien en un auto previo aseguró que "en ningún caso se ha aportado el más leve indicio que justifique la preparación, realización o seguimiento de ningún trabajo de asesoramiento, intermediación o consultoría para los que se simuló la contratación de Pujol Ferrusola".

También el martes declararon dos directivos de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) en relación con las operaciones que presuntamente ha llevado a cabo la empresa con el mayor de los Pujol. Uno de los ejecutivos, sin embargo, dejó su comparecencia a medias después de sufrir un desmayo y requerir de asistencia médica. El instructor le citó para continuar su testimonio hoy y así ha sido. José Ramón Ruiz Carrero ha declarado ante De la Mata durante 45 minutos y se ha marchado sin hablar con los medios de comunicación.

El Juzgado Central número 5 mantiene imputados en la causa a Pujol Soley, su mujer Marta Ferrusola y cinco de los siete hijos del matrimonio -Josep, Pere, Marta, Jordi y Mireia Pujol Ferrusola-, junto a varios empresarios. Se les imputa principalmente un delito de blanqueo de capitales.