El sospechoso, un hombre huraño que ya había "molestado" a otras mujeres

La Policía ha hallado el ADN de la peregrina estadounidense Denise Pikka Thiem en herramientas propiedad de Miguel Ángel M.B., el hombre de 39 años detenido el viernes en un bar de Grandas de Salime (Asturias) y que es el principal sospechoso de su muerte. Fuentes de la investigación han informado que este hallazgo puede ser una prueba determinante a la hora precisar la causa del fallecimiento de esta mujer, una vez que se conozcan los resultados de la autopsia que se está realizando en el Instituto Anatómico Forense de Ponferrada (León).

Los antecedentes penales que tiene Miguel Ángel M.B., de 39 años, le convirtieron en uno de los principales sospechosos desde la desaparición de la mujer, ocurrida el pasado 5 de abril mientras hacía el Camino de Santiago. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, se desplazó en la mañana del sábado a la localidad leonesa de Astorga para reunirse con mandos policiales y seguir de cerca la investigación del suceso que acabó con la vida de la peregrina, cuyo cadáver fue hallado en avanzado estado de descomposición la noche del viernes tras la detención horas antes del principal sospechoso.

El detenido condujo a los agentes al lugar en el que se hallaba el cadáver, en una finca de su propiedad situada entre las localidades leonesas de Santa Catalina de Somoza y San Martín de Agostedo. En declaraciones a los periodistas, Fernández Díaz ha señalado que la investigación "sigue abierta" y que "todos los indicios" apuntan a que el cadáver hallado es el de la mujer estadounidense. No obstante, ha precisado que habrá que esperar a los resultados de la autopsia, que se le practicará en el Instituto Anatómico Forense de Ponferrada, donde ya ha sido trasladado el cadáver, y a cotejar los restos con el ADN de sus familiares.

El ministro ha evitado hacer declaraciones sobre el móvil y las causas del fallecimiento "por el buen fin de las investigaciones", aunque ha recalcado que se ha tratado de una operación "compleja y dificultosa" en la que se ha comunicado "con más de doscientas personas de más de veinte nacionalidades" que habían estado en contacto con Denise en los días previos a su desaparición. El detenido "tenía algunos antecedentes y a la espera de su declaración a la Policía no debo ser más explícito", precisó.

"Estábamos siguiendo muy intensamente esta investigación desde Madrid y en julio afirmé en León que no solo no estaba cerrada, sino que estaba muy activa, y ahora les puedo decir que esa línea de investigación a la que hacia referencia era la que ha conducido a esta detención", dijo Fernández Díaz. Según el ministro, este sospechoso estaba siendo seguido por la Policía y "si se le detuvo en Asturias fue porque los dispositivos estaban ampliamente desplegados y la colaboración funcionó". Por último, anunció que el próximo lunes llegarán a España las muestras de ADN de familiares de la peregrina para la identificación definitiva del cadáver.

Fuentes de la investigación consultadas por Efe han confirmado que el hecho de que el detenido cambiara en un banco de la zona una cantidad ligeramente superior a los mil dólares, puso a los investigadores sobre su pista, ya que era público que carecía de recursos estables y que incluso solía recurrir a los servicios sociales municipales para subsistir. Desde entonces, el sospechoso estaba bajo vigilancia a la espera de que diera un paso en falso que pudiera propiciar el hallazgo del cadáver.

El hombre habitaba en una vivienda de madera prefabricada bastante alejada en la finca de su propiedad en la que supuestamente escondió el cadáver y apenas mantenía relación con sus vecinos, que le califican como un hombre huraño y de difícil trato. Además, la Policía tenía conocimiento de que había "molestado" a mujeres que hacían el Camino de Santiago a su paso por la zona.

El ministro ha explicado que el FBI "ha estado informado en todo momento de las investigaciones que ha llevado a cabo brillantemente la Policía Nacional" para esclarecer el caso. Ha anunciado que propondrá las condecoraciones a los integrantes de la Policía Nacional y de otras unidades que han colaborado en este "brillante" operativo.

Intervención policial

Los investigadores, apoyados por la Unidad Militar de Emergencias, habían reactivado la búsqueda de la peregrina mediante un numeroso despliegue de efectivos que comenzó a rastrear zonas ligeramente más alejadas del epicentro donde se vio por última vez a la estadounidense.

Policías y militares buscaron en decenas de pozos cualquier rastro de la desaparecida porque ahora era un buen momento para hacerlo, ya que cuando se le perdió la pista a la chica la zona estaba demasiado embarrada por las lluvias. La extensa área de rastreo incluye más de un centenar de pozos y mucha flora, motivo por el que la Policía ha requerido la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias, más acostumbrada a trabajar en este tipo de zonas difíciles.

Rajoy responde a McCain

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha enviado una carta al senador de Estados Unidos John McCain en relación con la operación policial para hallar a la peregrina estadounidense Denise Pikka Thiem, en la que explica la detención del principal sospechoso y la localización del cuerpo.

En su respuesta, Rajoy ha querido transmitirle "el pesar de todos los españoles por este trágico desenlace y asegurarle que, tanto las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como la Fiscalía y los órganos judiciales trabajarán incansablemente hasta esclarecer todos los detalles de este horrible crimen y no descansarán hasta que se haga justicia". Ésta es la segunda misiva que el presidente español ha hecho llegar al senador republicano. En la anterior, se le explicaba que "había varias líneas de investigación y se confiaba en la resolución del caso".

Estas cartas son respuesta a una primera que este verano John McCain remitió a Rajoy para ofrecerle la colaboración del FBI en la búsqueda de la ciudadana americana, misiva a la que el jefe del Ejecutivo español respondió que esperaba que no fuera necesaria y que se resolvería pronto. Posteriormente, el director de la Policía, Ignacio Cosidó, explicó que se trataba de un asunto prioritario para su corporación.