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Montoro defiende los presupuestos en solitario con toda la oposición en contra
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CARA A CARA EN LA CÁMARA ALTA

Montoro defiende los presupuestos en solitario con toda la oposición en contra

El ministro de Hacienda comparece hoy en el Congreso para defender los presupuestos de 2016 después de que la inmensa mayoría de los partidos haya dicho 'no' al proyecto de ley

Foto: El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el presidente de la Cámara Baja, Jesús Posada, en la presentación de los Presupuestos Generales del Estado 2016. (EFE)
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el presidente de la Cámara Baja, Jesús Posada, en la presentación de los Presupuestos Generales del Estado 2016. (EFE)

Las proyecciones macroeconómicas son irreales, se mantienen las medidas de austeridad pese a la tan cacareada recuperación y se pone el pago de la deuda por encima de otros gastos sociales más necesarios. Son los argumentos que los partidos de la oposición han utilizado para rechazar de plano los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2016.

Todos han dicho 'no' al proyecto de ley -salvo Unión del Pueblo Navarro (UPN), socio electoral del PP-, y han registrado hasta trece enmiendas a la totalidad que serán debatidas hoy a partir de las doce en un Pleno extraordinario del Congreso. Allí está prevista la comparecencia del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que sacará el escudo en defensa de los presupuestos. No será Mariano Rajoy quien lo haga, tal y como había pedido el PSOE ante lo “excepcional” de tramitar las cuentas enverano.

A las citadas críticas de la oposición se suma la asfixia financiera a las comunidades autónomas, que además son las que soportan la mayor parte del gasto social. Tampoco han faltado los reproches al Gobierno por su decisión de tramitar las cuentas en pleno mes de agosto.

Con prisa y sin pausa

Algunos partidos califican las prisas del Gobierno como “electoralismo” o incluso perciben falta de legitimidad democrática a la hora de sacar adelante los presupuestos. Pero el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha pisado el acelerador porque quiere dejar los deberes hechos; incluso llamó vagosa los que, a su juicio, tienen pocas ganas de trabajar en agosto.

El vicesecretario de Comunicación del PP ha considerado hoy que Rajoy demuestra “responsabilidad” por agilizar el proceso de tramitación. Según Pablo Casado, esta decisión contrasta con la actitud del anterior presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien acusa de “irse corriendo y adelantar las elecciones para no afrontar un rescate seguro”. La intención del Ejecutivo es dejar aprobadas las cuentas antes de la disolución de las Cortes por la convocatoria de elecciones generales.

La fecha que baraja como la más probable para convocarlas es el 13 de diciembre. El Gobierno intentará por tanto exprimir al máximo la legislatura, una estrategia que le servirá para consolidar la percepción de la mejoría económica entre los votantes y tener más margen ante los resultados de las elecciones autonómicas en Cataluña (27-S).

Contar con más tiempo también permitirá al PP afianzar su ligero ascenso en intención de voto ante el frenazo de Podemos y Ciudadanos en las encuestas

Los vetos contra los presupuestos tendrán hoy su espacio en el Congreso a partir de las doce del mediodíaen un debate que se retomará mañana. Una vez rechazadas las enmiendas a la totalidad gracias a la mayoría absoluta del PP, los grupos parlamentarios podrán presentar enmiendas al articulado hasta las 14:00 horas del próximo viernes.

Unas cuentas “insolidarias”, según Pedro Sánchez

El líder de los socialistas será el primero en intervenir cuando se reanude la sesión, a las cuatro de la tarde. Pedro Sánchez rechaza unos presupuestos “malos para España” por estar basados en la austeridad y los recortes. “No apoyan la recuperación” y son “insolidarios” con los más desfavorecidos, ha dicho.

La segunda semana de septiembre será el momento en el que los ministros intervengan en el pleno del Congreso para defender su parte de las cuentas. Cuando la Cámara Baja haya votado todas las enmiendas, el texto será remitido al Senado para volver más tarde al Congreso, donde recibirá el visto bueno definitivo. El objetivo es que el texto final quede aprobado antes de que se disuelvan las Cortes, y esto debe ocurrir 54 días antes de las elecciones.

Los presupuestos, al detalle

El 53% de los presupuestos se destinará al gasto social. De cada 100 euros, 39 irán a parar a las pensiones, siete a desempleo y políticas activas, ocho a otros gastos y diez a pagar intereses de la deuda. El techo de gastono financiero está fijado en 123.394 millones de euros, un 4,4% menos respecto a 2015. Contempla además un objetivo de déficit para el Estado de 25.134 millones (2,2% del PIB)

Suben las pensiones (un 0,25% según el índice de revalorización) y el sueldo de los funcionarios(un 1%). Este colectivo recuperará además un 25% de la paga extra y el 50% restante el año próximo. Las bases de cotización a la Seguridad Social -tanto máximas como mínimas- aumentan un 1%, un incremento equivalente al de la base de los autónomos. Puedes ver el desglose de cada partida aquí.

Rajoy quiere así cerrar “una etapa dificilísima” y abrir un nuevo período de crecimiento sostenido y creación de empleo. Incluso habla de “círculo virtuoso” y saca pecho al considerar que “en España hemos conseguido sortear la crisis manteniendo los pilares del bienestar”.

Las proyecciones macroeconómicas son irreales, se mantienen las medidas de austeridad pese a la tan cacareada recuperación y se pone el pago de la deuda por encima de otros gastos sociales más necesarios. Son los argumentos que los partidos de la oposición han utilizado para rechazar de plano los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2016.

Presupuestos Generales del Estado Cristóbal Montoro
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