¿Un cigarrillo en pleno vuelo internacional? 30 personas han sido pilladas en el intento

“¿Cómo voy a aguantar un viaje sin fumar?” Para muchos esta fue la principal preocupación tras la entrada en vigor de la ley antitabaco en 2006. Y unos pocos no pudieron resistirse a rememorar los viejos tiempos en los que un vuelo internacional se hacía más corto entre calada y calada. Treinta personas han sido pilladas in fraganti hasta la fecha mientras fumaban en un avión a miles de pies de altura, de acuerdo a una respuesta de la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación a una pregunta remitida por El Confidencial a través del Portal de Transparencia.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a través de este organismo, es el encargado de velar por el cumplimiento de la ley antitabaco “en el ámbito del transporte aéreo, marítimo o terrestre, cuando éstos se desarrollen en el marco suprautonómico o internacional”. En el resto de los casos contemplados por la normativa, incluidos vuelos nacionales o cuando la denuncia se presenta ante la Comandancia de la Guardia Civil del aeropuerto, son las comunidades autónomas las responsables de inspeccionar y, en su defecto, sancionar a las personas que no cumplen las prohibiciones de fumar.

Las treinta penalizaciones se registraron entre 2009 y 2013, siendo 2012 el año en el que Sanidad puso más sanciones de este tipo en vuelos internacionales, con diez. Catalogada como infracción leve, cada persona pillada con las manos en la masa tuvo que abonar 30 euros de multa, que “han revertido en el Tesoro Público y no se han destinado a ningún proyecto o programa sanitario de prevención del tabaquismo”. Sanidad matiza que “las conductas infractoras se realizaron de forma aislada”.

Además de estas treinta sanciones, la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación ha puesto otras siete por fumar dentro del aeropuerto de El Prat-Barcelona. Cinco de estas infracciones tuvieron lugar en 2011, mientras que las otras dos se registraron en 2009 y 2013. Al igual que los fumadores en pleno vuelo internacional, estos infractores tuvieron que pagar los correspondientes 30 euros de multa.