Rosa Díez se someterá a una cuestión de confianza y designa sucesor: Andrés Herzog

Rosa Díez someterá su gestión a debate este sábado. Acosada por una rebelión interna que reclama su dimisión por el fracaso en Andalucía, la portavoz de UPyD en el Congreso de los Diputados medirá sus fuerzas ante el Consejo Político extraordinario convocado para el día 28. Los más de cien miembros que conforman este órgano directivo tendrán que votar a favor o en contra de la continuidad de la líder de la formación. Si una mayoría amplia apuesta por un cambio radical en la estrategia del partido que incluiría un pacto con Ciudadanos, la política vasca abandonará la dirección.

Si, por el contrario, Díez sale respaldada por una mayoría del Consejo, ganaría el pulso al sector crítico que la ha acorralado y que precisamente encabeza tres de cuatro de los diputados que la acompañan en la Cámara Baja: Álvaro Anchuelo, Irene Lozano y Toni Cantó. Rosa Díez pondrá encima de la mesa su propuesta estratégica política de cara a las próximas elecciones, que se basará en no pactar con Ciudadanos y seguir siendo ella la líder. Si esta opción es la que triunfa, la convivencia del Grupo Parlamentario en el Congreso de los Diputados se antoja bastante complicada por la pérdida absoluta de confianza de los diputados, que esta semana se han enzarzado en un duro cruce de acusaciones públicamente.

Antes de que se celebre la reunión, la líder ha dado este miércoles un golpe de timón a su gestión creando un nuevo cargo, el de portavoz adjunto de UPyD, que en la práctica supone ser el ‘número dos’ de la formación. Rosa Díez posiciona así a un hombre de su máxima confianza, Andrés Herzog, responsable de Regeneración Democrática, como el favorito para sucederla si finalmente el Consejo le retira la confianza a ella. Con este movimiento de la todavía líder de la formación magenta, Irene Lozano se quedará sin recibir la bendición de aquellapara quedarse con el timón del partido, aunque podría encabezar otra lista y disputársela a Herzog en unas primarias.

Miembros del Consejo consultados por El Confidencial vaticinan que más de uno del sector crítico abandonaráel partido el mismo sábado, dependiendo del resultado de la votación. El primero que podría bajarse del barco es el diputado Toni Cantó, que quiere volver a su tierra, la Comunidad Valenciana, y algunos ya lo ven en las listas del partido de Albert Rivera. “Podría ser un perfecto número dos de Carolina Punset, la candidata de Ciudadanos en la región, o encabezar la lista en Castellón o Alicante”.

Errores cometidos

Los tiempos electorales apremian más para unos que para otros. Los diputados nacionales tienen más tiempo para pensar en una estrategia política de cara a las generales y tomar una decisión más reposada con los resultados electorales del 24 de mayo en la mano. Los propios militantes y simpatizantes cercanos a Rosa Díez reconocen en privado los errores que se han cometido y que deberían enmendarse. Hay que profesionalizar el partido, “ya no somos unos amateurs” y echan en falta nuevas figuras políticas que eviten personalizar el partido en una única persona, como le sucede a Ciudadanos con Rivera y a UPyD con Díez. “En este caso, Podemos lo ha hecho muy bien. Han tenido un problema con Juan Carlos Monedero, lo han apartado, y ahí quedan Íñigo Errejón, Pablo Iglesias...”.

Otro de los asuntos pendientes era preparar la sucesión del partido para cuando Rosa Díez no esté. Ese agujero ha sido, precisamente, el que ha provocado que se desencadenara la crisis más aguda del partido desde que se fundó en 2007. “Con los malos resultados electorales en la mano, los que aspiran a quedarse con el partido revolucionaron las redes sociales para forzar la marcha de Rosa. Si ella hubiera nombrado a un sucesor antes de la hecatombe, nos hubiéramos ahorrado esta batalla”, reconoce un destacado líder de la formación.

El Consejo Político del sábado ya estaba preparado para debatir los programas electorales, pero tras la crisis abierta desde el domingo la dirección ha querido dejar claro que no va a cambiar ni un ápice los principios democráticos que inspiró la fundación. Al menos con Rosa Díaz a la cabeza, no habrá un pacto con Ciudadanos.