El fiscal recurre el archivo de la fuga de Aguirre: “Golpeó y tiró la motocicleta”

La Fiscalía ha recurrido el archivo acordado por el juez Carlos Valle por la fuga de la presidenta del PP madrileño y posible candidata a la Alcaldía de Madrid, Esperanza Aguirre. Considera que hay indicios suficientes que demuestran que la dirigente popular desobedeció las órdenes de los agentes de Movilidad primero y de la Policía Municipal después, y se marchó mientras estaba siendo multada. Aun así, sigue manteniendo que esa desobediencia es leve y debe ser juzgada como una falta y no como un delito.

En su recurso, al que ha tenido acceso El Confidencial, la fiscal del caso hace un duro alegato contra el auto del instructor, quien entendió que Aguirre no debe responder de los hechos ocurridos en abril del pasado año. Una de las causas por las que acordó el sobreseimiento del asunto es porque Valle consideró que había habido contradicciones tanto entre los agentes de Movilidad y la propia Aguirre como entre los primeros con los policías municipales que presenciaron los hechos.

Para el Ministerio Público, el juez no ha tenido en cuenta que “no se puede dar el mismo valor probatorio a las declaraciones de los denunciantes y denunciados por los específicos derechos que asisten a unos y a otros”. Lo cierto, añade, “es que la cuestión nuclear se centra en que la denunciada fue requerida para que presentara la documentación del vehículo que no se encontraba en la carpeta que les entregó en primer lugar, a lo que la misma manifestó que se iba, reiterándole los agentes que no se fuera, frente a lo cual subió a su vehículo e inició la marcha, desatendiendo así la orden de los actuantes”.

Para el fiscal, con las pruebas practicadas en la instrucción, hay indicios de que Aguirre, tras maniobrar para abandonar el lugar, “golpeó y tiró la motocicleta” del agente de Movilidad y continuó su trayectoria sin detener el vehículo hasta llegar a su domicilio.

Los policías confirmaron su fuga

“Existe una completa coincidencia en el aspecto nuclear” de los hechos denunciados, según la versión de los agentes de Movilidad que multaron a Aguirre por aparcar en un carril bus de la céntrica calle Gran Vía, corroborada por los policías municipales que vieron lo sucedido y persiguieron a la expresidenta de la Comunidad de Madrid hasta su domicilio y le ordenaron que parase el vehículo, a lo que ella hizo caso omiso.

“Es claro que, una vez iniciada la intervención por los agentes de Movilidad por una infracción de tráfico que ella misma reconoce haber cometido, el conductor no es libre para decidir voluntariamente en qué momento puede marcharse”, afirma la Fiscalía en su recurso. Y añade: “En el presente caso de lo actuado resulta no sólo que la denunciada no fue autorizada a abandonar el lugar donde se realizó la intervención, sino que los agentes de Movilidad le requirieron que permaneciese en ese lugar”.

A su juicio, y en contra del criterio del juez, no hay ninguna variación del hecho constitutivo de desobediencia, que es haber abandonado el lugar sin autorización de los agentes de Movilidad, “máxime cuando se trata de policías municipales, que vieron lo sucedido y son testigos imparciales del suceso”.

El juez no atendió a la Audiencia Provincial

Por otro lado, la Fiscalía considera que el juez no atendió a lo fijado por la Audiencia Provincial de Madrid. El tribunal ordenó a Valle que investigara los hechos como delito de desobediencia y no como una falta, como él pretendía. Sin embargo, en su auto de archivo, el magistrado alegaba que daba carpetazo al caso porque la Audiencia no le dejaba continuar el proceso como falta, extremo, para el Ministerio Público, erróneo. “El auto de la Audiencia Provincial de Madrid se limita a recoger que los hechos, tal y como han sido denunciados, podrían ser constitutivos de un delito de desobediencia, pero en ningún caso excluye que una vez realizada la investigación de estos hechos, complementándose la denuncia inicial de los agentes con las diligencias pertinentes, pueda apreciarse por el instructor que los mismos podrían ser constitutivos de falta”.

Para la Audiencia, había indicios de que Aguirre cometió actuaciones recogidas como desobediencia; sin embargo, el hecho de que sea una falta o un delito debe fijarse por la gravedad de lo sucedido, pero en ningún caso cerraba la opción a sentar a la dirigente 'popular' en el banquillo, como hizo el instructor.

La Audiencia Provincial debe resolver ahora los recursos planteados tanto por la Fiscalía como por la acusación particular, representada por el agente al que tiró la moto mientras le notificaba la multa. El Ministerio Público se ha opuesto al recurso de este último, que pide que se juzgue a Aguirre por un delito de desobediencia, porque entiende que el agente no está legitimado para presentarse como acusación en el caso.