El 'pequeño Nicolás' empieza a saldar sus deudas con los empresarios a los que engañó

El ‘pequeño Nicolás’ ha devuelto los 15.000 euros que supuestamente le prestó Javier Martínez de Lahidalga. El juez instructor del caso, Arturo Zamarriego, citó al empresario como testigo en diciembre para que explicase si había sido estafado por el adolescente más mediático de España. El experimentado financiero declaró en sede judicial que no se sentía engañado por el joven, ya que le había devuelto 10.000 euros y confiaba en que a corto plazo le diese los otros 15.000 euros que le adelantó como depósito ante la supuesta intermediación que el chaval iba a hacer en la venta de una finca de su propiedad. La deuda, al parecer, ya está saldada. El abogado de Martínez de Lahidalga ha presentado este viernes un escrito ante el magistrado informándole de que el presunto estafador ya ha devuelto el dinero prestado a su cliente y que, por lo tanto, no va a denunciarlo por estafa.

Esta no es la única deuda que ha saldado el ‘pequeño Nicolás’ desde que fue detenido por Asuntos Internos el 14 de octubre. Como adelantó este diario el pasado 21 de octubre, sólo unos días después de que estallara el caso, el chico habría conseguido que dos empresarios de Madrid le prestaran 65.000 euros con la promesa de que se los devolvería días después tras utilizarlos para supuestos negocios. En concreto, el joven impostor convenció a una empresa del extrarradio de Madrid para que invirtiera 10.000 euros en el patrocinio de un desayuno informativo y le dejara otros 1.000 para la compra de entradas para la final de la Champions League que jugaron Real Madrid y Atlético de Madrid. El ‘pequeño Nicolás’ contó a los empresarios que iba a invitar al palco a un importante cliente de su empresa y que les devolvería el dinero.

Los otros 54.000 euros se los pidió a un empresario de la capital que, además de gestionar sus negocios, es conocido por prestar fondos a jugadores de casinos a cambio de un elevado tipo de interés. Al igual que en el otro caso, el ‘pequeño Nicolás’ garantizó al prestamista que saldaría su deuda en cuestión de días y le prometió que colocaría a sus dos hijos en la empresa pública Adif como directivos.

El joven, una vez más, no cumplió su palabra. Ni devolvió los fondos a los empresarios ni encontró un puesto de trabajo para los hijos del prestamista. Se había gastado el dinero en mantener su elevado tren de vida, la coartada con la que trataba de proyectar que pertenecía a una familia acaudalada y tenía contactos en la élite económica y política de España.

La estrategia del ‘pequeño Nicolás’ se hundió cuando fue detenido por la Policía Nacional. El juez que instruye el procedimiento le mantiene imputado desde entonces por falsedad documental, usurpación de funciones públicas y estafa, tres delitos por los que podría tener que pasar más de una década entre rejas. Ante esta delicada situación, el joven está haciendo en los últimos días todo lo posible para tratar de mejorar su futuro procesal. Su plan pasa por saldar todas las deudas que había contraído antes de su detención, y evitar así que alguno de los empresarios perjudicados por sus presuntas estafas presente una denuncia contra él que mantenga con vida la acusación.

Según ha podido saber El Confidencial, el estudiante de CUNEF se puso en contacto hace unos días con el empresario del extrarradio de Madrid para garantizarle que le devolvería los 1.000 euros que le dejó hace siete meses. Su víctima había tratado de recuperar el dinero durante todo este tiempo llamando y mandando mensajes al joven, pero este había evitado cualquier contacto.

Otra causa abierta

Su imputación, sin embargo, ha provocado un giro forzoso en su actitud. Ahora, el ‘pequeño Nicolás’ se ve obligado a cumplir su palabra. Unos días después de hablar por teléfono con el perjudicado, Francisco Nicolás le realizó una transferencia bancaria por un importe de 1.000 euros, la cantidad exacta que había conseguido mediante el engaño de las entradas para la final de la Champions. Al menos esa parte de la deuda ha quedado cancelada. A cambio, el ‘pequeño Nicolás’ pidió al empresario que no le denuncie por estafa.

El joven espera que, de este modo, el instructor del caso le retire al menos la imputación por ese delito, uno de los que, según investigadores de Asuntos Internos, ha quedado más acreditado. Ese es también el motivo por el que el ‘pequeño Nicolás’ ha devuelto a Martínez de Lahidalga en los últimos días los 15.000 euros que sacó a este otro empresario por su supuesta intermediación en una operación inmobiliaria. Los otros 10.000 se los entregó en un sobre el mismo día, cuando la mujer del empresario quería dejarle ver que estaba siendo víctima de una estafa.

El otro gran as que tiene en su manga es la nulidad de todo el procedimiento. El pasado lunes, la defensa de Francisco Nicolás solicitó la suspensión de todo el proceso abierto contra el muchacho por estar basado en una intervención de su móvil que sus letrados consideran ilegal. Por esto consideran nulo todo el proceso, incluida su detención el 14 de octubre, cuando fue arrestado por haberse hecho pasar por asesor del Gobierno y presuntamente estafar a al menos un empresario.

El ‘pequeño Nicolás’ tiene abierta otra causa que instruye el juzgado número 43 de Madrid tras la querella por injurias que presentó el pasado 3 de diciembre la Abogacía del Estado, a instancias del CNI y tras sus declaraciones en varios medios de comunicación, en los que aseguró haber trabajado para los servicios de inteligencia españoles.