Rajoy busca a otra tecnócrata para hacerse con las riendas del Ministerio de Sanidad

Rajoy ha vuelto a ceñirse al guion y, de momento, ha delegado las riendas del Ministerio de Sanidad en manos de la vicepresidenta del Gobierno, que, al igual que ya hizo tras la marcha de Alberto Ruiz-Gallardón, ha asumido las competencias de Sanidad en este breve ínterin y a la espera de que se conozca al nombre de la nueva ministra de Sanidad. Podría ser otra mujer y si Rajoy vuelve por sus fueros y apuesta por otro perfil técnico, como hizo con García Tejerina o con Rafael Catalá, podría optar por una gallega: Pilar Farjas.

Noche de incertidumbre en los despachos del Ministerio de Sanidad. El presidente del Gobierno, que este jueves se enfrenta a un debate monográfico sobre corrupción en el Congreso, ha postergado, de momento, el anuncio del sustituto de Mato. El gesto ha puesto a funcionar las quinielas de sucesores y ha colocado en el disparadero a quien en el sector se considera como la ministra en la sombra durante todos estos años.

Pilar Farjas, secretaria general de Sanidad y Consumo con Mato, es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza y licenciada en Sociología por la UNED. Del PP gallego, aunque nacida en Teruel, con Ana Pastor como ministra de Sanidad, fue nombrada, en 2002 directora ejecutiva de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria. Años después, en 2009, daría el salto a la política con mayúsculas con el primer gobierno de Alberto Núñez Feijóo, que la nombró consejera de Sanidad. Con la victoria electoral de Rajoy, fue llamada para acompañar con un perfil más técnico la labor de Mato, neófita en la materia.

La cosa podría ir de mujeres y en esa quiniela figura también otro cargo del Ministerio de Sanidad, Susana Camarero, que fue nombrada recientemente secretaria de Estado de Igualdad y Servicios Sociales cuando quien ocupaba ese cargo, Juan Manuel Moreno Bonilla, fue elegido para liderar al PP andaluz.

Nacida en 1970, Camarero era, previamente, portavoz de Servicios Sociales del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados. Licenciada en Derecho por la Universidad de Valencia, casada y con un hijo, ha sido diputada en las Cortes Valencianas entre 1995 y 2000.

Fuentes del entorno del PP consideran que esta segunda opción tiene menos posibilidades porque apenas lleva siete meses en su actual responsabilidad dentro del Ministerio.

En este sentido, tampoco consideran muy probable que Rajoy opte por elegir un perfil más político, como el del consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha José Ignacio Echániz, responsable del área de Sanidad en Génova 13 por delegación, también, de María Dolores de Cospedal. Echániz es el único político que ha sido consejero del ramo en dos comunidades autónomas distintas, Madrid y CLM. Su perfil, sin embargo, se aleja por completo de los tecnócratas del gusto del presidente del Gobierno.

Por último, la lista de aspirantes la completa un diputado, Rubén Moreno, cuyo trabajo en la Comisión de Sanidad del Congreso ha sido del gusto de Moncloa en los últimos meses a raíz de la crisis del ébola. Sus intervenciones como portavoz en esos días y sus críticas a las declaraciones que hizo en su día el consejero madrileño contra Teresa Romero fueron bien valoradas en el entorno de la presidencia. Él, sin embargo, se autodescarta por completo, según ha manifestado personalmente a este diario a última hora de este miércoles. Su currículo, sin embargo, podría avalar perfectamente su candidatura. Doctor en Medicina, ha sido director general del Centro de Investigación Príncipe Felipe, secretario general de Gestión y Cooperación Sanitaria, presidente del INSALUD, subsecretario de Sanidad de la Generalitat Valenciana, director general del Servicio Valenciano de Salud y miembro del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud. Rajoy, sin embargo, les hará esperar a todos. Al menos, hasta este jueves.